El dibujo original de la portada de ¡®Tint¨ªn en Am¨¦rica¡¯, a subasta por 2,2 millones de euros en Par¨ªs

No es una ilustraci¨®n cualquiera. El dibujo original de la tercera edici¨®n del ¨¢lbum Tint¨ªn en Am¨¦rica, que muestra al joven reportero atado a un poste de madera, se subastar¨¢ el 10 de febrero del pr¨®ximo a?o en la casa Artcurial de Par¨ªs. La obra, realizada en tinta china por el dibujante belga Herg¨¦ en 1942, est¨¢ valorada entre 2,2 y 3,2 millones de euros.

Las subastas de dibujos de Georges Remi, Herg¨¦ (1907-1983) suelen generar mucha expectativa entre los tintin¨®filos. El precio r¨¦cord lo tiene por ahora la portada original del quinto ¨¢lbum de la saga, El loto azul, una acuarela de 1936 adquirida por un coleccionista por 3,1 millones de euros en 2021.

Las obras de Herg¨¦ se han transformado en verdaderos objetos de culto. Uno de los precursores del c¨®mic, ¡°ejerci¨® una enorme influencia en la mayor¨ªa de los creadores que le siguieron¡±, resalta por correo electr¨®nico Philippe Goddin, uno de sus bi¨®grafos y secretario general de la Fundaci¨®n Herg¨¦ hasta 1999.

¡°Es muy raro encontrar la portada de un ¨¢lbum de Tint¨ªn en el mercado¡±, a?ade ?ric Leroy, experto en c¨®mic de la casa de subastas Artcurial. La que est¨¢ en venta, dibujada para la reedici¨®n en color de Tint¨ªn en Am¨¦rica (1946), provoca cierta intriga.

En primer plano se ve a un amerindio enfadado que, de espaldas a Tint¨ªn, le se?ala con una mano mientras agarra un hacha de guerra con la otra. A unos metros, dos nativos observan la escena y Mil¨², el perro del joven reportero, se esconde detr¨¢s de su due?o. Aunque solo representa una parte de la historia, el dibujo revela la manera en la que trabajaba Herg¨¦.

El artista no viaj¨® a Estados Unidos hasta los a?os setenta, pero sus archivos personales demuestran que sent¨ªa una gran fascinaci¨®n por ese pa¨ªs. De hecho, envi¨® a casi todos sus h¨¦roes a ese lejano territorio, incluido Totor, el boy scout precursor de Tint¨ªn.

Fascinaci¨®n por los pueblos nativos

Para intentar representar de manera m¨¢s correcta las ciudades, escenas cotidianas y paisajes del pa¨ªs, el belga se sumerg¨ªa en las noticias que llegaban a Europa. En los a?os treinta, cuando empez¨® a elaborar vi?etas, se hablaba de g¨¢nsteres en Chicago, de Al Capone y de la Gran Depresi¨®n. En Tint¨ªn en Am¨¦rica, el reportero est¨¢ inmerso en ese mundo durante la ¨¦poca de la prohibici¨®n. Adem¨¢s, Herg¨¦ recortaba fotos de revistas ¡ªcomo Le Crapouillot o Vu¡ª y las pegaba despu¨¦s en hojas cuidadosamente numeradas. A lo largo de los a?os, logr¨® reunir una documentaci¨®n ¡°considerable¡±, destaca Goddin, quien public¨® una monograf¨ªa sobre las relaciones del autor con EE UU. Todo estaba organizado en carpetas que reposaban en un armario met¨¢lico, cuenta. En unas hab¨ªa im¨¢genes de rascacielos. En otras, todo lo relativo a los amerindios: sus bailes, los campamentos donde viv¨ªan o la forma en que se vest¨ªan.

Su inter¨¦s por las poblaciones nativas empez¨® ya en la adolescencia, cuando formaba parte de los boy scouts. La organizaci¨®n ¡°idealizaba¡± a las naciones originarias y su relaci¨®n con la naturaleza, recuerda Goddin. El experto tambi¨¦n cita la influencia de los w¨¦sterns y los relatos de su padre de Buffalo Bill, el cazador de bisontes que se hizo famoso por sus espect¨¢culos sobre el Lejano Oeste.

Hubo tambi¨¦n libros que marcaron su manera de retratar Estados Unidos. Escenas de la vida futura (1930), de Georges Duhamel, le ofreci¨® una cr¨ªtica a la pujante sociedad de consumo. Otro texto, de 1928, inclu¨ªa retratos y detalles de los distintos pueblos ind¨ªgenas.

El sue?o de muchas generaciones

El dibujo que se subastar¨¢ en febrero, de 46 por 32,8 cent¨ªmetros, ¡°hizo so?ar a muchas generaciones de lectores¡±, destaca Leroy. Tint¨ªn en Am¨¦rica es el tercer ¨¢lbum de las aventuras del joven periodista y uno de los m¨¢s vendidos de la serie. Se public¨® en 1932, en blanco y negro. La portada cambi¨® tres veces, por petici¨®n de la editorial Casterman.

En la primera de estas ¨²ltimas se muestra a Tint¨ªn con un sombrero comiendo al aire libre mientras se acercan tres indios amenazantes. En la segunda, de 1937, se ve a un caballo bajando al galope de una monta?a mientras Tint¨ªn, montado en ¨¦l, trata de lanzar un lazo de vaquero. ¡°No olvides que las orejas del caballo deben ir hacia atr¨¢s¡±, le record¨® el hermano de Herg¨¦ cuando le pidi¨® consejos de dibujo.

La ¨²ltima portada se realiz¨® con el objetivo de atraer al lector porque, al final, el ¨¢lbum se centr¨® m¨¢s en el modernismo desenfrenado de Estados Unidos y los bandidos de Chicago. Pero Herg¨¦ siempre quiso ir m¨¢s lejos. A finales de los a?os cincuenta, empez¨® a idear un nuevo proyecto para llevar a Tint¨ªn con los sioux. Nunca lo termin¨®.

Cuando Herg¨¦ viaj¨® por fin a Estados Unidos en 1971, su mirada cambi¨®. En una entrevista asegur¨® incluso que el ¨¢lbum hab¨ªa sido ¡°fallido¡± y se disculp¨® por haberse dejado llevar ¡°por el ambiente y las ideas generales de la ¨¦poca¡±.