Grecia no se rinde y sigue negociando la restituci¨®n del friso del Parten¨®n
Las conversaciones secretas entre el British Museum y Atenas se han visto torpedeadas por las declaraciones del primer ministro brit¨¢nico, Rishi Sunak, que se niega a reformar una ley que impide que los m¨¢rmoles vuelvan a su lugar de origen
?Volver¨¢ el friso del Parten¨®n a su lugar de origen? La perspectiva de un regreso inminente de sus codiciados m¨¢rmoles a Atenas, abierta por una serie de negociaciones secretas con el British Museum que se filtraron en diciembre pasado, parec¨ªa alejarse esta semana tras las declaraciones del primer ministro brit¨¢nico, Rishi Sunak, que el lunes anunci¨® que no contemplaba reformar una vieja ley de 1963 que proh¨ªbe la restituci¨®n o la disgregaci¨®n de las obras de la colecci¨®n del mayor museo de civilizaciones del mundo. ¡°Reino Unido ha cuidado de estos m¨¢rmoles durante generaciones¡±, afirm¨® Sunak durante un viaje oficial a Estados Unidos, calific¨¢ndolas como ¡°un activo enorme¡± para su pa¨ªs. ¡°La colecci¨®n del British Museum est¨¢ protegida por la ley y no tenemos planes para cambiarla¡±.
Pese a sus palabras, que parec¨ªan cerrar la puerta a cualquier acuerdo, el di¨¢logo sigue adelante con discreci¨®n. El Ejecutivo griego asegura que no ha abandonado las ¡°negociaciones constructivas¡± con el museo londinense tras las declaraciones de Sunak, seg¨²n confirmaba esta semana la sede de Gobierno a EL PA?S. Contactado por este diario, el British Museum eludi¨® dar detalles sobre el estado de las conversaciones, pero se refiri¨®, a trav¨¦s de un portavoz de la instituci¨®n, a las palabras pronunciadas en febrero por el presidente de su patronato, George Osborne, exministro de Econom¨ªa de David Cameron, en la BBC. ¡°Ser¨ªa tentador no hacer nada. Pero, para seguir siendo el mayor museo del mundo, las cosas deben cambiar. Es un problema dif¨ªcil de resolver, pero creo que hay una manera de que estos m¨¢rmoles puedan ser vistos a la vez en Londres y en Atenas¡±, expres¨® Osborne. ¡°Estamos hablando con el Gobierno griego sobre un nuevo acuerdo. Soy relativamente optimista. Es mejor intentarlo y fallar que no intentarlo¡±.
El n¨²mero uno del museo daba as¨ª por buena la versi¨®n publicada por varios medios griegos e internacionales, que desde finales de 2022 hab¨ªan evocado la posibilidad de trasladar a Atenas un fragmento del friso ¡ªentre un tercio y la mitad, seg¨²n las fuentes, de la parte que se encuentra en Londres¡ª a trav¨¦s de una serie de pr¨¦stamos temporales y rotativos que garantizar¨ªan que una fracci¨®n de este tesoro hist¨®rico pueda visitarse siempre en la capital griega. A cambio, el Estado griego ceder¨ªa otras obras importantes al British Museum.
Este debate incendiario entre el Reino Unido y Grecia no empez¨® ayer. Atenas exige la repatriaci¨®n de los m¨¢rmoles desde hace cuatro d¨¦cadas. En 2009, la inauguraci¨®n del Museo del Acr¨®polis, creado para resguardar de la lluvia y la contaminaci¨®n las esculturas del templo, reserv¨® un espacio para su eventual reunificaci¨®n. En sus salas, es f¨¢cil distinguir las partes del friso que se quedaron en Atenas, que llevan la marca del paso del tiempo, y las que fueron llevadas a Londres, moldes de un blanco nuclear. La met¨¢fora visual perfecta para reflejar un conflicto que empez¨® oficialmente en 1983, cuando Grecia reclam¨® por primera vez al Reino Unido la repatriaci¨®n de este conjunto de m¨¢rmoles de 160 metros de largo que envolv¨ªa la c¨¢mara interior del Parten¨®n en el siglo V antes de Cristo. Para los griegos, fueron robados por Lord Elgin, embajador brit¨¢nico en el Imperio Otomano, en 1801. Para los ingleses, fueron sustra¨ªdos con el acuerdo de las autoridades locales y adquiridos por el museo londinense en 1816.
Desde entonces, este monumental friso en honor a la diosa Atenea ha sido un s¨ªmbolo de identidad nacional para Grecia y tambi¨¦n un rompecabezas para sucesivos Gobiernos helenos, que se han enfrentado a una negativa implacable por parte de Londres. Hasta que, hace unos meses, el primer ministro Kyriakos Mitsokakis, jefe de la nueva derecha griega que accedi¨® al poder en 2019 y opuesto a su expolio desde que visit¨® el British Museum siendo un adolescente ¡ª¡±fue como ver la Mona Lisa partida en dos¡±, dijo al Financial Times¡ª, lanz¨® una negociaci¨®n secreta con Osborne, deseoso de encontrar una soluci¨®n a esta eterna disputa desde que lleg¨® al patronato del museo en 2021.
Respeto a la ley
La soluci¨®n podr¨ªa pasar ahora por una tercera v¨ªa: en ning¨²n caso una restituci¨®n total, que implicar¨ªa un cambio en la ley a la que los tories no parecen estar dispuestos, pero tampoco el inmovilismo que ha predominado hasta hoy. El mayor obst¨¢culo son las l¨ªneas rojas impuestas por cada parte. Para los brit¨¢nicos, el respeto a esa norma de los sesenta parece innegociable, todav¨ªa m¨¢s despu¨¦s de las palabras de Sunak. Se preferir¨ªa una soluci¨®n inscrita en la legislaci¨®n actual, como un pr¨¦stamo a medio o largo plazo, que el museo s¨ª estar¨ªa autorizado a consentir. ¡°No podemos forzar a los griegos a aceptar cosas que ellos encuentran imposibles, y viceversa. Actuamos dentro de la ley¡±, advirti¨® Osborne en febrero. ¡°Devolver todos los m¨¢rmoles requerir¨ªa una ley del Parlamento, que estar¨ªa m¨¢s all¨¢ de mi autoridad. Pero lo que el museo puede hacer es tratar de establecer una nueva relaci¨®n con Grecia¡±.
¡°Para seguir siendo el mayor museo del mundo, las cosas deben cambiar. Hay una manera de que estos m¨¢rmoles est¨¦n a la vez en Londres y en Atenas. Soy relativamente optimista¡±George Osborne, presidente del patronato del British Museum
El problema, por parte de Atenas, es que la palabra ¡°pr¨¦stamo¡± es anatema, ya que implicar¨ªa aceptar que Grecia no es la leg¨ªtima propietaria del friso, lo que ser¨ªa mal percibido por la ciudadan¨ªa. ¡°Oficialmente, las l¨ªneas rojas no se han movido, pero no sabemos lo que sucede detr¨¢s de los focos. Grecia nunca aceptar¨¢ renunciar a la propiedad sobre los frisos, por lo que se est¨¢ buscando una f¨®rmula legal que satisfaga a las dos partes¡±, apunta Sophia Hiniadou Cambanis, asesora del Parlamento griego en pol¨ªtica cultural, que no cree que el di¨¢logo se haya interrumpido tras las declaraciones de Sunak. ¡°El Reino Unido debe ser valiente y facilitar la reunificaci¨®n del friso. No hace falta entrar en el debate sobre qui¨¦n es su propietario. Basta con admitir que ese friso pertenece al Parten¨®n y que no hay un lugar mejor donde reintegrar la obra¡±. Toda la negociaci¨®n consistir¨ªa en encontrar un tecnicismo que permita desplazar la obra sin decir que es un pr¨¦stamo, pero tampoco una devoluci¨®n.
En realidad, un eventual gesto de Londres no ser¨ªa tan desinteresado como puede parecer. En los ¨²ltimos a?os, el British Museum se ha ido quedando solo en el debate sobre las restituciones de obras y objetos expoliados, que ha ido en aumento desde la publicaci¨®n del informe Sarr-Savoy, encargado por Emmanuel Macron en 2018, que aconsejaba a Francia devolver a sus excolonias africanas cualquier pieza de origen irregular que fuera reclamada por sus pa¨ªses de origen. Observado al principio con gran escepticismo, ese informe, junto con el cambio social de los ¨²ltimos a?os, ha impulsado restituciones puntuales pero muy simb¨®licas tanto en Francia como en otros pa¨ªses europeos, como es el caso de los bronces de Ben¨ªn.
El nuevo clima a favor de la ¡°descolonizaci¨®n¡± de los museos ha a?adido una dosis de presi¨®n adicional para el British Museum, mientras otras instituciones empezaban a mandar obras de vuelta a sus pa¨ªses de origen. Y no solo al antiguo espacio colonial, sino tambi¨¦n a Grecia. Por ejemplo, el Museo Salinas de Palermo devolvi¨® en 2022 una parte del friso del Parten¨®n que hab¨ªa sido expuesta en Sicilia desde hace m¨¢s de 200 a?os, mientras que el Vaticano acaba de restituir tres fragmentos m¨¢s por decisi¨®n del papa Francisco. Encontrar una soluci¨®n al problema permitir¨ªa al British Museum proyectar una imagen de modernidad y justicia poscolonial bienvenida en estos tiempos, pero tambi¨¦n seducir a una nueva generaci¨®n de fil¨¢ntropos, sobre todo estadounidenses, que no quieren asociar su nombre a instituciones apartadas de estas causas.
Oportunismo electoral
Pese a los movimientos, en Atenas sigue reinando cierta desconfianza. ¡°Si no se cambia la ley, el British Museum solo puede negociar un pr¨¦stamo a corto plazo, y esa no es una soluci¨®n aceptable¡±, se?ala la presidenta de la Asociaci¨®n de Arque¨®logos Griegos, Despina Koutsoumba, que coincide con la postura de la oposici¨®n de izquierda. ¡°Tienen que devolverlo como una donaci¨®n, como el Vaticano, o como un dep¨®sito sin fecha l¨ªmite, como ha hecho Palermo. Quien quiera reducir este asunto al mero electoralismo hace m¨¢s da?o que beneficio a la causa¡±, a?ade Koutsoumba, que apunta as¨ª al oportunismo del primer ministro Mitsokakis, que se juega la reelecci¨®n en las legislativas de julio. ¡°Si el pueblo griego conf¨ªa otra vez en nosotros, creo que podemos lograr este objetivo despu¨¦s de las elecciones¡±, dijo el primer ministro, sin excesivo decoro, hace unas semanas.
Otra fuente de presi¨®n para Londres es un cambio sustancial en su propia opini¨®n p¨²blica: un 59% de los brit¨¢nicos est¨¢n a favor del regreso de los frisos a Atenas, frente al 18% que se opone a esa opci¨®n, seg¨²n un sondeo YouGov de 2021. ¡°La ley de 1963 ya ha sido modificada para consentir ciertas devoluciones, como las de las obras robadas a familias jud¨ªas. Podr¨ªa haber alguna m¨¢s, aunque tal vez el British Museum tenga que sentirse todav¨ªa m¨¢s atrasado en esta cuesti¨®n para dar el paso adelante¡±, advierte Janet Suzman, presidenta del Comit¨¦ Brit¨¢nico para la Reunificaci¨®n de los M¨¢rmoles del Parten¨®n, una de las numerosas asociaciones que luchan por esta devoluci¨®n en varios pa¨ªses del mundo. ¡°Ser¨ªa una correcci¨®n hist¨®rica necesaria en un momento en que los antiguos imperios reexaminan sus legados coloniales y demuestran un mayor respeto por la historia de otras culturas. En el fondo, es solo una cuesti¨®n de decencia¡±.
Babelia
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