Fernando Alfaro: ¡°Antes, ser ¡®indie¡¯ era un asunto de inadaptados¡±
El m¨²sico, pionero de la m¨²sica independiente en espa?ol con Surfin¡¯ Bichos, publica su primera novela, ¡®Mundo turbio¡¯
A finales de los ochenta, Fernando Alfaro fue pionero del indie espa?ol al frente de Surfin¡¯ Bichos. En esta banda, en el grupo Chucho o su proyecto en solitario siempre ha dado forma a un universo propio de personajes desarraigados, que ahora cobran vida en una novela, Mundo turbio (Contra). Educado y apacible, este albacete?o charla en la cafeter¨ªa del C¨ªrculo de Bellas, en Madrid, como un ¡°superviviente¡± nato de la vida y la cultura.
Pregunta. El libro da comienzo con un ep¨ªgrafe que dice: ¡°La vida ser¨¢ cruenta y fugaz¡±. ?Hasta qu¨¦ punto cree que lo es?
Respuesta. La frase, que funciona como una cita y que abre el libro, hace referencia a toda la novela, a su tempo narrativo. Se trata de la vida entera de varios personajes, con un protagonista, ?ngel Turbio, en poco m¨¢s de 250 p¨¢ginas. El resultado debe ser que el ritmo de la novela sea alto, que es lo que buscaba; tambi¨¦n fue alto mi propio ritmo escribi¨¦ndola. Se trata de unos personajes que viven sus vidas con una cierta premura, una especie de desesperaci¨®n. Como una novela de aventuras, vaya. Es por lo tanto tambi¨¦n una historia cruenta, cuando no truculenta, como las novelas negras.
P. En su caso ha sido cruenta y fugaz.
R. En un sentido diferente al del protagonista de la novela, quiz¨¢ s¨ª. Digo diferente porque, a pesar de algunos puntos en com¨²n, hay muchos rasgos biogr¨¢ficos de ?ngel que yo no comparto. Pero s¨ª es cierto que la decisi¨®n de que el ritmo de la narraci¨®n fuera alto la tom¨¦ muy al principio, porque lo primero que hice fue recopilar y ordenar todas las letras de mis canciones (tambi¨¦n, curiosamente, algo m¨¢s de 250), que se incluyen tambi¨¦n al final del libro. Y esas canciones son toda mi vida. Fue como ver pasar mi vida en un rel¨¢mpago. Ese v¨¦rtigo.
P. La soledad tiene peso en la novela, pero tambi¨¦n algo la religi¨®n.
R. Entre otras cosas, Mundo turbio es la historia de c¨®mo al final ?ngel siempre se queda solo. Y es cierto que esa introspecci¨®n que le caracteriza alimenta y se alimenta de su tendencia a la soledad¡ y su tendencia a lo trascendental, que se articula en sus primeros a?os en una religi¨®n, la cat¨®lica, pero que despu¨¦s permanece y recorre su vida como un r¨ªo subterr¨¢neo, una ¡°corriente beat¨ªfica¡± y un amor al pr¨®jimo que aflora, sobre todo, cuando se droga, particularmente con la hero¨ªna.
P. ?Es creyente?
R. Me gustar¨ªa creer, s¨ª. Creer que hay un sentido para todo esto. Ser¨ªa, como dice alg¨²n futbolista brasile?o, tener psic¨®logo gratis (y online, porque te puedes conectar a cualquier hora y desde donde sea). Podr¨ªa bromear con esto, pero en realidad es una pregunta tan ¨ªntima que no podr¨ªa responderla¡ ni a m¨ª mismo.
P. Se detiene en ciertos detalles manuales, casi en desuso en el mundo digital y de pantallas que vivimos. Por ejemplo, c¨®mo se fabrica un tirachinas.
R. Hay descripciones prolijas de c¨®mo construir un tirachinas, o un arco, pero luego ese ¡°juego con palos y piedras¡± pasa a otro nivel y las descripciones son de cosas como el m¨¦todo para construir una pipa de agua para fumar crack. Estos recesos o detenciones del discurso narrativo con una descripci¨®n son un recurso ya cl¨¢sico en las novelas. En este caso, me interesaba mucho subrayar ese v¨¦rtigo narrativo al que alud¨ªa deteniendo de repente el tiempo con descripciones casi de microscopio de estas cuestiones tan ¡°poco espirituales¡±, saliendo as¨ª tambi¨¦n, s¨²bitamente, del discurso introspectivo.
P. Mundo turbio es una historia de inadaptados y parias. ?Los tipos abollados tienen posibilidad de redenci¨®n?
R. Para los que no creen en la otra vida ni en la salvaci¨®n eterna, la ¨²nica redenci¨®n posible es supervivir. Esta palabra aparece de forma recurrente en la novela, con esta forma tan poco usada (casi todo el mundo usa solo ¡°sobrevivir¡±). Esto permite el doble juego sem¨¢ntico con un nuevo significado, inventado. Ya lo dice ?ngel: ¡°Vas a supervivir porque tienes una supervida¡±. Esa es la redenci¨®n.
P. Se crio en Albacete. ?Hab¨ªa muchos ?ngeles Turbios y abollados all¨ª en su ¨¦poca?
R. La narraci¨®n de la novela es m¨¢s bien hiperrealista, y s¨ª que se habla de nuestro pa¨ªs y nuestras ciudades y pueblos, claro. Ser¨ªa algo as¨ª como realismo sucio y m¨¢gico. La pl¨¦yade de personajes (m¨¢s o menos inventados) turbios y abollados pero llenos de luz que ya habitaba mis canciones, claro que proviene del mundo real. Era lo que yo conoc¨ªa en Albacete, en Madrid, en Valencia, en Barcelona, en mi pueblo, Alcadozo¡ Y ahora han cobrado vida en la novela.
P. ?Ha cambiado mucho aquel Albacete de su infancia y adolescencia con el de ahora?
R. Creo que s¨ª, bastante. Se describe muy bien en la novela. Hay un pasaje que dice: ¡°Era una ¨¦poca violenta como todas las ¨¦pocas. Pero aquella era m¨¢s gran¨ªtica: la ciudad, o la memoria, era m¨¢s gris y obstinada, como el hormig¨®n. Poco lugar para la l¨ªrica o para una edad de las flores¡±. Tambi¨¦n hay momentos en que se describe una ciudad m¨¢s amable y luminosa, o m¨¢s por descubrir, por entonces.
P. Surfin¡¯ Bichos sali¨® de esa tierra. ?Hab¨ªa que ser un ser como ?ngel Turbio para ser indie?
R. Es que en aquellos tiempos lo indie era realmente un asunto de inadaptados. De inadaptados juveniles a lo Morrissey. Lo que sab¨ªamos del indie proced¨ªa del pospunk, de los indie charts de los primeros ochenta. Y entroncaba con cosas muy locas que se estaban haciendo en Australia, Reino Unido y sobre todo Estados Unidos. Yo me identificaba con Gun Club, Orange Juice, Violent Femmes¡ y tambi¨¦n con Veneno.
P. ?Cree que la memoria colectiva de este pa¨ªs se acuerda y pone en valor aquella primera ola de m¨²sica independiente con grupos como Surfin¡¯ Bichos, Manta Ray, Ni?o Gusano¡?
R. Creo que no. La memoria colectiva recuerda a lo sumo uno o dos nombres, los m¨¢s famosos. La gente se suele quedar con una sola idea de cada cosa; eso se dice mucho en publicidad.
P. ?Ser indie antes molaba m¨¢s que ahora?
R. Progresivamente, el vocablo ha ido identific¨¢ndose con un g¨¦nero musical, un estilo. De esta forma se han ido colando cosas que ni implican el riesgo ni aportan el estupor que implicaban y aportaban entonces.
P. El indie es ahora un caj¨®n de sastre en el que entra de todo. ?C¨®mo lo ve?
R. En cambio es mucho m¨¢s uniforme que en otras ¨¦pocas. En teor¨ªa deber¨ªa significar libertad, ruptura, debacle emocional, delirios, y cosas as¨ª. Dinero, poco; en el indie nunca hubo mucho dinero.
P. ?Qu¨¦ opina del circuito de festivales actual?
R. Bueno, parece que hoy d¨ªa son las grandes empresas que organizan festivales y las plataformas digitales las que han tomado el testigo de las grandes discogr¨¢ficas. Los artistas no debemos aspirar m¨¢s que a ser ¡°creadores de contenidos¡±. Ahora est¨¢ todo mucho m¨¢s controlado. Sujeto y bien sujeto.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.