Ast¨¦rix se cae en la marmita de la bronca pol¨ªtica

No solo el deseo de Ob¨¦lix de probar una vez m¨¢s la poci¨®n m¨¢gica del druida Panor¨¢mix raya en la obsesi¨®n. Pr¨¢cticamente desde su aparici¨®n, hace ya m¨¢s de 60 a?os, Francia en general, y muchos de sus pol¨ªticos en particular, han sentido una profunda atracci¨®n y deseo de apropiaci¨®n de los h¨¦roes de la aldea m¨¢s irreductible de la Galia y el mensaje de resistencia que ven en ellos. La llegada a las librer¨ªas francesas ¡ªy de todo el mundo¡ª el 21 de octubre del nuevo ¨¢lbum, Ast¨¦rix tras las huellas del Grifo, en medio de una campa?a electoral francesa ya acalorada a pesar de que apenas ha comenzado, puede hacer bullir de nuevo la marmita de las tentaciones pol¨ªticas.

Al fin y al cabo, el peque?o pero valiente Ast¨¦rix y su orondo y fiel amigo Ob¨¦lix son, probablemente, los referentes franceses m¨¢s internacionalmente conocidos y reconocidos, junto a Napole¨®n y Charles de Gaulle. Y no son pocos los pol¨ªticos que, tanto desde la izquierda como de la derecha, han tratado una y otra vez en las pasadas d¨¦cadas de sacar r¨¦dito del exitoso mundo creado por Ren¨¦ Goscinny y Albert Uderzo, ahora en manos de otro d¨²o, el guionista Jean-Yves Ferri y el dibujante Didier Conrad.

Desde que tomaron el testigo en 2013 con Ast¨¦rix y los Pictos, tanto Ferri como Conrad han ido llenando las vi?etas de referencias a la actualidad. En el pen¨²ltimo tomo, La hija de Vercing¨¦torix, introdujeron por fin a un personaje femenino no estereotipado, Adrenalina. Y ahora, con Ast¨¦rix tras las huellas del Grifo, en el que los galos m¨¢s famosos emprenden una expedici¨®n al este para ayudar al poco conocido pueblo s¨¢rmata a proteger a su t¨®tem, el Grifo, un animal m¨ªtico que los romanos quieren aprehender para su c¨¦sar, aluden a la cuesti¨®n de la preservaci¨®n del medio ambiente.

En el ¨²ltimo n¨²mero, adem¨¢s, como es tradici¨®n, al menos uno de los personajes evoca a una figura famosa que les sirve para nuevos gui?os a temas actuales. Con el Grifo llega el ge¨®grafo del C¨¦sar, Terrinconnus, clavado al escritor franc¨¦s Michel Houllebecq y que les sirve, seg¨²n adelantaron en la presentaci¨®n del tomo el lunes en Par¨ªs, para abordar, con el espejo de la antig¨¹edad, cuestiones candentes como ¡°el clima de escepticismo ante las informaciones¡± de hoy d¨ªa. Excepcionalmente, con ocasi¨®n de la salida del ¨¢lbum, Ast¨¦rix y Ob¨¦lix se han prestado a ser ¡°embajadores¡± de la libertad de prensa de Reporteros Sin Fronteras (RSF).

A pesar de ello, al igual que hicieran sus predecesores, Conrad y Ferri rechazan un uso ideologizado de sus personajes. ¡°Lo que m¨¢s me molesta es que siempre se le d¨¦ un giro pol¨ªtico, porque yo siempre recuerdo la manera en que le¨ªa Ast¨¦rix de ni?o y el aspecto pol¨ªtico, honestamente, me importaba un pimiento¡±, dijo a EL PA?S Conrad en la presentaci¨®n.

Pero la politizaci¨®n de Ast¨¦rix comenz¨® bien pronto, durante la presidencia del por lo dem¨¢s poco chistoso general Charles de Gaulle, nombrado presidente en 1958, apenas unos meses antes de que nacieran Ast¨¦rix y Ob¨¦lix en las p¨¢ginas de la revista Pilote. Aunque en alg¨²n momento lleg¨® a bromear afirmando que su ¡°¨²nico rival internacional¡± era Tint¨ªn, el coraz¨®n del general estaba con el guerrero galo. Como revelar¨ªa entre risas Uderzo a?os despu¨¦s, uno de sus ministros, Fran?ois Missoffe, le dijo en 1968: ¡°Tengo que contarle una cosa: el otro d¨ªa, en el Consejo de Ministros, De Gaulle nos llam¨® a cada uno de nosotros rebautiz¨¢ndonos con nombres de sus personajes¡±.

Los debates sobre si la obra de Goscinny y Uderzo representa los valores de la izquierda o los de la derecha francesa han alimentado libros y exposiciones. Y su fama de gaullistas, una etiqueta que por lo dem¨¢s reivindica en Francia pr¨¢cticamente todo el espectro pol¨ªtico, ha persistido hasta hoy. ¡°Firmemente conservador, animado por una conciencia nacional fuerte, pero a la vez amante de la justicia y desconfiado frente la econom¨ªa de mercado, Ast¨¦rix podr¨ªa ser una mascota, m¨¢s a¨²n, una figura tot¨¦mica, del gaullismo¡±, escrib¨ªa en 2014 el alto funcionario y macronista Simon Laplace en un art¨ªculo titulado ?Es Ast¨¦rix de derechas? en la revista digital Profondeurduchamps. Tanto Goscinny como Uderzo rechazaron siempre cualquier afiliaci¨®n pol¨ªtica. Tampoco aceptaron los m¨²ltiples intentos de partidos y candidatos a lo largo de los a?os de usar las im¨¢genes de sus h¨¦roes o buscar el apoyo de sus autores, como lo hicieron Jacques Chirac primero y Nicolas Sarkozy despu¨¦s.

Anne Goscinny, hija del guionista, fallecido en 1977, es taxativa. ¡°Ast¨¦rix y Ob¨¦lix fueron creados por mi padre y por Albert [Uderzo] por una sola causa y un solo partido: el partido de nada¡±, declar¨® durante la presentaci¨®n. ¡°Ast¨¦rix y Ob¨¦lix no hacen pol¨ªtica, jam¨¢s servir¨¢n de portaestandartes de un partido¡±, insisti¨®. Para ella, ¡°si Ast¨¦rix y Ob¨¦lix funciona en todo el mundo es porque todos tenemos algo de galos en un cierto sentido. Personalmente, tengo pocos ancestros galos, mi madre es de origen italiano y belga, mi padre era 100% eslavo. Pero creo que todos, en el fondo, ya sea de manera colectiva o ¨ªntima, somos resistentes, y creo que Ast¨¦rix va de resistencia¡±.

Es precisamente esa idea la que, seg¨²n los analistas, hace que tantos franceses de diverso signo se hayan sentido identificados con Ast¨¦rix generaci¨®n tras generaci¨®n desde la era De Gaulle y su proclamada resistencia ante toda forma de imperialismo. La resistencia de esa aldea fortificada, rodeada de legiones romanas, refleja la ¡°excepci¨®n cultural¡± de los franceses contempor¨¢neos y las reticencias a la globalizaci¨®n, escribi¨® en 1985 el analista pol¨ªtico Alain Duhamel en Le Complexe d¡¯Ast¨¦rix.

D¨¦cadas despu¨¦s, siguen reivindicando a los h¨¦roes galos representantes tan opuestos de Francia como los chalecos amarillos y el ¡°irreductible¡± presidente, Emmanuel Macron, como lo llam¨® su esposa, Brigitte Macron, al visitar en primavera una exposici¨®n de Uderzo, fallecido en 2020.

¡°No podemos impedir a la gente apropiarse de Ast¨¦rix, porque es un personaje popular que conmueve a todo el mundo¡±, replica Anne Goscinny. Pero asegura, y dice hablar tambi¨¦n por la hija y heredera de Uderzo, Sylvie, ¡°que siempre estaremos en contra de confiar a Ast¨¦rix a cualquier partido, ya sea de izquierda o derecha, porque de los extremos ni hablamos. [Los c¨®mics] pertenecen a todo el mundo y est¨¢n hechos para hacer re¨ªr¡±. ¡°En Ast¨¦rix, la pol¨ªtica jam¨¢s es frontal, nunca han sido partidarios de una pol¨ªtica u otra, siempre son dosis homeop¨¢ticas a trav¨¦s de los personajes¡±, coincide Ferri. Y si defienden valores, son universales, acota Anne Goscinny: ¡°La amistad, la tolerancia, la camarader¨ªa, ayudar a pueblos amigos y, sobre todo, lograr que todo acabe en un banquete en torno al cual todos se re¨²nen¡±. Salvo el bardo si intenta cantar, claro est¨¢.