Los atl¨¦ticos toros de Domingo Hern¨¢ndez protagonizan un limpio y predecible quinto encierro, el m¨¢s r¨¢pido de este San Ferm¨ªn
Siete corredores han resultado contusionados, ninguno por asta de toro, en una carrera que ha durado dos minutos y 13 segundos
Siete corredores han resultados contusionados en cara, brazos y piernas y uno de ellos con traumatismo craneal con p¨¦rdida de conocimiento en el quinto encierro de San Ferm¨ªn, el m¨¢s r¨¢pido de este a?o, pero ninguno de ellos por asta de toro, seg¨²n el parte m¨¦dico. M¨¢s o menos, el mismo balance de todos los d¨ªas.
La verdad es que los encierros de San Ferm¨ªn se parecen unos a otros como dos gotas de agua porque no cambian los protagonistas ni las condiciones de la carreras: toros entrenados para correr, atletas de ¨¦lite para competir en la olimpiada de San Ferm¨ªn, un l¨ªquido antideslizante que impide que los animales resbalen, pierdan a la manada y traten de defenderse de los acosadores de blanco y rojo, y corredores, muchos cada a?o, que se estorban unos a otros, impiden el paso de los toros, caen y se producen contusiones en caras, brazos y piernas en el duro golpe contra el suelo.
Pero atr¨¢s, muy atr¨¢s, quedaron esas carreras en las que el parte m¨¦dico era sangrante por las heridas que produc¨ªan toros que se ve¨ªan en soledad en la calle, rodeados de mozos, de los que se defend¨ªan a cornadas. Atr¨¢s, muy atr¨¢s, ha quedado la emoci¨®n inherente a los tradicionales encierros, raz¨®n por la que han alcanzado fama mundial.
En la carrera de hoy, poco que rese?ar, m¨¢s all¨¢ de la exhibici¨®n de seis atletas de cuatro patas, felices de volver a correr, aunque sorprendidos por el escenario nuevo en el que se han desenvuelto.
No se les ha notado que son los novatos de este a?o; es la primera vez que Domingo Hern¨¢ndez corre en San Ferm¨ªn, y a la novedad se un¨ªa la incertidumbre sobre el comportamiento que pudieran tener en la carrera.
Pero no ha habido sorpresas: nobles, con la mirada fija en su corto horizonte y aislados del mundanal ruido del recorrido, los toros han corrido a una velocidad endiablada, han superado los obst¨¢culos del camino y han batido un r¨¦cord, el encierro m¨¢s r¨¢pido en lo que va de feria: 2 minutos y 13 segundos.
Como cada ma?ana, los cabestros han tomado la cabeza de carrera en la Cuesta de Santo Domingo. Antes de llegar a la plaza Consistorial, un toro de capa negra los ha adelantado y ha barrido de corredores la bajada por la calle Mercaderes a gran velocidad, de modo que no ha podido evitar el encontronazo, leve en este caso, con los tablones que marcan el inicio de la calle de Estafeta. Los que le segu¨ªan tomaron nota y ninguno de ellos pas¨® por el mal trago del encontronazo con el muro.
El tramo largo siguiente ha sido como una carrera de 100 metros. Los toros han corrido como si en ello les fuera la vida ¡ªes su costumbre diaria, por otra parte¡ª y toda su preocupaci¨®n ha sido zafarse de los corredores que se encontraban a su paso. De ah¨ª, como cada ma?ana, los atropellos y ca¨ªdas habituales.
Ser¨ªan novatos, pero ning¨²n toro se desplaz¨® hacia el vallado del callej¨®n de entrada a la plaza lo suficiente como para poner en peligro a los que all¨ª permanec¨ªan, y la entrada al ruedo ha sido de la manada al completo, que ha encontrado al instante la puerta de los corrales y se ha perdido en un santiam¨¦n.
Ya descansan del ajetreo matutino Molinito, Ostentoso, Genov¨¦s, Lun¨¢tico, Loquito y Arrebato, que pesan entre 525 y 595 kilos, y que esta tarde lidiar¨¢n los diestros Alejandro Talavante, Daniel Luque y Juan Ortega, que, al igual que los toros, hoy debuta en la Feria de San Ferm¨ªn.
Babelia
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.