Samantha Hudson, la ¡°bujarra¡± que da ca?a al fascismo espa?ol
La artista, activista del colectivo LGBTI, publica una provocadora canci¨®n para denunciar ¡°el clima repugnante y denigrante¡± causado por la ultraderecha
Aparece la silueta del famoso toro de Osborne y, poco despu¨¦s, bajo los acordes de una especie de pasodoble espa?ol, un grupo de travestis, que se ha quedado tirado con el coche, entra en un bar de carretera. Podr¨ªa ser el conocido Casa Pepe de Despe?aperros, pero poco importa: es un bar franquista, repleto de hombres dispuestos a pegarse porque han entrado ¡°maricones¡± en su territorio. Se arm¨® el bel¨¦n. Hay pelea y la m¨²sica se acelera a ritmo de una tecnorumba que recuerda a Camela mientras se canta: ¡°Soy un tab¨², un maric¨®n, judeomas¨®n, Belceb¨² / Una fulana, una bruja vud¨² / Soy la bujarra con la que sue?as t¨²¡±. Es el videoclip de la canci¨®n Por Espa?a, el ¨²ltimo lanzamiento de Samantha Hudson, de 22 a?os, artista multidisciplinar, famosa por sus performances y activista del colectivo LGBT espa?ol.
Publicada el 12 de octubre, D¨ªa de la Hispanidad, Por Espa?a es pura provocaci¨®n ante el avance de la ultraderecha espa?ola y en mitad de un ambiente social en el que proliferan los mensajes de odio y hay agresiones hom¨®fobas. ¡°Esta canci¨®n sin consecuencias no tendr¨ªa sentido. Precisamente para lo que sirve la provocaci¨®n es para poner en evidencia todo el camino que queda por recorrer¡±, cuenta Samantha Hudson. ¡°Sin lugar a dudas, el objetivo es provocar la reacci¨®n que ponga de manifiesto que el fascismo sigue vivo. O, m¨¢s bien, sigue viVox¡±, a?ade.
Obra original del grupo mallorqu¨ªn Papa Topo, la canci¨®n guarda una est¨¦tica muy potente, mientras juega con los s¨ªmbolos: el toro bravo, las banderas, los machirulos, Franco, los militares¡ Todo es un revuelo alocado de im¨¢genes para dar un golpe en el est¨®mago ¡°al facher¨ªo¡±. ¡°Cualquier nacionalismo me parece un absurdo. No estoy para nada interesada en darle ning¨²n significado a la bandera. No quiero hacer una reforma, sino destruir lo que ya existe¡±, explica Hudson, quien en su condici¨®n de travesti, se lo intenta montar con el dictador en el videoclip mientras canta: ¡°Me gusta mucho tu aguilucho, como le gusta la trucha al trucho / Por Espa?a, Paco, me pones bellaco, contra la pared, ven fus¨ªlame / Por Espa?a papi, d¨¦jame bien guapi, d¨¦jame coqueta en una cuneta¡±.
Samantha Hudson es el nombre art¨ªstico de Iv¨¢n Gonz¨¢lez, cantante que se dio a conocer con la canci¨®n Soy maric¨®n, un proyecto audiovisual que a los 15 a?os present¨® como un trabajo de instituto en Mallorca, pero que, una vez subido a YouTube, acab¨® por convertirse en 2015 en un ¨¦xito viral por su controvertido mensaje de ataque a la Iglesia cat¨®lica y su postura respecto a la diversidad sexual. Tambi¨¦n fue un elemento de pol¨¦mica: hubo recogidas de firmas de parroquias para quitar el v¨ªdeo, el Defensor del Menor abri¨® un expediente y partidos como Ciudadanos criticaron duramente la ¡°blasfemia¡±. ¡°Para bien o para mal me ha situado donde estoy, as¨ª que tambi¨¦n le estoy muy agradecido a la Iglesia cat¨®lica porque, gracias a ella, tengo una carrera y les puedo seguir dando por culo¡±, asegura Samantha Hudson, que tras vivir en Barcelona, recal¨® en Madrid, donde se dio a conocer con actuaciones en Chueca junto a Paco Clavel, y protagoniz¨® su propio documental en Filmin, Samantha Hudson, una historia de fe, sexo y electroqueer (2018).
La marcha neonazi
Ahora, busca denunciar hechos recientes. ¡°Franco ha muerto, pero el fascismo sigue vivo¡±, afirma. ¡°Sigue siendo una parte muy latente de la sociedad espa?ola. Mucha gente se piensa que ya lo tenemos superado y, sin embargo, se ve en las instituciones, con la inclusi¨®n de partidos ultraderechistas y neofascistas ocupando cargos p¨²blicos y puestos en el Congreso de los Diputados. No me atrever¨ªa a decir si estamos peor que antes, pero creo que, simplemente, las cosas tampoco han mejorado demasiado¡±. Y pone ejemplos recientes, como una supuesta agresi¨®n hom¨®foba que acab¨® en julio pasado con la muerte de Samuel Luiz en A Coru?a o la marcha neonazi en Chueca el pasado septiembre al grito: ¡°?Fuera sidosos del barrio!¡±. ¡°Eso s¨ª que fue una provocaci¨®n y no mi videoclip. Era un clima real, repugnante y denigrante. Siento verg¨¹enza porque era una manifestaci¨®n autorizada por el Gobierno y atentaba contra la diversidad¡±.
Dentro del concurrido panorama musical espa?ol, pocos artistas son tan provocativos, pero tambi¨¦n tan valientes. Los m¨²sicos solo parecen preocupados por regresar a los escenarios y no solaparse unos con otros en el embudo promocional del regreso pospandemia. ¡°Me gustar¨ªa que la gente se mojara m¨¢s pol¨ªticamente. Yo tampoco s¨¦ si tengo la mejor postura y tal vez tengo bastantes errores, pero desde luego creo que la cultura y el arte tienen bastante poder a la hora de hacer denuncias. Me parece una herramienta que quiz¨¢ est¨¢ en desuso o no est¨¢ siendo bien aprovechada¡±, explica Samantha Hudson, quien presentar¨¢ su nuevo espect¨¢culo el 23 de Octubre en el Teatro Gayarre de Pamplona y el 28 de Diciembre en el Teatro Campos El¨ªseos. Y afirma que podr¨ªa hacer m¨¢s canciones con otros asuntos ¡°preocupantes¡±. ¡°En Espa?a hay un mont¨®n de prejuicios contra la inmigraci¨®n. Hay un mal enfoque de esa supuesta ciudadan¨ªa. El resto de temas ya se lo sabe cualquiera: machismo, racismo y LGTBIfobia¡±.
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