Lichis: ¡°C. Tangana me recuerda a muchas cosas de La Cabra Mec¨¢nica¡±

Directo, sin pelos en la lengua, de coraz¨®n castizo y amabil¨ªsimo, Lichis (Barcelona, 53 a?os) es uno de los compositores m¨¢s respetados del pop rock nacional, aunque, como los poetas malditos, transite siempre los callejones secundarios. La Cabra Mec¨¢nica fue su gran laboratorio sonoro y ahora celebra 25 a?os de Vestidos de domingo, un ¨¢lbum con aroma de cl¨¢sico que llen¨® de verbena corazones de todas las generaciones.

Pregunta. M¨¢s de dos d¨¦cadas de este disco. ?Cu¨¢l es el primer recuerdo que le viene de este ¨¢lbum?

Respuesta. Casi todos los que me llegan est¨¢n asociados a mi familia. Para ellos, fue algo muy importante. Para mis abuelos y mis padres. Fue la primera experiencia que vieron de que alg¨²n trabajo m¨ªo alcanzaba cierta notoriedad. Tambi¨¦n ayud¨® que el mensaje del disco era muy transversal y part¨ªa el tajo por muchas generaciones diferentes.

P. Alguna vez ha contado que iba por Lavapi¨¦s con la maqueta del disco y no le sal¨ªa nada.

R. As¨ª es. En 1997, llevaba muchos a?os trabajando como bajista y llevando maquetas por los bares. Era parte de mi trabajo. Tocaba muchas horas diarias el bajo, en grupos que me llamaban u otros que montaban, y luego sal¨ªa con una bolsa llena de maquetas a buscar suerte. Todav¨ªa no hab¨ªa m¨®vil.

P. ?Ayud¨® a La Cabra Mec¨¢nica ser teloneros en una gira de Celtas Cortos en 1999?

R. Fue una ayuda. Lo que pasa que antes de la salida del disco debi¨® pasar algo. Supongo que nos ayud¨® tambi¨¦n que, justo antes de grabar Vestidos de domingo, sali¨® Estopa. Fue un grupo con el que se nos comparaba mucho. Creo que, en ese momento, hab¨ªa un algo en el ambiente de que los tiros ten¨ªan que ir por ah¨ª. Se buscaba un producto as¨ª. Entonces, de alguna manera, fue como un cazo de agua hirviendo. Burbujeaba la situaci¨®n. La primera vez que tocamos con Celtas Cortos cantamos Felicidad y vino el t¨¦cnico de sonido todo entusiasmado con la canci¨®n. Hab¨ªamos tocado alg¨²n timbre.

P. Vestidos de domingo es visto ahora como un cl¨¢sico. ?Usted lo considera?

R. Quiz¨¢ es un disco que se ha vuelto a recolocar en un sitio. Tuvo su momento, pero no del todo. Tuvimos suerte, pero no la gran suerte en may¨²sculas. Y eso que muchos piensan que la tuvimos. Quiz¨¢ por el devenir de la m¨²sica actual y c¨®mo van los nombres del urban hay cierta imaginer¨ªa que le da al disco cierta actualidad.

P. ?Qu¨¦ pens¨® al escuchar a C. Tangana como El Madrile?o?

R. S¨ª, me recuerda mucho a cosas de La Cabra Mec¨¢nica y Albert Pla. Cuando empezamos, estaba el indie que era totalmente antifolclorista. Era en ingl¨¦s, adem¨¢s. Luego, estaba el mestizaje entendido solo y exclusivamente como herencia de Mano Negra y Manu Chao. Y estaba el hip hop. El rock estaba un poco en crisis. Nosotros en aquel momento practic¨¢bamos algo que ahora est¨¢ muy de moda y es una de las caracter¨ªsticas del trap: rapear mezclando melod¨ªa y recitado. No cantar una parte rapeada. La m¨²sica urban no es tan nueva. Cosas que se hacen ya se hac¨ªan. Cuando escucho a C. Tangana o a otros del trap, quiz¨¢ s¨ª veo esa forma que ten¨ªamos nosotros de contar las cosas, de transmitir el mensaje.

P. Hay un hilo directo e invisible que une a C. Tangana afrontando una canci¨®n como T¨² me dejaste de querer con La H¨²ngara con La lista de la compra, que cantaba usted con Mar¨ªa Jim¨¦nez.

R. S¨ª, s¨ª¡­ yo lo veo incluso en el acento. Cantar con el acento madrile?o. Nosotros ¨¦ramos un emblema de madrile?ismo, a pesar de que yo nac¨ª en Barcelona pero me crie en Madrid. Incluso me hizo mucha gracia una foto que vi en el disco de C. Tangana. Nosotros ten¨ªamos una foto en Vestidos de domingo est¨¢ como pintada y C. Tangana tambi¨¦n la ten¨ªa. Habr¨¢ habido influencias m¨¢s buscadas, m¨¢s casuales¡­ Pero, bueno, lo importante es que La Cabra Mec¨¢nica qued¨® en el subconsciente colectivo y este aniversario del disco ha venido en el momento justo.

P. ?Le hubiese gustado ser incluido en su n¨®mina de colaboradores, como Ketama, Kiko Veneno o Andr¨¦s Calamaro?

R. Ufff¡­ No lo s¨¦. No tengo ahora ning¨²n ego. No s¨¦ si igual si lo merecer¨ªa. Hace ya tiempo que no lo pienso. Me hubiera gustado ser reconocido en mi momento. Eso s¨ª. Al Lichis de antes s¨ª le hubiese gustado, al de ahora le da un poco igual. Lo digo con sinceridad. Estoy en otro pedo. El otro d¨ªa me invit¨® a cantar ?ngel Stanich y me hizo mucha ilusi¨®n. Es alguien que me gusta mucho y me dijo de manera muy sincera que algunos de mis discos le hab¨ªan tocado muy dentro. Lo disfrut¨¦ en un sentido muy emocional. Lo disfrut¨¦ porque yo soy muy fan de Stanich. ?Lo otro? Pues mira yo creo que todas esas cosas son maniobras de marketing, de compa?¨ªas. Yo no tengo ning¨²n rencor por la industria, pero s¨¦ que no soy una de las personas que mola que est¨¦. Lo entiendo y es el papel que me toca jugar. Lo asumo encantado.

P. ?De donde le ven¨ªa a usted el coraz¨®n verbenero?

R. Siempre he sido de un humor muy negro. Siempre me atrajo mucho la m¨²sica de Juan Antonio Canta, Patuchas. Es un humor muy andaluz, pero no ese gracioso f¨¢cil. Es muy refinado, con mucha mala hostia, muy negro y con un sentido tr¨¢gico de la vida. Y eso lo ten¨ªa La Cabra Mec¨¢nica. Lo que me diferencia ahora mismo de lo que hay en lo urbano es que mi manera de comunicarlo ten¨ªa que tener cierta vaselina. Ten¨ªa que tener humor. Y ahora la gente del trap no lo tiene. Ellos dicen: ¡®?Qu¨¦ soy machista? Pues c¨®meme los huevos¡¯. Esa es la actitud que llevan. O de las t¨ªas, que es un poco como lo era Mar¨ªa Jim¨¦nez. Un d¨ªa le dijeron: ¡®Oye, Mar¨ªa, que llevas tres whiskys en la ronda de entrevistas¡¯. Y contest¨®: ¡®?Qu¨¦ pasa, que tengo que pegar a alguien para tomarme el cuarto?¡¯.

P. Cuando sali¨® Vestidos de domingo, Espa?a estaba en el primer Operaci¨®n Triunfo. ?C¨®mo lo recuerda?

R. Ha pasado siempre. Quiz¨¢ el cuello de la botella se estrech¨® un poco m¨¢s. A m¨ª no me afect¨® tanto. Recuerdo ir a tocar a ciudades donde met¨ªamos m¨¢s gente que la gente de Operaci¨®n Triunfo. Lo que s¨ª ha quedado en el recuerdo de la gente es que La Cabra Mec¨¢nica fue un grupo muy mainstream. Y no lo fuimos. Todos los discos de Rosendo estuvieron sonando en la radio, todos los de Loquillo y todos los de Amaral. Pongo ejemplos como artistas que sonaron y nadie los recuerda como mainstream. Sin embargo, La Cabra Mec¨¢nica no son¨¢bamos. Vestidos de domingo empez¨® a sonar un a?o despu¨¦s de ser publicado. Los 40 Principales no quisieron ponernos y cuando lo hicieron pusieron La lista de la compra un lunes y la quitaron un viernes. No pas¨® ni a candidata a formar parte de las listas. Nosotros tuvimos tir¨®n popular. El engranaje no nos pill¨® como s¨ª le pas¨® a Estopa. Para la gente hemos quedado como un pelotazo descomunal como Operaci¨®n Triunfo y no lo tuvimos en el engranaje para nada.

P. ?Alguna vez se sinti¨® maltratado por la industria?

R. A ver, la industria es la industria. Es un negocio y, entonces, por muy bien que te lleves con la gente, hay un momento que necesitas un cierto grado de cinismo. Yo carezco de ese grado y me hubiera sido muy ¨²til. Lo que t¨² haces absolutamente personal. Es tu vida, son tus entra?as¡­ Eso son tus discos. Y para la industria es un negocio: ellos venden discos como podr¨ªan vender naranjas. Evidentemente, habr¨¢ gente m¨¢s apasionada que otra. La primera vez que vi que mi carrera no se iba a empujar m¨¢s y me cerraron puertas en la cara fue cuando me dijeron: ¡®Lichis, no te lo tomes como algo personal¡¯. Me oli¨® a cuerno quemado. Primero, porque es una frase de El Padrino. Y segundo porque ?c¨®mo no me lo voy a tomar como algo personal! No me puedes decir eso. Ya ni siquiera pienso si me maltrataron. ?Si creo que podr¨ªa haber ocupado un lugar m¨¢s destacado? Pues es posible, pero ser¨ªa muy egoc¨¦ntrico por mi parte. ?Qui¨¦n no se siente maltratado en su trabajo hoy por hoy? ?Qui¨¦n no se siente maltratado en esta sociedad y en este mundo mercantilista? Es algo general. No m¨ªo solo.

P. ?C¨®mo de mal lo ha pasado estos a?os en solitario?

R. Lo pas¨¦ muy mal, la verdad. Ha habido momentos muy dif¨ªciles como arrancar mi carrera en solitario. Lo hice pr¨¢cticamente solo, dej¨¢ndome los cuernos y poniendo mi patrimonio y mi vida y sin ning¨²n tipo de difusi¨®n. En este mundo material, la gente tiende a pensar que, si algo no est¨¢ sonando en la radio porque no hay nadie poniendo dinero, es porque no tiene calidad. La industria nos vende siempre esa moto. Vivimos un momento en el que ser un artista de culto es una mierda. En los ochenta, era algo muy mol¨®n. Ahora no. Ahora no existes. Eres un perdedor. Ahora se habla mucho de ¨¦xito y fracaso, son dos palabras que siempre salen. En este sentido, todo se me puso muy cuesta arriba y lo llev¨¦ muy mal. Pero ahora me da absolutamente igual. Me la trae floja. Disfruto mucho de lo que hago. Sin grandes alardes, he conseguido ganarme la vida con esto. Vivo como cualquier currito y hago mi trabajo y soy feliz con lo que hago.

P. Cuando Los Enemigos regresaron, dijeron que lo hac¨ªan por pasta. Por comer. No hab¨ªa otra forma de sobrevivir para ellos en solitario. ?Pasa igual con La Cabra Mec¨¢nica?

R. No porque como Lichis me hago 90 conciertos en salas peque?as y tengo un peque?o p¨²blico que me ayuda a tirar. Luego, tuve la intuici¨®n con La Cabra Mec¨¢nica de que se me iba a dar la patada o se me iba a hacer la cama y tuve la lucidez de comprar equipo para crear m¨²sica. Afortunadamente, me ha permitido tener dos estudios de grabaci¨®n: uno en Tarrasa y otro en Madrid. Lo que voy haciendo de producciones y actuaciones me ha dado para vivir en condiciones dignas. Adem¨¢s, soy bastante austero en mi forma de vivir. Con este regreso de La Cabra Mec¨¢nica, pues podr¨¦ afrontar con m¨¢s calma mi siguiente disco en solitario. Siempre ha salido todo de m¨ª. Con mi primer disco en solitario, vend¨ª mi casa y lo puse todo a cara o cruz.

P. ?Lleg¨® a verse fuera de la m¨²sica?

R. No. Siempre he estado en esto. Antes era bajista y tocaba con mil grupos. Siempre he sabido c¨®mo busc¨¢rmelas. No es f¨¢cil, eso es verdad.

P. Hablemos de lo contrario. ?Cu¨¢l ha sido el mejor piropo que le han echado como m¨²sico?

R. Uno de los que me hace m¨¢s gracia es cuando me dicen: ¡®Joder, no sab¨ªa que eras buen m¨²sico¡¯. Y me sorprende. Digo: ¡®Ostias, pues lo debo ser¡¯. Me gusta eso y no que me digan que soy un gran letrista. Los letristas no existen. Yo escribo canciones. No hago letras. En general, las letras es lo que menos me importa de una canci¨®n.

P. ?A qui¨¦n admira en este negociado?

R. A mucha gente, pero, si tengo que decir uno en lo art¨ªstico, digo Quique Gonz¨¢lez. Es alguien con el que me siento muy identificado. En su forma de ser y apostar. Adem¨¢s, le envidio porque a ¨¦l s¨ª le ha salido bien (risas). A Quique le sienta muy bien el traje de outsider y a m¨ª no tanto. Admiro mucho su amor por esto, su pasi¨®n y su dignidad. Es un ejemplo para mucha gente. De hecho, muchas de las decisiones que he tomado en mi carrera se las he consultado. Nos hemos llamado y nos decimos: ¡®?C¨®mo lo ves? As¨ª, ?verdad? Pues que les den por el culo¡¯. Jairo de Muchachito Bombo Infierno es tambi¨¦n muy as¨ª.