Parque Ast¨¦rix: ?Por Tutatis, vaya monta?a rusa!

Hay un lugar donde puedes cotillear en casa de Ob¨¦lix (siempre hay un jabal¨ª en el asador y cascos romanos abollados en la ventana), contemplar a Cleopatra navegando en su barco, enrolarte en las legiones, ver pasar volando un menhir y sentir, si no que el cielo cae sobre tu cabeza, s¨ª que te precipitas vertiginosamente de lo alto con los pies hacia arriba: ?por Tutatis, vaya monta?a rusa! Es el Parque Ast¨¦rix (Parc Ast¨¦rix), en Plailly, en el norte de Francia, a 35 kil¨®metros de P...

Hay un lugar donde puedes cotillear en casa de Ob¨¦lix (siempre hay un jabal¨ª en el asador y cascos romanos abollados en la ventana), contemplar a Cleopatra navegando en su barco, enrolarte en las legiones, ver pasar volando un menhir y sentir, si no que el cielo cae sobre tu cabeza, s¨ª que te precipitas vertiginosamente de lo alto con los pies hacia arriba: ?por Tutatis, vaya monta?a rusa! Es el Parque Ast¨¦rix (Parc Ast¨¦rix), en Plailly, en el norte de Francia, a 35 kil¨®metros de Par¨ªs, un recinto tem¨¢tico de 47 atracciones y espect¨¢culos que ofrece mucha diversi¨®n para toda la familia y hace las delicias de los fanes de los galos irreductibles creados por Goscinny y Uderzo (entrada a 53 euros para los adultos y a 45, los ni?os, que se ha redondeado a 45 para todos estas Navidades).

En el parque, seg¨²n ha podido apreciar este enviado especial a la aldea gala irreductible, tienes la posibilidad de vivir, si te atreves, sensaciones fuertes como las que proporciona o m¨¢s bien inflige Oziris, una monta?a rusa de aqu¨ª te espero en la zona ambientada en el Egipto de Ast¨¦rix y Cleopatra, y en la que literalmente vuelas cabeza abajo haciendo loopings vertiginosos. A los pusil¨¢nimes (¡°timidus es homo qui futura praevidere potest¡±, que dir¨ªa Patapalo), siempre nos quedar¨¢n atracciones como Les Petits Drakkars, un pase¨ªto en barquitos como el de los desgraciados piratas de Barbarroja a los que echan a pique indefectiblemente Ast¨¦rix y Ob¨¦lix. El parque ofrece tambi¨¦n momentos divertid¨ªsimos como el pase de la pel¨ªcula en 4D de Estudios Id¨¦fix Attention Menhir!, que se proyecta en una sala con butacas din¨¢micas capaces de hacerte sentir que saltas, corres o te salpican la cara mientras de la pantalla emerge tan realistamente uno de los megalitos lanzados por Ob¨¦lix que hace que te agaches para que no te aplaste.

Paseando por el recinto, rodeado de bosques en los que, por cierto, hay jabal¨ªes de verdad, tambi¨¦n puedes disfrutar de experiencias tan emocionantes como un encuentro con el mism¨ªsimo Panor¨¢mix, una visita a la pescader¨ªa de Ordralfab¨¦tix o subirte al escudo de Abrarac¨²rcix, aguantado por dos guerreros, para disfrutar de la perspectiva del jefe. La reconstrucci¨®n de la aldea gala ¡ªque nunca ha tenido nombre y de la que solo sabemos que est¨¢ en la Arm¨®rica, en la pen¨ªnsula bretona, y cerca del mar¡ª es encantadora: puedes deambular por ella (no es buena idea hacerlo ataviado de romano) y visitar las casas de los principales personajes, cuya tribu gala por cierto desconocemos, aunque podr¨ªan ser coriosolitas u orismos.

Varias atracciones est¨¢n inspiradas directamente en ¨¢lbumes de Ast¨¦rix y hasta han aparecido en las vi?etas. Las instalaciones se encuentran divididas por sectores tem¨¢ticos ¡ªGalia, Roma, Grecia (a visitar el kiosco de churros de Fritapopoulos), Egipto y Vikingos¡ª y ambientadas bas¨¢ndose en los c¨®mics. Hay decenas de propuestas desde las attractions ¨¤ sensations (Goudutrix, La Gal¨¨re, La trace du hourra) para los m¨¢s valientes hasta los planes pour les petits gaulois como los tiovivos. En una zona que recrea un fuerte romano puedes alistarte como quintacolumnista en el ej¨¦rcito de C¨¦sar al estilo de Ast¨¦rix legionario.

Otra posibilidad a considerar es dejarte caer en una marmita. El parque est¨¢ dominado por una monta?a en cuya cima atalaya las instalaciones una figura de Ast¨¦rix. Existe una zona que no tiene que ver con los dibujos y que resigue la historia de Francia a partir de la Edad Media con decorados y espect¨¢culos de circo y patinaje (incluye una representaci¨®n en la que se observa literalmente c¨®mo se hunde un paquebote moderno). Los propios visitantes pueden ser una atracci¨®n m¨¢s como el conocido poeta catal¨¢n que paseaba estos d¨ªas por el parque ataviado con uno de los gorros en forma de jabal¨ª que se venden en las tiendas de recuerdos y recitando insistentemente versos de Josep Carner, lo que le hac¨ªa firme candidato a acabar como el bardo Asurancet¨²rix.

La visita al parque con el ¨²ltimo libro (el 39), Ast¨¦rix tras las huellas del grifo, bajo el brazo tiene la gracia de que, aunque has de ir abrigado, te parece que hace menos fr¨ªo: la historia, muy buena, de Jean-Yves Ferri y Didier Conrad (quinto ¨¢lbum de la pareja) transcurre en las nevadas y g¨¦lidas tierras de los s¨¢rmatas o saur¨®matas (piel de reptil en referencia, seg¨²n algunos, a sus armaduras de escamas), en los confines del Barb¨¢ricum. Algunos elementos del nuevo c¨®mic ya se han integrado en el recinto: en la zona L¡¯ aventure Ast¨¦rix, la m¨¢s literaria, una exposici¨®n que permite descubrir l¨²dicamente muchas cosas de los c¨®mics, como todos los cameos (de Sean Connery a Alain Prost pasando por Jean Marais o Coluche), incluye un jarr¨®n pintado con la criatura mitol¨®gica que le da la idea a Julio C¨¦sar de lanzar la expedici¨®n en busca del animal.

El parque, que ocupa 80 hect¨¢reas (34 del recinto propiamente dicho, 26 de aparcamiento y 20 de los tres hoteles del complejo), funciona desde hace 32 a?os en los que no ha parado de evolucionar y ampliarse, y en el curso de los cuales ha atra¨ªdo a m¨¢s de 50 millones de visitantes. Parad¨®jicamente, el Parque Ast¨¦rix, el segundo de Francia en importancia tras Disneyland Par¨ªs, es poco conocido en Espa?a, pese a que los espa?oles se cuentan entre los mayores lectores de los ¨¢lbumes de los c¨¦lebres galos, solo por detr¨¢s de los franceses y los alemanes y en estrecha competencia con los aficionados de Pa¨ªses Bajos. Un 75% de los espa?oles, de hecho, ignoran que existe el parque, seg¨²n los responsables del mismo, y muchos de los que han o¨ªdo hablar de ¨¦l no sabr¨ªan ubicarlo.

Uno de los objetivos de la direcci¨®n del recinto es conseguir que acudan m¨¢s visitantes de nuestro pa¨ªs en el convencimiento, seg¨²n expresa el director adjunto de explotaci¨®n del parque, S¨¦bastien Retailleau, de que re¨²ne atractivos de sobra para conseguirlo. A tal efecto, se han conjurado como ¡°aliados estrat¨¦gicos¡± el Parque Ast¨¦rix, la editorial Salvat, editora en Espa?a las aventuras de los galos, y Renfe-SNCF en cooperaci¨®n, que llevan viajeros en alta velocidad de Barcelona a la Gare de Lyon de Par¨ªs (desde donde hay lanzaderas hasta el parque) y que destacan que en tren se causan 80 veces menos emisiones de CO2 que en avi¨®n.

El parque, en el que actualmente trabajan 1.500 personas (300 permanentes) y que pertenece al mismo grupo que Futurescope, Compagnie des Alpes, se inaugur¨® en 1989 por voluntad de Goscinny y Uderzo. El pasado 2019 logr¨® su r¨¦cord de visitantes, 2.300.000. El p¨²blico es fundamentalmente regional, con un 80% procedente del norte de Francia, sobre todo de Par¨ªs, y tan s¨®lo un 7% de extranjeros, la mayor¨ªa belgas y brit¨¢nicos. Seg¨²n Retailleau, se aspira a recuperar los visitantes tras la epidemia de covid (en el parque y los hoteles son obligatorios los pasaportes covid y la mascarilla) y aumentarlos, con la idea de que Ast¨¦rix ¡°tiene todas las armas para luchar de t¨² a t¨² con Mickey Mouse¡±. El parque, abierto 200 d¨ªas al a?o (esta Navidad, hasta el 2 de enero), tiene una oferta estacional que incluye su reconversi¨®n en tem¨¢tica del horror durante las fechas de Halloween y la Navidad gala, que permite im¨¢genes algo tan chocante como ver a Ast¨¦rix departiendo con Pap¨¢ Noel.

Entre las novedades que prepara el parque, est¨¢ la reapertura de la monta?a rusa de madera El trueno de Zeus (uno de los iconos del recinto), que aumentar¨¢ su emoci¨®n y estar¨¢ lista en abril, as¨ª como un nuevo desfile tem¨¢tico con tres carrozas. Para 2023 entrar¨¢ en funcionamiento una nueva atracci¨®n, Tutatis, una monta?a rusa de categor¨ªa 7 que tendr¨¢ el r¨¦cord de velocidad en Francia (110 kil¨®metros por hora, que se alcanzan desde cero a tres segundos). El a?o 2024 ser¨¢ especial para el parque al cumplirse su 35 aniversario y el 65 de Ast¨¦rix, lo que se celebrar¨¢ con un gran desfile y un musical. Tambi¨¦n se proyecta construir un cuarto hotel. El ¨²ltimo hasta ahora, el nuevo Les Quais de Lut¨¦ce, ha hecho una gran apuesta por la ambientaci¨®n y reproduce una parte de la vieja ciudad gala de Lutecia junto al Sena en est¨¦tica de c¨®mic y con muchos gui?os a Ast¨¦rix. En el restaurante self service, los camareros van ataviados de ¨¦poca gala, adornan las paredes cascos y espadas (?y el fresco de dos grifos!) y es posible comer salchichas de jabal¨ª, as¨ª como beber poci¨®n m¨¢gica (con f¨®rmula secreta que incluye zumo de naranja).

Entre los que se atrevieron a subir a la gran monta?a rusa el lunes estaba ¡ªno en balde hizo la mili en aviaci¨®n y vol¨® en misiones con parachutistes al Congo¡ª Emmanuel Christien, director del ¨¢rea infantil y juvenil del grupo Anaya (Hachette Espa?a), que publica los ¨¢lbumes de Ast¨¦rix en Salvat. Christien considera que para los lectores de las aventuras del galo el parque es una extensi¨®n sensacional y constata la buena salud editorial de Ast¨¦rix expresada en la apuesta por el nuevo t¨ªtulo, del que se han colocado ya en el mercado espa?ol 200.000 ejemplares, 150.000 en castellano, 30.000 en catal¨¢n y el resto en gallego, euskera y asturiano. En total, la primera tirada del nuevo t¨ªtulo ha sido de cinco millones de ejemplares (tres en Francia), de momento en 17 lenguas (los libros de Ast¨¦rix, de los que se llevan vendidos de las 39 aventuras 350 millones de unidades, se traducen a 130 idiomas). Christien se?ala que el plan es que Ferri y Conrad sigan con un nuevo ¨¢lbum cada dos a?os (alternando viajes de los protagonistas y peripecias en casa) y avanza que en 2024 habr¨¢ muchos productos con ocasi¨®n del aniversario. De momento, se est¨¢n publicando ediciones de gran formato con material extra y obras paralelas, como los libros dedicados a la verdad hist¨®rica tras Ast¨¦rix o a los pueblos con los que se encuentra el galo en sus viajes. Pronto se traducir¨¢ un librito de aventuras de Id¨¦fix con otros perros en Lutecia. El t¨ªtulo m¨¢s vendido en Espa?a es Ast¨¦rix en Hispania, seguido del fundacional Ast¨¦rix el galo y de Ast¨¦rix y Cleopatra.

¡°Los fanes de Ast¨¦rix siguen siendo muy fanes¡±, recalca el editor, que considera que ¡°Ast¨¦rix es toda una forma de ser europeo¡±. Christien destaca del nuevo libro la paritaria aparici¨®n de las amazonas que muestra el camino recorrido desde cuando las mujeres en Ast¨¦rix eran amas de casa y se?oras de... Hist¨®ricamente, aunque ech¨¢ndole tambi¨¦n mucha imaginaci¨®n, Ast¨¦rix tras las huellas del grifo est¨¢ muy trabajado y ya la identificaci¨®n de los s¨¢rmatas con las amazonas la hicieron los historiadores griegos como Her¨®doto.

En la aventura, cuyo t¨ªtulo en castellano supuso muchos quebraderos de cabeza para los editores dada la polisemia de la palabra grifo, que pod¨ªa desbaratar toda la gracia de la criatura mitol¨®gica (se opt¨® por retitular a?adiendo ¡°tras las huellas¡± para resaltar que era un animal y no una llave de ca?er¨ªa), Ast¨¦rix, Ob¨¦lix y Panor¨¢mix viajan al pa¨ªs de los s¨¢rmatas (colocado fantasiosamente m¨¢s al norte, en el Alt¨¢i) a requerimiento de un cham¨¢n que ha pedido ayuda al druida. Descubrimos que a Ob¨¦lix le sienta fatal el kumis, la bebida de leche de yegua fermentada. En paralelo avanza una expedici¨®n romana enviada por C¨¦sar en busca del m¨ªtico grifo para exhibirlo en la arena del anfiteatro.

A destacar en el contingente romano, que lleva a una amazona capturada, Kalashnikova (jajajaja), a un ge¨®grafo igualito a Michel Houellebecq (un cameo con gui?o al autor de la novela El mapa y el territorio), un venatore, un gladiador especializado en el combate con fieras, y un contingente de sufridos legionarios deliciosamente respondones, incluido el alarmista Feiknius, tipo ciza?a. Tenemos acreditado por Amiano Marcelino un choque de s¨¢rmatas y romanos pero es en el siglo IV en Panonia (se perdieron dos legiones).

El dinosaurio y el grifo

La idea del tricer¨¢tops congelado no es tan disparatada como podr¨ªa parecer: los autores han recogido la propuesta de la estudiosa Adrienne Mayor (The first fossil hunters, 2000) de que los f¨®siles de animales prehist¨®ricos fueron la inspiraci¨®n para las criaturas m¨ªticas de griegos y romanos. Concretamente, el grifo, guardi¨¢n de tesoros con cuerpo de le¨®n, garras, alas y pico de ave rapaz, podr¨ªa haberse basado, sostiene Mayor (especialista tambi¨¦n en amazonas, por cierto), en f¨®siles de protocer¨¢tops, del mismo grupo que el tricer¨¢tops y que ten¨ªa pico y esa caracter¨ªstica protecci¨®n del cuello que podr¨ªa parecer unas alas. En cuanto a las amazonas, representadas como grandes y simp¨¢ticas guerreras y jinetes (una, Krakatova, le tira los tejos a Ob¨¦lix, quien, por cierto, en su caba?a en el parque Ast¨¦rix tiene una foto de su gran amor, Falbala), no hay ninguna menci¨®n ni broma sobre la leyenda de que se cortaban el pecho derecho para manejar mejor el arco. No es ese el terreno del mito que frecuentan nuestros queridos galos.

Por ¨²ltimo, una recomendaci¨®n: si te pierdes en el parque, no preguntes por Alesia¡­