El delirante camino a la redenci¨®n de Peter Perrett, l¨ªder de los malditos The Only Ones

A Peter Perrett la cerveza sin alcohol con que acompa?¨® anoche su cena en Madrid le sent¨® mal. ¡°Algo de alcohol tiene, aunque sean 0,5? grados. Despu¨¦s fuimos caminando al hotel y deb¨ªa mantener la cabeza equilibrada. Por alguna raz¨®n, el alcohol es un veneno para m¨ª. Llevo sin beber 40 a?os, y es una pena, porque me gusta un vino en la comida, no su efecto. Pero no conozco vino sin alcohol decente¡±, dice.

Perrett (Londres, 72 a?os), l¨ªder a finales de los a?os setenta de la banda inglesa The Only Ones, lleva totalmente limpio desde 2011. Lo cual, en cierto modo, se antoja una paradoja en su biograf¨ªa, marcada tanto por la m¨²sica como por las sustancias estupefacientes. ¡°Soy de m¨²sica o de drogas, de lo uno o lo otro, pero no de ambas cosas a la vez, aunque hay compa?eros que lo compaginan¡±, declara: ¡°Peque?as partes de mi vida han sido m¨²sica, y no puedo evitar hablar de drogas, porque han sido la mayor parte. Conozco el lado oscuro de la existencia, y ahora puedo verlo con humor negro o c¨ªnico. He estado dormido mucho tiempo, y he despertado viendo este mundo como es ahora¡±.

Esta ma?ana aparece fresco y hablador en su visita a Madrid: puede dedicar 10 minutos a desarrollar una respuesta. Una idea le lleva a la siguiente, y en todas, con lenguaje culto, introduce flecos de su pasado y su presente, marcado este por el disco que acaba de publicar, The Cleansing, de formato doble. ¡°Mi motivaci¨®n para volver a componer fue dejar de tomar drogas y fumar porros o nicotina¡±, explica. ¡°Estaba viviendo en un universo interior del que sal¨ª, y me encontr¨¦ con mucho tiempo libre porque ya no ten¨ªa¡­ las manos ocupadas. Y si me aburro, cojo una guitarra. Se convirti¨® en una terapia. Me di cuenta de que realmente disfrutaba; hab¨ªa estado en un mundo alternativo unidimensional, y cuanto m¨¢s tiempo pasas ah¨ª, m¨¢s te olvidas del real¡±.

The Only Ones es, sin hip¨¦rbole, un grupo maldito. Public¨® tres discos entre 1978 y 1980, que pocos conocen. Dejaron para la posteridad un sencillo que a algunos sonar¨¢: Another Girl, Another Planet (1978), un estacazo de punk-pop que ha sido utilizado despu¨¦s en varias bandas sonoras y grabado por otras bandas, como Blink-182. Tiene un halo m¨ªtico, pues se asegura que habla de drogas. Perrett lo desmiente: ¡°Es sobre un romance, empleando la analog¨ªa de enamorarse de las drogas¡±. Afirma que solo una canci¨®n de su primera etapa estaba directamente inspirada en los narc¨®ticos: The Beast. ¡°Y era antidrogas: advert¨ªa a la gente de sus peligros¡±.

Fueron estas sustancias, adem¨¢s del escaso impacto comercial de su m¨²sica, lo que puso fin a The Only Ones. ¡°En aquellos d¨ªas yo experimentaba con drogas, pero no eran una obsesi¨®n¡±, aclara. ¡°Soy muy obsesivo, as¨ª que una vez que empec¨¦ a consumir a diario, dej¨¦ de escribir canciones. En ese momento la banda se separ¨®. Crack, hero¨ªna, no piensas en nada m¨¢s. Especialmente con el crack. No tienes tiempo de coger una guitarra¡±. Aun as¨ª, a sus compa?eros de banda su creciente adicci¨®n caus¨® alarma. ¡°Se volvi¨® ca¨®tico¡±, se?ala. ¡°Les preocup¨® que el grupo se desmoronara, lo que no ocurri¨®. Hac¨ªamos buenos conciertos¡­ aunque lleg¨¢bamos muy tarde a tocar¡±. El detonante de la separaci¨®n fue un episodio digno de serie de Netflix: el resto de la banda le dej¨® tirado en ?msterdam y volvieron a Londres en el coche de Perrett.

¡°Me abandonaron sin dinero¡±, recuerda. ¡°Pensaron que me dar¨ªan una lecci¨®n dej¨¢ndome como si fuera una maleta. La embajada brit¨¢nica estaba en el otro extremo de ?msterdam y cada minuto de la caminata hasta all¨ª, para ser repatriado, aument¨® el odio hacia ellos. Fui a la polic¨ªa y denunci¨¦ el robo de mi coche, pero pensaron que era un loco de una banda de rock. A ra¨ªz de eso empec¨¦ a tomar drogas todo el tiempo, para matar el dolor por la ruptura, de cada sue?o que tuve. Las drogas fueron el motivo por el que rompimos, sin ellas nunca habr¨ªa permitido que esto sucediera. En todo caso, podr¨ªamos habernos tomado un a?o de descanso¡±.

No est¨¢ seguro de si The Only Ones ¡ªque se ha reunido en dos ocasiones: en 2007 y 2023¡ª fue una formaci¨®n infravalorada. ¡°Another Girl, Another Planet ha desarrollado un legado m¨¢s grande que el grupo¡±, expone. ¡°Mucha gente conoce la canci¨®n pero no a la banda original, porque se han grabado otras versiones. No creo que nos subestimaran en su tiempo. ?ramos una gran banda en vivo¡­ En mi opini¨®n, era estupenda, pero creo que todos los que escriben canciones tienden a considerar que poseen cierto matiz de genios. Creen que tienen algo especial y diferente que contar. Puedo escribir letras que invitan a la reflexi¨®n. Si no fuera as¨ª, ?por qu¨¦ exponerse al rid¨ªculo?¡±.

Certificada la defunci¨®n (temporal, aunque larga) de The Only Ones, emergi¨® la otra cara de Perrett. Las drogas pasaron a ser el centro de su actividad. ¡°Paulatinamente olvid¨¦ lo que hab¨ªa vivido con el grupo¡±, reconoce. Entr¨® en un programa de rehabilitaci¨®n en 1985, tras el cual escribi¨® dos canciones. ¡°No era algo real, porque todav¨ªa hab¨ªa algo dentro de m¨ª que quer¨ªa tener esa sensaci¨®n. Porque si alguien me hubiera preguntado, habr¨ªa respondido que estaba en la gloria. Sin molestias por nada. No te toca nada que pueda ser molesto. Cuando sales de ah¨ª te das cuenta de que no es real. Reflexionas sobre ello y comprendes que ha sido un tiempo perdido. Me arrepiento, porque no es positivo. Ahora intento hacer que el tiempo que me queda sea positivo¡±.

Los qu¨ªmicos fueron su medio de vida. ¡°Se convirtieron en mi econom¨ªa. Ayudaba a gente que tra¨ªa las drogas a deshacerse de ellas y nosotros [¨¦l y su esposa, Zena Kakoulli, con quien Perrett se fug¨® a los 16 a?os y se cas¨® en 1970] nos qued¨¢bamos con algunas. B¨¢sicamente viv¨ªamos en la econom¨ªa sumergida. Nos presentaron a gente afgana, iran¨ª, de Sudam¨¦rica, y nosotros las present¨¢bamos a otras personas y recib¨ªamos un pago por ello. Zena, adem¨¢s, era muy buena transformando la coca¨ªna en crack. Hac¨ªa el crack m¨¢s puro, y la gente ven¨ªa con dinero. Vendimos la casa y en poco tiempo nos gastamos el medio mill¨®n de libras en drogas¡±. En 2004, el abuso de sustancias les pas¨® factura, en especial a Zena, a quien un m¨¦dico dio cuatro a?os de vida si segu¨ªa tom¨¢ndolas. ¡°Entonces empezamos a consumir el doble, solo para aliviar el dolor de ese pensamiento¡±. Zena no muri¨®.

Entre ambos criaron a dos hijos, Jamie y Peter Jr. ¡°No era un buen ambiente para ellos. Quedaron traumatizados. Por eso dudo mucho que sigan ese camino. La gente ven¨ªa a casa para preocuparse por ellos. Mi hijo Jamie me ha dicho que pensaba que yo estaba deprimido¡±. Jamie Perrett ha producido los dos ¨²ltimos discos de su padre, Humansworld (2019) y el nuevo, The Cleansing. ¡°Es incre¨ªble poder hacer m¨²sica con ¨¦l. Uno merece ese tipo de amor¡±, dice Peter.

En 2011, cort¨® con las drogas. ¡°Disminu¨ª gradualmente la ingesta¡±, explica. ¡°Odiaba ser arrastrado fuera de la existencia normal de la gente. He madurado. Probablemente podr¨ªa haber madurado antes si fuera una persona m¨¢s equilibrada y menos compulsiva. Entonces no pensaba en las consecuencias. El estilo de vida del rock and roll te anima a exhibir tu arrogancia, tomar drogas es un clich¨¦, pero me averg¨¹enzo de ello. Me considero inteligente; ?c¨®mo puede una persona inteligente caer en eso?¡±, se pregunta sin respuesta.

Volver a empezar

Y como dej¨® las drogas, recuper¨® el h¨¢bito de componer. En 2017 lanz¨® su primer disco en solitario, How the West Was Won. Pero en 2020 lleg¨® la pandemia de covid, y los servicios sanitarios recomendaron a la pareja que, dado su endeble estado de salud, no saliera de casa. Era marzo de ese a?o; no pisaron la calle otra vez ¡ªexcepto para ir al m¨¦dico¡ª hasta septiembre de 2021. ¡°Era como estar en una pel¨ªcula de ciencia ficci¨®n. Fue muy claustrof¨®bico, pero, por otro lado, se pod¨ªa disfrutar. Escrib¨ª algunas canciones, as¨ª que ese septiembre cuando pudimos salir, con mascarillas, estaba emocionado¡±. Reserv¨® fechas en un estudio para grabarlas, pero antes de que pudiera hacerlo, nuevo contratiempo.

Su hijo Jamie es amigo de Carlos O¡¯Connell, guitarrista de Fontaines D.C.; el 27 de octubre de 2021 asistieron a un concierto de esta banda, Peter se tom¨® una cerveza, socializ¨®¡­ y se infect¨® de covid. El 1 de noviembre, cuando deb¨ªa haber entrado a grabar, se ve¨ªa postrado en una cama de hospital, donde permaneci¨® 13 d¨ªas. El primero se cay¨® de una silla y se rompi¨® la cadera. ¡°Descubr¨ª que ten¨ªa osteoporosis severa, por mi estilo de vida. Es autoinfligido¡±, dice. Recuperado del covid, hubo de aprender a caminar. ¡°Cuando has estado andando 69 a?os sin pensarlo, ahora deb¨ªa pensar para llegar al destino, por cercano que fuera. Hac¨ªa 600 ejercicios al d¨ªa para recuperar mis m¨²sculos. Pudo ser un momento deprimente, pero por alguna raz¨®n desarroll¨¦ fuerza de voluntad para intentarlo y despu¨¦s de seis meses pod¨ªa ponerme en pie sin muletas¡±.

Volvi¨® a reservar estudio para grabar The Cleansing. Las sesiones comenzaron con las tomas de voz, proceso inverso al habitual. ¡°Fue una manera liberadora de afrontar la m¨²sica. Hace m¨¢s f¨¢cil juzgar si lo que viene despu¨¦s encaja o no¡±, dice. El disco, adem¨¢s de con la producci¨®n de Jamie Perrett, cuenta con las colaboraciones de Johnny Marr (exThe Smiths), Carlos O¡¯Connell (Fontaines D.C.), Bobby Gillespie (Primal Scream), Alice Go (Dream Wife) y Peter Perrett Jr. al bajo. Un brillante elenco que, unido a la ufana penumbra de las canciones, hacen de The Cleansing una obra especial.

El tema I Wanna Go with Dignity est¨¢ inspirado en el suicidio del periodista musical brit¨¢nico David Cavanagh, en 2019 (a los 54 a?os), a quien Perrett conoc¨ªa porque hab¨ªa escrito el texto promocional del primer disco en solitario. ¡°Salt¨® al paso de un tren para quitarse la vida¡±, explica. ¡°Es bastante malo que un conocido se suicide. Piensas en su ¨²ltima interacci¨®n con los dem¨¢s y no te das cuenta de lo desesperado que est¨¢. En su nota de despedida dec¨ªa que iba a suicidarse despu¨¦s de navidades para no arruinar las fiestas a los pasajeros del tren. Pens¨¦ mucho en la psicolog¨ªa de eso. En el intervalo ?contempl¨® quiz¨¢ el no hacerlo? Pero la hondura de su depresi¨®n deb¨ªa de estar en otra escala. Es dif¨ªcil mantener la cordura en este mundo actual, por eso muchas personas con depresi¨®n no pueden salir. Es una canci¨®n sobre la depresi¨®n, el suicidio y tambi¨¦n la eutanasia; sobre marcharse con dignidad¡±.

Causa curiosidad que otro de los temas nuevos se titule Kill a Franco Spy. ¡°Es una secuencia de eventos¡±, apunta. ¡°Bobby Gillespie, que es mi vecino, llam¨® a mi puerta. Ven¨ªa con Warren Ellis, de The Bad Seeds, a quien hac¨ªa tiempo que yo no ve¨ªa. Este me pregunt¨® como estaba, y respond¨ª: ¡®En mis ¨²ltimas piernas¡¯. Con esa frase empieza la letra. Es una idea bastante rom¨¢ntica. Ese mismo d¨ªa vi La dama de Shangh¨¢i, de Orson Welles (1947), y en una de las primeras secuencias alguien dice con admiraci¨®n que podr¨ªa matar a un esp¨ªa de Franco con sus propias manos. Eso reson¨® en mi cabeza. Y en la ¨²ltima imagen, Rita Hayworth, a quien han disparado, se arrastra por el suelo diciendo: ¡®Dale mi amor al amanecer¡¯. Me parecen las palabras m¨¢s rom¨¢nticas de alguien que est¨¢ a punto de morir. Y estaba tratando de arrastrarse con sus ¨²ltimas piernas¡±. En el disco hay tambi¨¦n canciones de amor (Fountain of You), feminismo (Women Gone Bad) e incluso sobre su vida desperdiciada (All That Time).

Resulta dif¨ªcil determinar si la vida de Peter Perrett ha sido desperdiciada o no. Lo cierto es que ah¨ª est¨¢, hablando como un loro, los ojos cubiertos todo el tiempo con gafas de sol, y feliz con su resurrecci¨®n musical. ¡°Soy muy afortunado. Poca gente de mi edad tiene un pasatiempo como el m¨ªo, tan saludable. Conozco a fans que me siguen desde hace d¨¦cadas, y otros m¨¢s j¨®venes, adoctrinados por sus padres, y es suficiente para que valga la pena¡±. Y a?ade: ¡°Es una l¨¢stima que gran parte de mi pasado est¨¦ vinculado a las drogas. No mucha gente abandona lo que podr¨ªa haber sido una carrera larga a los 28 a?os. Y ahora estoy empezando de cero¡±.

No piensa mucho en la muerte. ¡°Lo que me asusta es que mi esposa muera antes que yo, porque no s¨¦ c¨®mo lidiar¨ªa con eso. Su cuerpo est¨¢ m¨¢s da?ado por nuestro estilo de vida. Pero no temo a la muerte. Nunca he estado cerca de morir¡±, asegura. Anuncia que tiene la mitad del siguiente disco grabada. ¡°Lo ¨²ltimo que quieres cuando terminas de grabar es empezar de nuevo el proceso. B¨¢sicamente soy un vago. Pero luego vuelves a coger la guitarra. Y hay descartes de otros discos que har¨¢n un gran ¨¢lbum p¨®stumo. Me estoy adelantando, pero probablemente vivir¨¦ para sacar ese otro disco. Mi padre muri¨® con 73 y no tomaba drogas¡±.