Ni Goku ni Wonder Woman: el h¨¦roe m¨¢s exitoso de la literatura infantil actual se llama Polic¨¢n
Los c¨®mics sobre el agente perro lanzados en 2016 por Dav Pilkey, ya autor del superventas ¡®Capit¨¢n Calzoncillos¡¯, arrasan en todo el mundo y preparan su adaptaci¨®n a videojuego y cine, despu¨¦s de llegar al musical
El peque?o Dav Pilkey era distinto. Y tambi¨¦n lo era su pupitre. En el aula no hab¨ªa sitio para ¨¦l, ni siquiera literalmente. La medicina entendi¨® pronto qu¨¦ le pasaba al chiquillo: dislexia y trastorno de d¨¦ficit de atenci¨®n e hiperactividad. Pero, antes del diagn¨®stico, los maestros solo ve¨ªan a un alumno con pocas ganas de aprender. De ah¨ª que le propinaran siempre la misma lecci¨®n: expulsado. Al parecer, se pasaba m¨¢s rato sentado en el pasillo que en clase. Y, a falta de compa?¨ªa o tareas, dibujaba superh¨¦roes tan peculiares como ¨¦l. Ah¨ª germin¨® otro rasgo que hac¨ªa distinto a Pilkey: su talento. De aquellos garabatos solitarios y autobiogr¨¢ficos empezaron a salir personajes que, d¨¦cadas despu¨¦s, tienen millones de lectores. Primero, Capit¨¢n Calzoncillos. Y ahora, Polic¨¢n, una de las mayores estrellas globales de la literatura infantil y juvenil. Un agente tan improbable, patoso, impulsivo, dulce, extra?o, desesperante, divertido y excesivo como cualquier peque?o. En una palabra: adorable.
Solo en Espa?a sus c¨®mics han vendido un mill¨®n de copias, en datos de su editora, SM. En el mundo, van por 60 millones, en 47 idiomas. ¡°Si tienes en tu vida ni?os que van al colegio, lo conoces¡±, resum¨ªa Jeff Hardy, responsable de la venidera adaptaci¨®n a videojuego, Un d¨ªa de perros, en un texto en la plataforma Linkedin. Y el impacto sigue creciendo con cada entrega, desde su debut en agosto de 2016. El 12? cap¨ªtulo, El pestazo escarlata, se convirti¨® esta primavera, en su semana de lanzamiento, en el libro m¨¢s vendido en absoluto en EE UU, Canad¨¢, Irlanda, Australia y Nueva Zelanda, como recoge su sello original, Scholastic. En Espa?a sali¨® hace unos d¨ªas con una tirada de 40.000 ejemplares y ocup¨® enseguida el primer puesto en la categor¨ªa novela gr¨¢fica infantil, seg¨²n datos de la consultora especializada Gfk facilitados por SM. Y en menos de un mes las librer¨ªas de los pa¨ªses de habla inglesa ya recibir¨¢n la 13? entrega.
Hace a?os, adem¨¢s, que distintos escenarios de EE UU acogen la adaptaci¨®n de Polic¨¢n a musical. El 6 de diciembre el c¨¦lebre perro empezar¨¢ a saltar y correr en consolas y ordenadores, a la espera de que, en 2025, llegue al cine de la mano de Dreamworks. Iconos como Spider-Man, Goku o Wonder Woman han doblado alguna vez la rodilla ante Polic¨¢n en las cifras de mercado. Pero, a este paso, amenaza con derrotarles tambi¨¦n en el coraz¨®n de los peque?os. Y eso que nunca habla. Tampoco Pilkey, de 58 a?os, accedi¨® a conversar sobre el fen¨®meno, pese a la solicitud de este diario.
¡°Cuando algo es aut¨¦ntico de verdad, se nota. Pilkey hace lo que le da la gana, con un estilo muy propio. Tiene un humor muy reconocible. Les habla a los chavales de t¨² a t¨². Y, de fondo, aunque sea a trav¨¦s de acciones disparatadas, se deslizan tambi¨¦n temas importantes, como el auge de la desinformaci¨®n¡±, destaca Xohana Bastida. La editora y traductora de Polic¨¢n al castellano subraya su amplia franja lectora: empieza a gustar a los seis a?os, pero sigue atrapando a los 14. Y coloca el punto de inflexi¨®n de su triunfo espa?ol en la pandemia: ¡°Desde 2022, fue la locura¡±.
El personaje, en realidad, naci¨® en 2012 en las p¨¢ginas de Capit¨¢n Calzoncillos, la obra entonces m¨¢s c¨¦lebre del autor, finalizada tras 90 millones de copias vendidas y sendas adaptaciones a pel¨ªcula y serie. En su episodio El contraataque de Cocoliso Cacapipi, los ni?os protagonistas, Jorge y Berto, dibujaban un c¨®mic. Y daban vida, por primera vez, al perro polic¨ªa. Cuatro a?os despu¨¦s, Polic¨¢n se estren¨® al fin en solitario. Hoy hasta tiene su propio spin-off, El club de c¨®mic de Chikigato.
En la metaficci¨®n inicial, sus presuntos autores Jorge y Berto a¨²n estaban en la guarder¨ªa, lo que da una pista sobre el planteamiento de Polic¨¢n: aventuras delirantes, villanos incre¨ªbles, mucha acci¨®n, algo de escatolog¨ªa y rebeld¨ªa. El juego se mantiene en la serie original: todo se plantea como si fueran los tebeos creados por los jovenc¨ªsimos artistas. Hasta hay p¨¢ginas, bautizadas como Flip-o-ramas, que el lector debe sacudir adelante y atr¨¢s para generar la sensaci¨®n de movimiento. ¡°El lenguaje es directo, sencillo y divertido, lo que lo hace ampliamente asequible para primeros lectores¡±, subraya Jeff Hardy, que termina estos d¨ªas de trasladar la receta al videojuego. ¡°Mitad hombre. Mitad perro. Todo h¨¦roe¡±, reza el lema del personaje. Y todo un himno a la ternura, el entretenimiento, la bondad y la amistad, que Pilkey tambi¨¦n aplica a su vida, a trav¨¦s de varios proyectos ben¨¦ficos y donaciones.
Aunque desde su primer episodio el c¨®mic tambi¨¦n habla de muerte. La explosi¨®n de una bomba, en concreto, amenaza la vida del agente Caballero y su fiel amigo, Greg el perro. Ante las perspectivas nefastas, los cirujanos optan por una costura revolucionaria: la cabeza del can, sobre el cuerpo del polic¨ªa. De la operaci¨®n, surge una criatura extra?a. Un hito de la medicina y del c¨®mic. Y un gran recurso narrativo para Pilkey.
¡°Los ni?os adoran a Polic¨¢n tambi¨¦n porque todo el mundo le avisa constantemente de que no se le dan bien ciertas cosas, que no puede hacerlas. Esta obra te dice que no pasa nada por ser raro, ca¨®tico, torp¨®n o hiperactivo¡±, apunta Jen Wineman, directora y core¨®grafa del musical. No hay
donde el agente no l¨ªe unas cuantas trastadas. El jefe de la polic¨ªa est¨¢ m¨¢s que harto de que Polic¨¢n le salte encima para lamerle la cara y otros a¨²n no se acostumbran a que les huela el trasero. Al fin y al cabo, a Pilkey tampoco le entend¨ªan. Seguramente todos los ni?os del planeta se hayan sentido as¨ª alguna vez. Aunque una de las pocas cr¨ªticas a Polic¨¢n sostiene que solo representa a una mitad del mundo: pr¨¢cticamente todos los personajes principales son masculinos. En el musical, cambiaron el g¨¦nero de un par de protagonistas.
La representaci¨®n teatral tambi¨¦n se plantea como si fuera una creaci¨®n de los peque?os Jorge y Berto. Tanto que Wineman apost¨® por mezclar sus ganas de espectacularidad con la sensaci¨®n de que todo fuera casero, de la ropa a la escenograf¨ªa. Por lo visto, funciona: no tanto por la cr¨ªtica positiva de The New York Times, sino por los peque?os que acuden a la sala con sus propios disfraces, inspirados en los de la obra, seg¨²n la directora. ¡°Recib¨ª un correo de una mujer que llev¨® a su nieto de ocho a?os, que solo adora el deporte y nunca hab¨ªa estado en un teatro. Me cont¨® que en el coche de vuelta bailaba, dec¨ªa que era mejor d¨ªa de su vida y que quer¨ªa probar clases de teatro¡±, aun se entusiasma. Y agradece el apoyo y la colaboraci¨®n de Pilkey, igual que Hardy para su videojuego. La core¨®grafa dice que la compa?¨ªa, Theater Works, quer¨ªa adaptar Capit¨¢n Calzoncillos, pero el escritor concluy¨® que no hab¨ªa forma de representar a un hombre en bragas sobre un escenario infantil sin que resultara grosero. Su spin off, que entonces tan solo llevaba tres libros, apareci¨® como la soluci¨®n perfecta. Pilkey solo impuso una regla: Polic¨¢n no pod¨ªa soltar ninguna palabra, ni siquiera un mon¨®logo interior.
Por ¨¦l, hablan los hechos. Muchos analistas le atribuyen buena parte del m¨¦rito del auge del c¨®mic infantil, uno de los ¨¢mbitos m¨¢s pujantes del sector. En la portada de los primeros libros, SM inclu¨ªa: ¡°Del autor de Capit¨¢n Calzoncillos¡±. Pero dej¨® pronto de hacer falta. Y Bastida recuerda que hace unos a?os, en la feria de Fr¨¢ncfort, la principal del sector editorial, detectaron un bum de copias malogradas: ¡°Claramente le hab¨ªan dicho al autor: ¡®Haz algo tonto tipo Polic¨¢n¡¯. Pero esto no es nada tonto. Al rev¨¦s, tiene cierta genialidad¡±. A Pilkey le ve¨ªan distinto. Hoy se ha vuelto ¨²nico. Ya nadie le mandar¨ªa a dibujar al pasillo: es su historia la que imparte lecciones.
Babelia
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