Otra Puerta del Pr¨ªncipe impropia de La Maestranza

La Puerta del Pr¨ªncipe de La Maestranza de Sevilla no naci¨® para ser un coladero de notables actuaciones, sino la entrada a la gloria con matr¨ªcula de honor para toreros a pie o a caballo reconvertidos en genios por una tarde.

No. La actuaci¨®n del joven rejoneador Guillermo Hermoso de Mendoza no alcanz¨® el grado de la excelencia exigido para tan alto honor. La presidenta Macarena de Pablo Romero, nueva en estas lides, no debi¨® mostrar el segundo pa?uelo que le exig¨ªan unos tendidos generosos y triunfalistas que deval¨²an el prestigio de la plaza y atentan contra su prestigio.

Pero debe reconocerse que Hermoso de Mendoza es un torero de alt¨ªsimo nivel, de fulgurante progresi¨®n, que monta una cuadra de excelentes caballos toreros y cuenta sus tardes por triunfos. Le acompa?a la fortaleza de la juventud, una gran preparaci¨®n y un moderno concepto del espect¨¢culo.

Hoy no ha sido menos, y lo demostr¨® en su primero, un toro de buen tranco y gran clase, al que tore¨® a placer en las distintas fases de la lidia, si bien pas¨® en falso varias veces con los rejones de castigo y las banderillas. Destac¨® con el caballo Ilusi¨®n, torer¨ªsimo, que se paraba en la cara del toro, y con las banderillas cortas a lomos de Esencial. Un rej¨®n ca¨ªdo de r¨¢pido efecto le permiti¨® pasear un trofeo.

Por el mismo motivo, otro rej¨®n ca¨ªdo, se exaltaron los ¨¢nimos de los tendidos, que pidieron los m¨¢ximos trofeos tras otra notable actuaci¨®n, en la que clav¨® banderillas con acierto, se luci¨® especialmente con Berl¨ªn y en un par de largas a dos manos con Justiciero, ante un toro mansurr¨®n.

Pero no fue redonda e incontestable la tarde de Hermoso de Mendoza. Salt¨® de alegr¨ªa cuando vio aparecer el segundo pa?uelo en el palco presidencial, pero en su fuero interno sabr¨¢, pasado el tiempo, que la Puerta del Pr¨ªncipe est¨¢ reservada para momentos inolvidables.

Era la primera vez que hac¨ªan juntos el pase¨ªllo en esta plaza el hijo de Pablo y Diego Ventura. Era, pues, casi un duelo en la cumbre despu¨¦s del empecinamiento incomprensible de Hermoso (padre) en no competir con el caballero de La Puebla.

Ventura se mostr¨® como lo que es, la primera figura del rejoneo actual, pero fall¨® con los aceros en su lote. Excelente ante su buen toro primero, sobre todo con Nazar¨ª, un torero excepcional, que templ¨® maravillosamente; con Bronce, con el que clav¨® banderillas sin la cabezada; y en un par de cortas cuadrando en la misma cara del toro a lomos de Guadiana. Pero pinch¨® hasta cinco veces antes de dejar un rej¨®n y descabellar desde el caballo.

Se super¨® ante el parado quinto con el caballo Fabuloso, que templ¨® a dos pistas cosido a los pitones, cambi¨® el viaje por dentro en dos ocasiones, y quebr¨® a muy escasa distancia del toro. Antes de fallar de nuevo en la suerte final sali¨® al ruedo L¨ªo, para que se luciera al quiebro en un palmo de terreno. Clav¨® un rej¨®n trasero, esper¨® una eternidad a que el animal cayera y sonaron hasta dos avisos, lo que emborron¨® otra notable actuaci¨®n.

Y abri¨® plaza el portugu¨¦s Rui Fernandes, que cumple 25 a?os de alternativa y se march¨® muy compungido porque no le concedieron una oreja en ninguno de sus toros. La verdad es que no hubo petici¨®n suficiente en ninguno de los casos, y la tarde del caballero fue tan correcta, como escasa de emoci¨®n. Practica un rejoneo que suena a agua pasada, carente de espectacularidad, lo que impide la atracci¨®n de los tendidos. Solvente se mostr¨® con el primero, de gran clase, y esforzado y experimentado con el manso cuarto que sali¨® en lugar de un titular que se parti¨® un pit¨®n al rematar contra un burladero.

Alegr¨ªa para los cuerpos ha sido esta generosa segunda Puerta del Pr¨ªncipe de la feria; ojal¨¢ se vuelva a abrir con todo merecimiento.