Lionel Meunier, director de Vox Luminis: ¡°Soy creyente cuando canto Bach¡±

La idea del coro belga Vox Luminis naci¨® en Chicago en 2002, durante el encuentro anual del World Youth Choir (Coro Juvenil Mundial), que reuni¨® a 83 j¨®venes cantantes de 32 pa¨ªses diferentes. ¡°Aquella experiencia me cambi¨® la vida¡±, reconoce su creador, el bajo franc¨¦s Lionel Meunier (Clamecy, 41 a?os). All¨ª conoci¨® a grandes amigos actuales, como el tenor Michael Spyres y la mezzo Katarina Bradi?, pero descubri¨® dos cosas que marcaron la creaci¨®n de su prestigioso coro: ¡°La pasi¨®n que me produc¨ªa compartir la m¨²sica y la posibilidad de combinar voces de diferentes procedencias para crear un sonido ¨²nico¡±.

En aquel encuentro tambi¨¦n descubri¨® la magia de la m¨²sica antigua. Lo hizo cantando el motete renacentista para 40 voces, Spem in alium, de Thomas Tallis. Y la noche de aquel concierto, junto a su compa?ero de habitaci¨®n, el bajo Bertrand Delvaux, tambi¨¦n fundador de Vox Luminis, pens¨® en lo que ser¨ªa montar un coro y dedicar su vida a cantar y compartir m¨²sica antigua por todo el mundo con un grupo de colegas. Fund¨® ese coro, en 2004, junto a nueve compa?eros del Conservatorio Real de La Haya, dirigiendo desde su atril de bajo. Ha madurado con ellos e incluso construy¨® una familia con la primera soprano del conjunto, Zsuzsi T¨®th, con la que tiene dos hijos. El pr¨®ximo 31 de marzo, Vox Luminis cumplir¨¢ 19 a?os de edad. ¡°Me considero un hombre afortunado¡±, admite.

El gigante Meunier, de m¨¢s de dos metros de estatura, recibe a EL PA?S en el vest¨ªbulo de su hotel en Madrid, a punto de iniciar una gira espa?ola. En ella afrontar¨¢, por vez primera con Vox Luminis, la emblem¨¢tica Pasi¨®n seg¨²n san Mateo, de Bach, en colaboraci¨®n con la Orquesta Barroca de Friburgo. ¡°Fue un proyecto que formalizamos hace cinco a?os para realizar, en 2020, en una gira internacional, pero que tuvimos que cancelar por la pandemia. Ahora lo hemos retomado y la gira es todav¨ªa mayor¡±, aclara. Actuar¨¢n hoy martes, en el Auditorio Nacional de Madrid, despu¨¦s viajar¨¢n a Barcelona, el 30 de marzo, ir¨¢n al Teatro Maestranza de Sevilla, el domingo, y culminar¨¢n, el 3 de abril, en Valencia.

En el Palau de la m¨²sica catalana actuar¨¢, al d¨ªa siguiente, el 31 de marzo, Philippe Herreweghe con Collegium Vocale Gent, en la Pasi¨®n seg¨²n san Juan, un director y un grupo muy importantes para Meunier. ¡°Herreweghe es uno de mis ¨ªdolos y lo conoc¨ª a trav¨¦s de mi maestro, el bajo Peter Kooy, que cantaba con ¨¦l, asegura. ¡°De ni?o odiaba la m¨²sica vocal, pues no pod¨ªa soportar el vibrato de las voces en las grabaciones de ¨®pera que pon¨ªa mi padre en casa, pero todo cambi¨® cuando escuch¨¦ los discos de Kooy con Herreweghe cantando Bach¡±, prosigue. Despu¨¦s colaborar¨ªa con el propio Herreweghe, aunque tambi¨¦n con Gustav Leonhardt, Ton Koopman, Rinaldo Alessandrini, Christophe Rousset y muchos m¨¢s. ¡°Trabajar con todos ellos ha enriquecido mi gusto personal¡±, asegura.

Meunier conoce muy bien la Pasi¨®n seg¨²n san Mateo. ¡°La he cantado con Richard Egarr, Peter Dijkstra o Lars Ulrik Mortensen, aunque conviene recordar que en Pa¨ªses Bajos hay una inmensa tradici¨®n y solemos cantar unas 200 pasiones de Bach cada a?o en un territorio mucho m¨¢s peque?o que Espa?a¡±, admite. Pero no oculta el reto que supone para ¨¦l y Vox Luminis cantar esta monumental obra. ¡°Siempre pens¨¦ que no era para nosotros, pues no ten¨ªamos suficientes voces¡±, reconoce. No obstante, ahora disponen de colaboradores estables para crecer hasta sumar 24 voces y satisfacer todas las partes solistas. ¡°Mi intenci¨®n es hacer lo mejor con esta m¨²sica y eso pasa por conocer muy bien no solo la partitura y el aut¨®grafo de la obra, sino tambi¨¦n el entorno y todo lo que sabemos acerca de la Iglesia de Santo Tom¨¢s, de Leipzig, a la hora de tomar decisiones acerca de la sonoridad y el tempo, y tambi¨¦n seleccionar las mejores voces para cada solo¡±, asegura.

Es una de las composiciones m¨¢s ambiciosas de Bach, que debi¨® asombrar a los ciudadanos de la conservadora Leipzig en su primera audici¨®n, el Viernes Santo de 1727. El compositor alem¨¢n no solo a?adi¨® arias con instrumentos en estilo moderno, a los tradicionales corales luteranos en la narraci¨®n de la pasi¨®n, sino que duplic¨® los efectivos y aument¨® considerablemente su duraci¨®n. Por todo ello, la obra se conoc¨ªa en el entorno de Bach como la ¡°pasi¨®n grande¡± para diferenciarla de otras m¨¢s breves, como la Pasi¨®n seg¨²n san Juan. Incluso, a las dos peque?as orquestas y a los dos coros con ocho solistas a?adi¨® un tercero de ni?os para cantar el coral inserto en el monumental n¨²mero que abre la obra. ¡°Hemos dispuesto diferentes coros de ni?os para la gira. En Madrid y Barcelona cantaremos con los coros infantiles de la JORCAM y de l¡¯Orfe¨® Catal¨¤ y en Sevilla y Valencia con la Escolan¨ªa de Nuestra Se?ora de los Desamparados¡±, asegura Meunier.

Cantos luteranos

En el canto de la pasi¨®n luterana, en estilo recitativo, destaca el evangelista, que cantar¨¢ el tenor Raphael H?hn. Pero tambi¨¦n el de Jes¨²s, que afrontar¨¢ el bajo Sebastian Myrus, y, entre todos los dem¨¢s personajes dramatizados que intervienen, Meunier se ha reservado el breve papel del Pontifex. Otro elemento es la devoci¨®n luterana de corales con textos y melod¨ªas bien conocidos por los fieles del siglo XVIII. Y un tercero lo conforman textos l¨ªricos que Bach compuso en estilo oper¨ªstico utilizando solistas vocales y diversos conjuntos de instrumentos. Aqu¨ª escucharemos a los principales solistas del coro belga. ¡°Por ejemplo, el contratenor Alexander Chance ha preparado el alto 1? con su padre Michael, que fue uno de los grandes int¨¦rpretes de esa parte¡±, asegura Meunier. A ¨¦l escucharemos la popular aria Erbarme dich, mein Gott, donde afrontar¨¢ el legendario modelo paterno.

Vox Luminis dispone de su propio conjunto instrumental, que pudo escucharse en su ¨²ltima visita a Madrid, con King Arthur, de Purcell, en el Teatro Real. No obstante, desde hace a?os han colaborado con varios conjuntos y orquestas de instrumentos de ¨¦poca, como la Orquesta Barroca de Friburgo. ¡°Empezamos, en 2017, con las V¨ªsperas, de Monteverdi, y despu¨¦s hicimos el R¨¦quiem, de Biber, que grabamos en Alpha. Ahora se ha convertido en una colaboraci¨®n estructural. Y vamos a realizar varios proyectos cada a?o¡±, asegura. En la pasi¨®n bachiana de Mateo la agrupaci¨®n alemana se dividir¨¢ en dos y estar¨¢ liderada por sus dos concertinos, Petra M¨¹llejans y Peter Barczi. Por tanto, no veremos a ning¨²n director sobre el escenario, ya que Meunier liderar¨¢ el doble coro desde su puesto como bajo.

Pero Vox Luminis no grabar¨¢, por el momento, la Pasi¨®n seg¨²n san Mateo. ¡°Estoy muy feliz de que podamos compartir nuestra interpretaci¨®n con el p¨²blico en concierto, aunque para grabarla necesitamos m¨¢s tiempo¡±, reconoce. Las grabaciones del coro, en el sello Ricercar (Outhere Music), han sido fundamentales para consolidar el prestigio de Vox Luminis. En 2012, se alzaron con el premio al disco del a?o, de la revista Gramophone, con su impresionante CD dedicado a las Musikalische Exequien, de Sch¨¹tz, todo un hito para un conjunto de m¨²sica antigua no brit¨¢nico. ¡°Las grabaciones me permiten compartir mi pasi¨®n, dar a conocer composiciones desconocidas y ofrecer una visi¨®n propia de las conocidas¡±, admite.

El pr¨®ximo disco de Meunier con su coro, titulado Ein Deutsches Barock-Requiem (Un r¨¦quiem barroco alem¨¢n), se publicar¨¢ en abril y es una reflexi¨®n sobre la muerte. ¡°Se trata de una recopilaci¨®n muy personal de composiciones alemanas del siglo XVII basadas en los mismos textos b¨ªblicos que utiliz¨® Brahms en Un r¨¦quiem alem¨¢n¡±. La selecci¨®n tiene una belleza sobrecogedora e incluye obras de compositores casi ignotos como Andreas Scharmann y Johann Philipp F?rtsch. ¡°Recuerdo la grabaci¨®n de Selig sind die Toten (Bienaventurados los muertos), de F?rtsch, con las l¨¢grimas cay¨¦ndome por las mejillas¡±, asegura. Y terminamos hablando de la conexi¨®n entre la muerte, la religi¨®n y la m¨²sica. ¡°Me aterra morirme. He so?ado muchas veces con mi entierro y como cat¨®lico me ayuda mucho la visi¨®n que tienen los protestantes, pero le aseguro que cantando la Pasi¨®n seg¨²n san Mateo quieres creer en el m¨¢s all¨¢, aunque no creas. Yo soy creyente cuando canto Bach¡±, aduce.