La actriz alemana Hanna Schygulla avisa ante el ascenso de los ultras: ¡°La cat¨¢strofe se acerca¡±

En una Berlinale que regatea como puede los temas pol¨ªticos ¡ªy a¨²n as¨ª le salpican en la cara¡ª, atravesando las tormentas provocadas por la presidencia de Donald Trump y el conflicto israel¨ª-palestino, a¨²n faltaba que alg¨²n cineasta alem¨¢n hablara sobre la posibilidad de que, anuncian las encuestas, la agrupaci¨®n de ultraderecha Alternativa para Alemania (AfD) se convierta en la segunda fuerza m¨¢s votada en las elecciones federales que se celebrar¨¢n el pr¨®ximo domingo. Y, tras el temor mostrado por la actriz y directora germana Maria Schrader, que en la rueda de prensa de presentaci¨®n del jurado de la competici¨®n, del que que forma parte, se dedic¨® a regatear la cuesti¨®n, ha sido la veterana Hanna Schygulla la que se ha plantado hoy mi¨¦rcoles ante la prensa, y en un discurso de seis minutos ha desgranado una fuerte cr¨ªtica al nacionalismo y al partido de extrema derecha AfD.

Schygulla, a sus 81 a?os, ha apabullado con su elocuencia y su reflexi¨®n: ¡°Tenemos que dejar de una vez por todas esta cuesti¨®n nacionalista. Solo ha tra¨ªdo l¨¢grimas, guerras, personas que han sido abusadas. Todo esto ya no deber¨ªa estar en juego. Tenemos a las peores personas posibles a cargo del mundo, me siento bastante impotente, pero la vida es movimiento, puede que en alg¨²n momento se vayan¡±.

La alemana, la musa de Rainer Werner Fassbinder en t¨ªtulos como Las amargas l¨¢grimas de Petra Von Kant (1972) y El matrimonio de Maria Braun, con la que Schygulla gan¨® el Oso de Plata a la mejor actriz en la Berlinale de 1979, se?al¨® claramente a Alice Weidel, copresidenta de AfD: ¡°Escuch¨¦ [a Weidel] en la radio hoy, hablando de deshacerse de todos los extranjeros que est¨¢n trayendo violencia a nuestro pa¨ªs. C¨®mo se atreve. Hay mucha violencia [en otros lugares], mira los feminicidios en todos los pa¨ªses de Europa. No se puede hacer un gran alboroto por algunos extranjeros que se vuelven locos. Puedes si quieres utilizarlos, pero no est¨¢ bien¡±. Y continu¨®: ¡°Si nos remontamos lo suficiente en la historia de todos, todos somos mezclas de algo, de migraciones. La gente siempre ha estado en movimiento. No porque tengan alma gitana, sino porque hab¨ªa la necesidad de moverse¡±.

¡°Salgamos de esta identificaci¨®n nacional¡±, continu¨® la actriz. ¡°Nunca ha sido algo bendecido. Siempre ha tra¨ªdo miseria, problemas, guerras, alimentando las ilusiones de las personas que est¨¢n insatisfechas con su vida, que se convierten en parte de una naci¨®n gloriosa. Siempre ha sido mentira y manipulaci¨®n. Todos tenemos que estar preparados para hacerle frente. La cat¨¢strofe se acerca¡±.

La alemana record¨® que su madre le hablaba mucho de ¡°ese muy oscuro cap¨ªtulo de la historia de Alemania¡± provocado por los sentimientos nacionalistas. ¡°Estoy destrozada por el resurgimiento del nacionalismo en Alemania. Desafortunadamente, est¨¢ en todas partes; en Alemania todav¨ªa es algo relacionado con alguna cat¨¢strofe que no est¨¢ tan lejos [refiri¨¦ndose a la Segunda Guerra Mundial]¡±.

Hanna Schygulla naci¨® en mitad de aquella guerra y su madre le puso ese nombre por una amiga jud¨ªa fallecida durante el conflicto, pero le quit¨® la h final por miedo a los nazis. Por todo lo que vivido, la veterana actriz alemana se considera ¡°con derecho a opinar¡± sobre el auge de la ultraderecha. Su llamamiento fue recibido con aplausos por parte de la prensa, y eso le ¡°puso la carne de gallina¡±, confes¨®.

La alemana presentaba Yunan, de Ameer Fakher Eldin, sirio nacido en Ucrania y residente en Hamburgo, que estrena la segunda parte de una trilog¨ªa iniciada con The Stranger (2021). El cineasta apunt¨® que el tema de la identidad nacional surgi¨® en su primera conversaci¨®n con Schygulla. ¡°El hogar es cualquier lugar donde te sientas como en casa, o que te recuerde a casa. La primera vez que conoc¨ª a Hanna, ella me dijo: ¡®?Por qu¨¦ alguien no puede tener dos casas?¡¯. Esa es una pregunta realmente v¨¢lida¡±. Yunan est¨¢ protagonizada por el liban¨¦s Georges Khabbaz que da vida a un escritor ¨¢rabe exiliado que viaja de Hamburgo a una isla del Mar del Norte para suicidarse, aunque all¨ª conoce a una anciana (Schygulla) que cambia sus planes.