El sexo y las personas con diversidad funcional abren el debate en San Sebasti¨¢n
La asombrosa ¡®La consagraci¨®n de la primavera¡¯, de Fernando Franco, muestra una inquietante historia de par¨¢lisis f¨ªsicas y emocionales. Los chicos de la calle de la colombiana ¡®Los reyes del mundo¡¯ emocionan con su ¡°alma¡±
El director Fernando Franco tiene un talento singular para abordar personajes femeninos con trastornos infranqueables. En La herida (2013), su celebrado debut en la direcci¨®n, pon¨ªa la mirada en los impulsos autodestructivos de una conductora de ambulancias con trastorno l¨ªmite de la personalidad. Y ahora, en su nueva pel¨ªcula, la magn¨ªfica y muy perturbadora La consagraci¨®n de la primavera, una joven estudiante de qu¨ªmica, interpretada por otra de las sorpresas de este festival, Val¨¨ria Sorolla, se embarca en una relaci¨®n de amistad y, sobre todo, sexo con un joven con par¨¢lisis cerebral. La ambig¨¹edad de este personaje femenino atraviesa un filme en el que el sexo puede ser algo tan pautado como la f¨®rmula qu¨ªmica de una l¨¢grima.
Es un personaje tan extra?o e in¨¦dito que seguir sus pasos a lo largo de esta pel¨ªcula provoca un loco asombro: el trasfondo religioso de su educaci¨®n, el colegio mayor de monjas de Madrid en el que reside, las c¨®modas mentiras a su familia mallorquina, su relaci¨®n con sus amigas, con su ropa y con su cuerpo. Toda su complejidad est¨¢ perfectamente encajada en cada frase y en cada plano tambi¨¦n gracias a la explosiva ternura del personaje que interpreta Telmo Irureta desde su silla de ruedas o a esa madre-loba que borda Emma Su¨¢rez. Un filme muy valiente, depurado en sus interpretaciones y en su forma, que se atreve con un tema cuya verdadera fuente de incomodidad no est¨¢ en lo evidente. Esa inquietud queda reservada para cada espectador y para su abrupto desenlace.
La consagraci¨®n de la primavera muestra una realidad desconocida para la mayor¨ªa y casi intocada desde la pantalla: la vida sexual de las personas con diversidad funcional y la existencia de ¡°asistentes¡± sexuales que les permitan tener una vida lo m¨¢s plena posible. Pero tambi¨¦n plantea un debate sobre su representaci¨®n.
Estos mismos d¨ªas se ha presentado en San Sebasti¨¢n la serie de televisi¨®n F¨¢cil, de Anna R. Costa, inspirada en la novela Lectura f¨¢cil de Cristina Morales. Si la pol¨¦mica entre Morales y los autores de la serie no aporta nada nuevo a una larga tradici¨®n de escritores que, con mayor o menor elegancia, confunden sus limites contractuales al ver su obra reflejada en una pantalla, lo que s¨ª es pertinente debatir es si hoy en d¨ªa se puede hacer una serie sobre un grupo de mujeres con diversidad funcional con actrices que por muy buenas que sean, y en este caso lo son, se acaban metiendo en camisa de once varas. Quiz¨¢s esto es lo que m¨¢s puede chocar de una serie como F¨¢cil, una decisi¨®n de fondo que una pel¨ªcula como la de Fernando Franco se atreve a asumir, pero que seguramente est¨¢ lejos de ser plausible dentro de la mentalidad comercial de una plataforma televisiva.
Curiosamente, ayer otra pel¨ªcula, Los reyes del mundo, segundo filme de la colombiana Laura Mora, una de las m¨¢s duras y a la vez bonitas que se han pasado por el concurso, ten¨ªa entre sus personajes principales, cinco chicos de la calle de Medell¨ªn, a un joven con par¨¢lisis en su brazo, adem¨¢s de otras graves secuelas, que estuvo a punto de quedarse inv¨¢lido en un accidente de tr¨¢fico.
Es un personaje tocado por la m¨ªstica de un filme que habla de un asunto clave en Colombia: la herida del desplazamiento de miles de familias ind¨ªgenas de sus tierras por el conflicto armado. Aqu¨ª, unos chicos marginales deciden dejar la ciudad para volver a la tierra prometida de sus abuelos. Una road movie tan cruda como po¨¦tica cuyo imaginario viaja de las calles de Medell¨ªn, atravesadas por una dura violencia urbana, a la selva, al Bajo Cauca Antioque?o, donde los cinco descubrir¨¢n una nueva violencia pero tambi¨¦n la fuerza de su hermandad. La mirada de Laura Mora a estos chicos y a la arraigada violencia de su pa¨ªs resulta inusual y mucho m¨¢s poderosa que si fuera con r¨ªos de sangre. Rodada con un equipo formado en su mayor¨ªa por mujeres, quiz¨¢ todo se resume con la frase que uno de estos chicos excluidos dijo ayer al agradecer c¨®mo los hab¨ªan atendido y cuidado: ¡°Con esta pel¨ªcula aprend¨ª que la violencia y el mal no siempre son todo¡±.
Babelia
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