Dellafuente, el cantante que calla para que hablen sus canciones

Por lo que sea, Granada es tierra de m¨²sicos transgresores y, en lo que pueden, rebeldes. Gente particular que no quiere estar en el carril. Lo fue Enrique Morente, lo son Los Planetas y en cierto modo lo fue Miguel R¨ªos cuando en la d¨¦cada de los sesenta interpretaba rock en la mel¨®dica Espa?a del franquismo. Las nuevas generaciones ¨Dde 15 a 30 a?os, puede que incluso un poco m¨¢s¨D han encontrado tambi¨¦n a su m¨²sico granadino fuera de sitio. O mejor, en su peculiar sitio. Se llama Pablo Enoc Bayo Ruiz, tiene 30 a?os y naci¨® en Armilla, Granada. Pablo es Dellafuente para su p¨²blico y chino para sus amigos y, despu¨¦s de m¨¢s de una d¨¦cada de profesi¨®n, se mantiene en una reflexi¨®n constante sobre su m¨²sica. Ya lo anunciaba en un documental de febrero de 2020. ¡°Hay 200.000 artistas haciendo lo mismo, que han cogido el mismo camino, no los critico, me parece de puta madre. Pero, al final, somos uno m¨¢s dentro de este sonido que creo que est¨¢ sobreexplotado. ?Qu¨¦ hago? ?Aprovecho el momento de darle a la gente lo que realmente quiere o tiro para otro lado?¡±.

Dellafuente se ha respondido y ha actuado en consecuencia. Es probable que no haya cambiado radicalmente de sentido, pero es seguro que lleva tiempo transitando por ramales que a veces lo alejan y otras lo acercan a esa v¨ªa principal del trap y la m¨²sica urbana. Poco m¨¢s de tres a?os despu¨¦s de su ¨²ltimo concierto, en M¨¢laga el 15 de octubre de 2019, Dellafuente vuelve a escena. Y lo est¨¢ haciendo en Granada, con tres conciertos de jueves a s¨¢bado en los que ha convocado a 22.000 personas en una cita m¨²sico-teatral que hace un repaso a su vida. Las entradas se agotaron en poco tiempo.

Pablo es un muchacho t¨ªmido, dicen quienes lo tratan, lo que convierte a Dellafuente en un tipo aparentemente seco, poco hablador. ?l insiste en que son sus canciones las que hablan por ¨¦l y por eso ya no habla con los medios. No ha querido hablar con este diario, aunque su gente ha puesto todas las facilidades y lo ha sustituido amablemente. Dibujarle un retrato pasa entonces por asistir a alguno de los conciertos de estos d¨ªas o por tirar del hilo de sus letras. En la de La Recomell¨ªa explica la raz¨®n de su silencio: ¡°Rechazo comunicaciones. / Digo que no en las revistas. / Respeten mis decisiones. / Hay otros miles de artistas. / No tengo na que contarles. / que yo quiera que mencionen / To lo que es relevante / ya lo digo en las canciones¡±. En su c¨ªrculo a?aden que prefiere que se hable del esfuerzo colectivo, de su gente, m¨¢s que del suyo propio.

Los conciertos de ahora en Granada, en los que se escuchan m¨¢s de 30 temas, suponen un salto cuantitativo grande. En aforo, en medios y en objetivos. De salas de conciertos medianas ¨Dla ¨²ltima fue la Par¨ªs 15 de M¨¢laga, con aforo para 500 personas m¨¢s o menos¨D ha pasado al Palacio de Deportes y ha logrado reunir a 7.500 personas por noche. Con un gran despliegue esc¨¦nico, requiere 100 profesionales, entre especialistas tecnol¨®gicos, directores art¨ªsticos, de escena, de vestuario, etc.

Dellafuente, un m¨²sico muy granadino ¨Cgrana¨ªno, para ajustarlo m¨¢s¨D da estos d¨ªas un curioso salto adelante, despu¨¦s de varios a?os de reflexi¨®n, a juzgar por sus ¨²ltimas letras. M¨¢s volcado hacia dentro que nunca, ofrece, en cambio, el concierto m¨¢s grande posible. Un repaso a su vida en una funci¨®n durante la cual se suben al escenario 10 actores, un cuarteto de m¨²sica cl¨¢sica y amigos de profesi¨®n y vida: el d¨²o Pepe y V. Vizio, el Maka y el cantaor flamenco Israel Fern¨¢ndez, que demuestra por cierto la portentosa capacidad del flamenco para convivir con naturalidad con cualquier m¨²sica en el contexto que haga falta.

Dellafuente es un tipo muy del sur y muy valiente. Capaz de retirarse a sus aposentos en los ¨²ltimos tres a?os y sacar temas con cuentagotas, lo que comenz¨® hace m¨¢s de una d¨¦cada como un trap aflamencado compuesto a partir de sus propias letras ha ido enriqueci¨¦ndose hasta convertirse en una m¨²sica m¨¢s sofisticada en la que aparecen sin pudor, y por qu¨¦ tenerlo, letras de Federico Garc¨ªa Lorca o del tambi¨¦n poeta granadino Javier Egea. Hace unos a?os trabajaba en su pen¨²ltimo concierto, unos d¨ªas antes del de M¨¢laga, y en un v¨ªdeo de entonces dijo: ¡°Hemos cogido un poema de Federico Garc¨ªa Lorca y, como hac¨ªa falta m¨¢s letra, la he escrito yo¡±. Valor no le falta. Llevar a Federico a la m¨²sica urbana y, si hace falta, completarlo pide valent¨ªa. Fueron apenas un par de l¨ªneas ¨Des el tema Jaleo, basado en el lorquiano Romance de luna?¨D, pero ah¨ª estaba ¨¦l.

En su gusto por las v¨ªas alternativas, Pablo ha dado por muerto a Dellafuente en alguna ocasi¨®n. ¡°Tengo la luna y la cruz. / Taifa Yallah en mi club. / Ta to el mundo hablando / uf, Rest in peace pa Dellafu¡±, canta en Libertad y salud, una obra compuesta en 2020. Ah¨ª, adem¨¢s de darse por muerto, lo que significa que esto de Granada es una resurrecci¨®n, menciona su otro y curioso proyecto art¨ªstico. Es Taifa Yallah, ¡°el whisky de 12 a?os que tienes en casa y al que recurres en momentos especiales¡±, explica Ismael Jim¨¦nez, ¨ªntimo amigo de Pablo, director art¨ªstico inseparable y portavoz autorizado. Con un ¨²nico EP hasta la fecha, con m¨¢s tintes andalus¨ªes si cabe, Taifa Yallah se mantiene durmiente hasta que decida despertarlo su due?o.

Tras tres a?os de discreci¨®n, Dellafuente ha dejado claro que tiene miedo a desaparecer del escaparate. Y lo ratifica en sus canciones. ¡°A m¨ª no me importa cu¨¢nto subo, / m¨¢s me importa qui¨¦n conmigo viene. / Yo conozco uno que mucho tuvo / y hoy en d¨ªa ya nadie le quiere¡±, dice en Sanuk Sabai Saduak, tema aparecido en noviembre del a?o pasado. El t¨ªtulo responde a un proverbio tailand¨¦s que da idea tambi¨¦n del estado de ¨¢nimo del artista en este periodo de su vida: ¡°S¨¦ feliz. Permanece sereno. Cont¨¦ntate con aquello que la vida te ofrece¡±. Idea que reescribi¨® en su tema de hace unos meses K alegr¨ªa: ¡°Lo que esto dure eso Dios dir¨¢. / Cu¨ªdate mucho, de nadie abuses. / Que la balanza puede girar¡±. Pablo Enoc Bayo quiere llevar a Dellafuente por un camino de tranquilidad y sosiego que ¨Da falta de saber si habr¨¢ gira en los pr¨®ximos meses, y raro ser¨¢ que no la haya¨D el cantante ha roto tres d¨ªas en Granada en una cita que da cuentas de su pasado y, quiz¨¢, marca el camino del futuro, el de la modestia y tranquilidad en formato superproducci¨®n.