Muere P¨¦ter E?tvos, el ¨²ltimo gran compositor h¨²ngaro, a los 80 a?os

Parece que las malas noticias tienen tendencia a agruparse. En el mismo d¨ªa, ayer 23 de marzo, nos llegan las tristes nuevas del fallecimiento del gran pianista italiano Maurizio Pollini y del compositor y director P¨¦ter E?tvos. Voy a hablar del segundo, seguramente menos conocido del gran p¨²blico, pese a que, con ¨¦l, se va a los 80 a?os uno de los m¨¢s grandes nombres de la m¨²sica europea, una de esas personalidades que se transmutan con su ¨¦poca hasta definirla y que nos dejan un tremendo vac¨ªo.

Pierre Boulez, el legendario compositor y director franc¨¦s, defin¨ªa a E?tvos como uno de los h¨²ngaros exportables, como lo ser¨ªan B¨¦la Bart¨®k, Zoltan Kodaly, Gi?rgy Ligeti, Gi?rgy Kurt¨¢g o Georg Solti. Como es una expresi¨®n ya antigua, no rese?¨® que era quiz¨¢s el ¨²ltimo de esa saga capaz de aumentar las plusval¨ªas art¨ªsticas de un pa¨ªs hasta lo m¨¢s alto, dejando un vac¨ªo si no hay relevo. No conozco bien ese pa¨ªs tan dif¨ªcil que es la Hungr¨ªa actual, ni siquiera en el campo musical que me corresponde, pero no me suena nadie capaz de sustituir a E?tvos en esa lista de grandes.

P¨¦ter E?tvos naci¨® en Transilvania el 2 de enero de 1944, esa regi¨®n confusa que, tras el reparto posterior a la Primera Guerra Mundial, pas¨® a formar parte de Ruman¨ªa, pese a su mayor¨ªa h¨²ngara. E?tvos siempre se?al¨® que su lengua musical materna era la de la comunidad sz¨¦kely, una lengua que compart¨ªa con el intenso legado de su madre, pianista, o su abuelo multi instrumentista en la rica tradici¨®n local.

Tras sus estudios musicales en Budapest, consigui¨® el diploma en composici¨®n y, seg¨²n confes¨®, comenz¨® la direcci¨®n orquestal para que no le enrolaran en el ej¨¦rcito. Debi¨® de d¨¢rsele muy bien, porque enseguida sali¨® del pa¨ªs con una mochila musical formidable.

A mediados de los sesenta lleg¨® a Alemania, con 22 a?os. Defin¨ªa ese momento como el inicio de la segunda parte de su vida. La direcci¨®n de orquesta y la composici¨®n se funden y le permiten impregnarse de nuevos lenguajes musicales con una facilidad notable. Un v¨ªdeo de la artista y directora Judit Kele que circula por YouTube, La s¨¦ptima puerta, le muestra con un Stockhausen cordial y bromista, y un E?tvos c¨®modo y familiar en unos ensayos dif¨ªciles. Stockhausen habla de E?tvos con verdadero cari?o: ¡°P¨¦ter es probablemente el director m¨¢s peculiar del mundo. Sabe dirigirlo todo, sobre todo porque piensa como un compositor, que puede introducirse en los detalles m¨¢s peque?os de una partitura muy compleja y hacerla audible por su t¨¦cnica muy personal. Yo dir¨ªa que es leal, antes que nada, pero, adem¨¢s, est¨¢ siempre de buen humor y le gusta la naturaleza, adora los ni?os y nunca est¨¢ cansado, es un hombre encantador¡±.

Se familiariza con todas las t¨¦cnicas de la vanguardia y las hace suyas desde un estilo directorial que abundaba poco en esos a?os entre los que apostaban por la modernidad. Se hace pronto notar y en 1978 Pierre Boulez le encarga el concierto inaugural del Centro Pompidou y el reci¨¦n nacido Ensemble Intercontemporain de Par¨ªs (EIC). Y, tras la actuaci¨®n, lo elige como titular de esta esperanzadora orquesta especializada para los 13 a?os siguientes. Ten¨ªa E?tvos entonces 34 a?os. Son a?os en los que se sabe que compon¨ªa, pero la direcci¨®n lo absorbe. A partir de 1991, al abandonar el EIC, comienza una fren¨¦tica carrera en tres direcciones: como director empieza a colaborar con las m¨¢s prestigiosas orquestas del mundo, pero es como compositor cuando E?tvos explota. Solo en 1993 firma seis obras en una progresi¨®n que alcanza su culmen en 1997, cuando presenta la que era su segunda ¨®pera, pero que alcanza una notoriedad importante: Tres hermanas, sobre la pieza teatral de Chejov.

Poco antes, en 1993, E?tvos presenta una pieza dedicada a Franz Zappa, por el que sent¨ªa enorme admiraci¨®n. Zappa hab¨ªa fallecido recientemente y poco antes le hab¨ªa invitado a Los ?ngeles para presentar un concierto dedicado a Var¨¨se por el que el rockero sent¨ªa devoci¨®n al haber comenzado su carrera musical con Ionisation, la c¨¦lebre pieza de percusi¨®n sola que hab¨ªa marcado tendencia a principios de siglo. El tema que E?tvos dedica a Zappa se titulaba Psalm 151 In memoriam Franz Zappa.

Es una obra entre muchas, pero confirma la versatilidad que ha mostrado E?tvos en su dilatada carrera; siempre oscilando entre vanguardia y aires populares, quiz¨¢ como consecuencia de esa herencia transilvana recogida de sus abuelos; entre direcci¨®n de orquesta y creaci¨®n; entre una teatralidad siempre presente a¨²n en sus obras puramente instrumentales; entre m¨²sica electroac¨²stica y sofisticaci¨®n instrumental; una dedicaci¨®n a la ¨®pera que le lleva a firmar nueve t¨ªtulos; y, sobre todo, entre ambos aspectos de su carrera y una dedicaci¨®n pedag¨®gica singular. Muestra de ello es que, en 1991, el a?o en que abandona la direcci¨®n titular del EIC, funda el International E?tvos Institute and Foundation, dedicado a j¨®venes directores de orquesta y compositores. De 1992 a 1998 es profesor en la Hochchule f¨¹r Musik de Karlsruhe y, m¨¢s tarde ense?a en la Hochschule f¨¹r Musik de Colonia. En las ¨²ltimas d¨¦cadas, E?tvos ha tutelado la creaci¨®n musical y la direcci¨®n en la Escuela Reina Sof¨ªa de Madrid, siendo el referente de mayor nivel de esta instituci¨®n creada por Paloma O¡¯Shea, a la que, por cierto, dedic¨® una breve pieza para viol¨ªn en 2015.

Entre sus numerosos premios, destacan los dos ¨²ltimos: la Medalla Goethe de la Rep¨²blica Federal de Alemania en 2018 y el premio Fronteras del Conocimiento Fundaci¨®n BBVA en 2021.