Un puente art¨ªstico para unir Espa?a y Turqu¨ªa

En el vibrante paisaje cultural de Estambul, donde la innovaci¨®n art¨ªstica se manifiesta en iniciativas que buscan conectar a los artistas con sus comunidades y reflejar problemas actuales, este a?o se ha tendido un puente cultural entre Espa?a y la ciudad del B¨®sforo. La instituci¨®n art¨ªstica Salt y la Fundaci¨®n BBVA han puesto en marcha un programa de becas que se centra en la investigaci¨®n y producci¨®n art¨ªstica de vanguardia y, al mismo tiempo, la exposici¨®n Let Us Go Back to the Beginning, ...

En el vibrante paisaje cultural de Estambul, donde la innovaci¨®n art¨ªstica se manifiesta en iniciativas que buscan conectar a los artistas con sus comunidades y reflejar problemas actuales, este a?o se ha tendido un puente cultural entre Espa?a y la ciudad del B¨®sforo. La instituci¨®n art¨ªstica Salt y la Fundaci¨®n BBVA han puesto en marcha un programa de becas que se centra en la investigaci¨®n y producci¨®n art¨ªstica de vanguardia y, al mismo tiempo, la exposici¨®n Let Us Go Back to the Beginning, de la artista vasca Itziar Barrio, explora en la sede de Salt, en Estambul, a trav¨¦s de instalaciones y cine, el impacto de la tecnolog¨ªa en la identidad humana, el trabajo y los l¨ªmites de nuestra percepci¨®n. Ambas iniciativas reflejan un compromiso por explorar las complejidades del entorno cultural, un espacio de intercesi¨®n entre la historia y el futuro de Turqu¨ªa.

Antes de nada, conviene responder a la pregunta de qu¨¦ es Salt. ¡°Ser un museo aqu¨ª ya es de por s¨ª dif¨ªcil. Pero ser una instituci¨®n acad¨¦mica, educativa, un archivo de la zona¡­ es casi imposible¡±, cuenta Deniz Ova, directora general de la instituci¨®n, mientras camina por los imponentes pasillos de la sede de lo que una vez fue el Banco Otomano. Efectivamente, Salt pretende ser todas esas cosas, y en el camino se ha convertido en un referente del arte y la cultura contempor¨¢nea en Estambul. Creada en 2011 por el Banco Garanti (segunda entidad bancaria privada del pa¨ªs y que hoy pertenece al BBVA), es todo un puente art¨ªstico que une al pa¨ªs con la Europa occidental. Hoy funciona como ¡°museo, centro de investigaci¨®n, archivo y librer¨ªa¡±, enumera Ova, que destaca que el objetivo de la instituci¨®n es ¡°crear conocimiento y crear diferentes narrativas que permitan percibir el presente¡±. En Salt se entremezclan el arte, la arquitectura o el dise?o, pero tambi¨¦n el medio ambiente (un tema crucial en Estambul), para ¡°crear conciencia y preocupaci¨®n por los temas que nos rodean¡±.

Salt se ha establecido como una instituci¨®n cultural l¨ªder en Turqu¨ªa, ¡°comprometida con la investigaci¨®n y el desarrollo de proyectos p¨²blicos que, a trav¨¦s de becas y exposiciones, fomenta la investigaci¨®n visual y social, proporcionando un espacio para que los artistas exploren temas complejos y relevantes¡±, cuenta Ova. La Fundaci¨®n BBVA apoya estas iniciativas. ¡°La gente cede sus fotograf¨ªas, sus cartas, sus historias, para formar un archivo hist¨®rico del barrio y de la ciudad¡±. La referencia al barrio no es balad¨ª: el barrio de G¨¢lata, en Estambul, est¨¢ al norte del llamado Cuerno de oro, donde se sit¨²an las imponentes Santa Sof¨ªa y la Mezquita Azul. En ese barrio, con vistas al B¨®sforo, coronado por la imponente Torre de G¨¢lata y atravesado por algunas de las m¨¢s empinadas y atestadas calles de la ciudad situada entre dos continentes, se localiza el majestuoso edificio del antiguo Banco Otomano, sede de Salt. ¡°Desde el a?o 2000¡å, contextualiza Ova, ¡°la mayor parte del inter¨¦s por el arte contempor¨¢neo se vertebra a trav¨¦s de iniciativas privadas, lo que confiere a propuestas como la nuestra un m¨¦rito extra.

Arte vasco en el B¨®sforo

¡°Ver el espacio de Salt y entrar en contacto con la cultura y el contexto ayud¨® mucho a la forma que la exposici¨®n tom¨®, ya que algunas piezas e intervenciones est¨¢n hechas para espacios espec¨ªficos del edificio, como las cajas de seguridad del antiguo banco¡±. Son palabras de la artista Itziar Barrio (Bilbao, 48 a?os), que presenta en Salt la exposici¨®n Let Us Go Back to the Beginning (Volvamos al principio), una nueva versi¨®n de la trilog¨ªa Material (auspiciada por la beca Multiverso de la Fundaci¨®n BBVA), la cual, explica la artista, ¡°analiza la intersecci¨®n entre la tecnolog¨ªa, la materia, el trabajo y la identidad¡±.

Cada cap¨ªtulo de la trilog¨ªa que puede verse en Salt tiene relaci¨®n con diferentes estados de la materia. En el primer cap¨ªtulo son los l¨ªquidos, los fluidos y el agua los que aparecen como un elemento con gran fuerza simb¨®lica. A Demon that Slips into Your Telescopes while You¡¯re Dead Tired and Blocks the Light (Un demonio que se cuela en tus telescopios mientras est¨¢s muerto de cansancio y bloquea la luz), pel¨ªcula que pertenece a esa primera parte, entremezcla el lenguaje documental con el de la ficci¨®n especulativa para analizar la construcci¨®n del conocimiento cient¨ªfico. ROBOTA MML, la segunda parte de la trilog¨ªa, critica la creencia de que lo humano est¨¢ enfrentado a la m¨¢quina, ¡°cuando en realidad ya estamos siendo fusionados con las m¨¢quinas¡±, cuenta Barrio. Esta segunda aparte, enfocada en lo s¨®lido, incluye una serie escult¨®rica que fusiona piedra y pl¨¢stico: ¡°Cuerpos h¨ªbridos, algo entre varias cosas y fuera de lo binario: entre lo usado, lo no usado; lo industrial y lo manual; lo org¨¢nico, la m¨¢quina, la materia¡­¡±.

Particle Matter, la tercera parte, es una creaci¨®n audiovisual y una investigaci¨®n sobre las m¨²ltiples manifestaciones de lo microsc¨®pico. Como cuenta la artista: ¡°En mis proyectos me interesa alumbrar la subjetividad y encontrar esos espacios inclasificables, no binarios, que se escapan al lenguaje y la racionalizaci¨®n¡±. ¡°La colaboraci¨®n con Itziar ha sido muy fruct¨ªfera¡±, cuenta Fatma ?olako?lu, comisaria y directora de programas de Salt, que pasea entre los rincones del antiguo banco (c¨¢maras acorazadas, antiguas recepciones) y se?ala esculturas que mezclan piedra y pl¨¢stico y que Barrio cre¨® all¨ª mismo, durante una visita. ¡°No es la ¨²nica exhibici¨®n actual de Salt¡±, cuenta ?olako?lu, ¡°pero estamos particularmente orgullosos de esta: de su calidad y de la aceptaci¨®n que ha tenido entre el p¨²blico¡±.

El rastro de la edici¨®n

Efectivamente, no es la ¨²nica exhibici¨®n de Salt. En paralelo, en un segundo edificio situado unas cuantas calles al norte, se puede visitar Designer¡¯s Note, una exposici¨®n que examina la evoluci¨®n del dise?o gr¨¢fico en Turqu¨ªa entre los a?os setenta y noventa, un periodo marcado por transformaciones sociales, pol¨ªticas y econ¨®micas. Este recorrido visual destaca el papel del dise?ador gr¨¢fico como una figura clave en la construcci¨®n de la identidad cultural y pol¨ªtica de Turqu¨ªa. La exposici¨®n refleja una ¨¦poca en la que la publicaci¨®n cultural cobr¨® impulso y el libro, en particular, comenz¨® a ser tratado como un objeto de dise?o integrado: ¡°Los ¨²ltimos 25 a?os del siglo XX turco estuvieron profundamente marcados por la aplicaci¨®n del programa de estabilizaci¨®n econ¨®mica en 1980 y el golpe de Estado de ese a?o, que pavimentaron el camino para la integraci¨®n de Turqu¨ªa en la econom¨ªa global y generaron una transformaci¨®n cultural sin precedentes¡±, explica Deniz Ova. Durante la d¨¦cada de los ochenta, el sector editorial turco experiment¨® una revitalizaci¨®n significativa, las empresas privadas comenzaron a ver el ¨¢mbito cultural como una inversi¨®n prestigiosa, y las publicaciones se convirtieron en s¨ªmbolos de disidencia pol¨ªtica.

¡°Turqu¨ªa, y espec¨ªficamente Estambul, tienen mucho que decir en el panorama del arte global¡±, cuenta Ova, antes de girarse en direcci¨®n al archivo de Salt para digitalizar fotograf¨ªas con un siglo de antig¨¹edad que han donado familias de la zona. ¡°Y nosotros ponemos nuestro granito de arena¡±. Esas fotos, esas peque?as historias, son otras de las muchas piezas que Salt utiliza para crear su peque?o reducto cultural: una forma de comprender mejor el arte, y de unir el presente y el pasado de la ciudad partida entre Europa y Asia.