Zombis en Galicia, fantasmas del patriarcado y exorcismos madrile?os: el cine de terror espa?ol multiplica sus miradas
Propuestas como ¡®La mesita del comedor¡¯, ¡®Cerdita¡¯ o ¡®El llanto¡¯ demuestran que el g¨¦nero logra un p¨²blico de culto y un eco internacional, aunque se le resiste el ¨¦xito en salas del ¡®fantaterror¡¯ estadounidense
El terror vive una explosi¨®n en el cine mundial. Junto al cine de superh¨¦roes es innegable que cada vez que se estrena una pel¨ªcula de cine fant¨¢stico y de terror, conocido como fantaterror, entra entre las m¨¢s vistas. Sin estrellas, sin grandes presupuestos. Y Espa?a no se queda atr¨¢s. Este a?o, han llegado a las pantallas filmes de zombis, casas encantadas, terror rural o a las nuevas tecnolog¨ªas y met¨¢foras fantasmales de la violencia machista. Todos e...
El terror vive una explosi¨®n en el cine mundial. Junto al cine de superh¨¦roes es innegable que cada vez que se estrena una pel¨ªcula de cine fant¨¢stico y de terror, conocido como fantaterror, entra entre las m¨¢s vistas. Sin estrellas, sin grandes presupuestos. Y Espa?a no se queda atr¨¢s. Este a?o, han llegado a las pantallas filmes de zombis, casas encantadas, terror rural o a las nuevas tecnolog¨ªas y met¨¢foras fantasmales de la violencia machista. Todos ellos han logrado aunar una industria a trav¨¦s de nuevos nombres con proyecci¨®n internacional y distintos enfoques en un g¨¦nero que no se conforma con meter miedo de vez en cuando.
La espera, de F. Javier Guti¨¦rrez, se estren¨® el a?o pasado sin hacer ruido, y en noviembre llega a Filmin despu¨¦s de que su guion fuera elegido para ser incluido en la biblioteca permanente de la Academia de Hollywood. Como pas¨® con El hoyo, de Galder Gaztelu-Urrutia, y La mesita del comedor, de Caye Casas, su paso por salas no obtuvo el eco esperado en taquilla, un fen¨®meno habitual en la historia de terror. ¡°La gente ve lo que se anuncia. Si cualquiera de estas tres pel¨ªculas hubi¨¦semos tenido el potencial de otras, estoy seguro de que ser¨ªan un boom¡±, asegura Casas.
Este a?o ha dado para muy diferentes acercamientos a la diversidad del g¨¦nero, desde los zombis de Apocalipsis Z: el principio del fin, de Carles Torrens (producida y estrenada en la plataforma Prime Video); las m¨²ltiples casas encantadas de La hierba del diablo, de ?ngel Ayll¨®n, y La mujer dormida, de Laura Albea, o Un d¨ªa cualquiera, de Jos¨¦ Texeira, con toque rural; las leyendas urbanas locales de Estaci¨®n Rocafort, de Luis Pietro; el miedo al abuso real de Ca¨ªda libre, de Laura Jou; la sombra ancestral de la violencia machista de El llanto, de Pedro Mart¨ªn-Calero (ahora en cines), o las pesadillas entre neblina en la ambiental Faro, de ?ngeles Hern¨¢ndez. Y, sin embargo, su recorrido en salas ha sido desolador: sumada la taquilla de los t¨ªtulos de fantaterror estrenados hasta el 20 de octubre, apenas llegan a 488.000 euros de un total acumulado del cine espa?ol de 63 millones. Laura Fern¨¢ndez Brites, productora y directora general de Filmax, productora y distribuidora l¨ªder en Espa?a del fantaterror, reflexiona sobre estos datos: ¡°Es cierto, los ¨²ltimos lanzamientos no han ido bien. En cambio, los estadounidenses s¨ª. No s¨¦ si porque nos falta dinero de promoci¨®n o porque no hemos sabido comunicarnos con ese p¨²blico joven¡±.
Para Jimina Sabad¨², que el 8 de noviembre se estrena, tras dos d¨¦cadas bregando en la escritura de guiones y diversos proyectos, en el largo con Anatema, terror con monjas, exorcismos y catacumbas en Madrid, siempre habr¨¢ un p¨²blico fiel ¡°con ganas de disfrutar los sustos, que quiere pas¨¢rselo bien, y por eso atrae a los espectadores j¨®venes¡±. Gente que asiste a festivales como Sitges o la Semana de cine fant¨¢stico y de terror, que se celebra estos d¨ªas en San Sebasti¨¢n. Su director, Josemi Beltr¨¢n, explica: ¡°En mis 14 a?os de direcci¨®n, veo algunos cambios. Noto mucho m¨¢s p¨²blico femenino en el certamen. Hay nuevas miradas, como la de Carlota Pereda, que se present¨® con Cerdita [y despu¨¦s ha seguido con el terror con La ermita]. Tambi¨¦n es cierto que cada vez se elige m¨¢s, que se ha incrementado la venta de entradas individuales y decrecen los abonos¡±. O como le dijo una espectadora de 16 a?os: ¡°?Qu¨¦ nos vais a dar para sacarnos de casa? En su mente ya no est¨¢ el consumo cultural de ir a una sala¡±. Casas subraya la l¨®gica econ¨®mica del g¨¦nero: ¡°El g¨¦nero tiene un p¨²blico superfiel, un p¨²blico de evento en sala, que encima compra merchandising, camisetas¡ En todo el mundo el terror genera much¨ªsimo dinero, porque suele ser barato¡±. El mismo 8 se estrena otra de terror patrio: El libro.
El terror sigue tirando en taquilla. En 10 d¨ªas, Smile 2 lleva en Espa?a 1,8 millones de euros. Y este jueves, en la noche de Halloween, se estrena en salas espa?olas Terrifier 3, el fen¨®meno de la temporada en EE UU: all¨ª lleva 42 millones de euros ¡ªcuando su presupuesto no llega ni a dos millones¡ª. Pero de este tir¨®n, ?se beneficia el fantaterror espa?ol? Tras la gran hornada nacida de la Filmax en la primera d¨¦cada de este siglo, y cuyo buque insignia fue [REC], hay miradas modernas que subrayan que desde hace dos a?os se vive un gran momento que, sin embargo, no encuentra eco en las recaudaciones.
Estrenos todo el a?o
Los entrevistados subrayan: el tir¨®n del cine estadounidense de terror es tan grande que ya hay estrenos todo el a?o y no solo en octubre y noviembre, como hace d¨¦cadas. ¡°Es un g¨¦nero sin estrellas, o al menos no son tan importantes, sino que lo que tira es el concepto de cada pel¨ªcula¡±, explica Beltr¨¢n. ¡°En contraposici¨®n, es complicado sacar los proyectos adelante en Espa?a. He tenido suerte, pero escucho a mis compa?eros, veo el resto¡±, apunta Pereda. ¡°Hay una gran resonancia internacional del terror espa?ol. Pero veo la distancia que nos saca Francia¡±.
En Europa, son los cineastas franceses los que mandan, porque han logrado conectar con su p¨²blico local y a la vez saltar a Hollywood. ¡°Se nota que hubo una gran explosi¨®n internacional con Jaume Balaguer¨®, Paco Plaza y los filmes salidos del sello Fantastic Factory¡±, recuerda Fern¨¢ndez Brites, ya que esta iniciativa surgi¨® de Filmax: ¡°En muchos pa¨ªses y festivales conocen a Espa?a por el terror. Puede que el p¨²blico espa?ol no se entere de este viaje o no reaccione comercialmente ante ¨¦l, porque primero los filmes se estrenan en Espa?a, como es normal, y luego disfrutan de este recorrido de unos dos a?os¡±. Caye Casas tambi¨¦n se?ala la cantidad de cortometrajes que exporta el pa¨ªs: ¡°Cuando ven que vienes de Espa?a y haces g¨¦nero, hay un respeto¡±. Mart¨ªn-Calero se siente apoyado, pero, tras ganar el premio a la mejor direcci¨®n en el festival de San Sebasti¨¢n, s¨ª que not¨® ¡°cierto prejuicio y mirada por encima del hombro¡± con el g¨¦nero.
?De d¨®nde viene este ¨¦xito internacional? Seg¨²n Fern¨¢ndez, ¡°por su originalidad, el riesgo y cierto humor. Hacen que la historia sea absolutamente original¡±. Beltr¨¢n y Pereda coinciden en que la apertura de miradas, la capacidad de ¡°contar una visi¨®n¡± y de indagar en el folclore espa?ol suman atractivos. Tanto ellos como Casas nombran a Paul Urkijo, que con Errementari (2018) e Irati (2020) ha llevado la mitolog¨ªa vasca a la pantalla en historia de espadas y brujer¨ªa. Sabad¨² cree tambi¨¦n que poco a poco se est¨¢ superando ¡°un machismo inherente¡± al cine de terror, ¡°que llega nueva gente procedente de escuelas de cine¡±, y que el terror espa?ol sabe explicar muy bien de d¨®nde vienen los miedos: ¡°Los mecanismos de pel¨ªculas de terror se asientan en cosas absolutamente irracionales. Cuando entra el raciocinio desaparece el terror, por eso se asocia la noche, cuando eres m¨¢s vulnerable. Cuanto menos se explica el terror, lo que est¨¢ pasando, mejor funciona. En cambio, la ciencia ficci¨®n es un g¨¦nero totalmente cerebral. Por esos miedos, el cine de terror no aguanta finales felices. Otro detalle: el cine de terror aporta una gran capacidad de liberaci¨®n de los propios traumas¡±.
El llanto, por ejemplo, habla de la violencia machista: ¡°No adoctrinas, que a m¨ª es el cine que menos me gusta. Lo presentas como una sensaci¨®n con im¨¢genes¡±, explica Mart¨ªn-Calero, que siente su influencia en el terror de los cuadros de Goya: ¡°Expresas esta sociedad confusa y violenta, y podemos ser m¨¢s valientes con los temas que intentamos tapar. Te sirve de terapia. Ayuda a sanar lo que te asusta. Es un ensayo general a la realidad¡±. Cree que el ¨¦xito viene del gusto de Espa?a por el surrealismo. Casas apunta: ¡°Cuando hay crisis mundial, a la gente le gusta ir a sufrir a las salas y salir con la adrenalina a tope¡±. En pleno confinamiento por la covid en 2020, Netflix decidi¨® poner El hoyo en un punto privilegiado de su plataforma. Su terror para hablar de las luchas sociales pronto se convirti¨® en lo m¨¢s visto en el mundo, y hoy sigue siendo la quinta pel¨ªcula no en ingl¨¦s m¨¢s taquillera de la historia de la plataforma. En 2024 ha estrenado otra secuela metaf¨®rica.
El futuro tampoco es halag¨¹e?o, aunque no por falta de talento: las ayudas nacidas de las administraciones y de televisiones p¨²blicas y los premios de cine suelen ir a la contra del cine de terror. ¡°En Filmax no paramos de recibir guiones, pero es dif¨ªcil levantar proyectos si no sumas otras palancas econ¨®micas¡±, advierte Fern¨¢ndez. Casas reconoce que nunca ha recibido una subvenci¨®n para sus pel¨ªculas, y La mesita del comedor solo lleg¨® a Espa?a a Filmin tras triunfar en festivales internacional y ser recomendada por Stephen King: ¡°Las ayudas p¨²blicas va por modas y momentos, y ahora toca a un cine m¨¢s intimista. Yo vengo del cine independiente de muy bajo coste. Una de las cosas vitales es que no haya censura en el terror. Las grandes productoras y plataformas tienen que dejarse de l¨ªneas rojas, porque en el terror se pueda hacer lo que te d¨¦ la gana. Por eso existe. Muchos de sus ¨¦xitos estuvieron censurados. Su ¨¦xito viene de la diferencia. Yo quiero asustar y perturbar¡±. Reconoce, aun as¨ª, que es m¨¢s f¨¢cil que su pr¨®ximo proyecto sea en Estados Unidos, ¡°y sin tener ni idea de ingl¨¦s¡±.