Fotos, marcas y el equilibrio entre publicidad y cultura en una revista de moda
Una reflexi¨®n sobre c¨®mo acreditar la procedencia de im¨¢genes y declaraciones
La revista femenina de EL PA?S, S Moda, public¨® el pasado martes una informaci¨®n acompa?ada de cuatro fotos de la actriz Mireia Oriol, protagonista de Soy Nevenka, con el mismo modelo de Chanel que luci¨® en el pase nocturno de esta pel¨ªcula en el festival de San Sebasti¨¢n. Este art¨ªculo, que luego ha sido corregido, incumpl¨ªa varias normas del Libro de Estilo de EL PA?S, que esta defensora ha decidido analizar de oficio para recordar el compromiso con los lectores de respetar este reglamento interno.
Embajadora de marca. La directora de la revista, Sof¨ªa Ruiz de Velasco, explica por qu¨¦ se hizo la pieza: ¡°En S Moda publicamos muchas veces temas sobre festivales, en los que actrices que son embajadoras de una marca nos cuentan, de la mano de esa firma, su atuendo, o sus trucos de maquillaje. En este caso, Chanel nos proporcionaba fotos en exclusiva de la actriz Mireia Oriol del fot¨®grafo Pablo S¨¢ez, con el que hemos trabajado en muchas ocasiones. Es un fot¨®grafo prestigioso y en el que confiamos como medio¡±.
Fotos cedidas. Mireia Oriol posa en todas las fotos con el mismo vestido de la colecci¨®n de alta costura primavera-verano 2024 de Chanel. No hay pegas acerca del inter¨¦s de estas im¨¢genes en una publicaci¨®n de moda, pero s¨ª sobre los pies de foto, que no aclaraban que las fotograf¨ªas no eran de EL PA?S, sino que las hab¨ªa distribuido la casa francesa. En la firma se indicaba: ¡°Pablo S¨¢ez para Chanel¡±.
Gorka Lejarcegi, redactor jefe de fotograf¨ªa de los suplementos, explica que esta f¨®rmula es la que emplea The New York Times cuando invita a un fot¨®grafo ajeno a su plantilla a colaborar en trabajos puntuales. Pero no es correcta en EL PA?S cuando, como ocurre aqu¨ª, no hay ninguna intervenci¨®n del peri¨®dico en la creaci¨®n. En estos casos, se usa otro enunciado que lo aclara mejor: ¡°Foto cedida por...¡± Los pies de foto fueron corregidos con esta cita el mismo d¨ªa de la publicaci¨®n.
Revisi¨®n de im¨¢genes. La regla general para las fotograf¨ªas que establece el Libro de Estilo es la siguiente: ¡°Las im¨¢genes obtenidas no se pueden manipular, salvo para mejoras t¨¦cnicas y para preservar la identidad de las personas¡±. La comprobaci¨®n en las fotos externas deber¨ªa ser rutinaria, pero Lejarcegi admite que no hizo ning¨²n tipo de revisi¨®n previa de las im¨¢genes proporcionadas por Chanel para verificar si hab¨ªan sido manipuladas. Y ello pese a que tanto ¨¦l como la directora de S Moda reconocen que es lo habitual en las fotos de moda que llegan de fuera del peri¨®dico.
EL PA?S se impuso una norma estricta en contra de las im¨¢genes retocadas, pero ha relajado su cumplimiento en las de moda. Es comprensible el inter¨¦s de algunas de ellas, incluso retocadas, para una publicaci¨®n como S Moda. Por eso, sugiero que al menos se avise a los lectores y se incorpore en el Libro de Estilo la pr¨¢ctica que en Francia es ley desde 2017, recogida en el Decreto Photoshop. Este obliga a los peri¨®dicos y revistas de aquel pa¨ªs a alertar de que se ha modificado digitalmente el f¨ªsico de las modelos con el aviso: ¡°Fotograf¨ªa retocada¡±.
Presentaci¨®n falsa. El subt¨ªtulo fue redactado de forma que da a entender que S Moda estuvo con la actriz en el festival de San Sebasti¨¢n: ¡°De la mano de Chanel, acompa?amos a la actriz...¡±. Y tambi¨¦n: ¡°Nos colamos entre bambalinas¡±. Sin embargo, las declaraciones de Mireia Oriol proceden de las respuestas a un cuestionario intercambiado por correo electr¨®nico. Nadie de S Moda estuvo con ella en persona, solo el fot¨®grafo, que como se ha visto no pertenece a EL PA?S.
Esto es lo que dice el Libro de Estilo: ¡°Salvo en situaciones muy excepcionales, el peri¨®dico no realiza entrevistas con cuestionarios previos. Y, en este caso, se advertir¨¢ al lector¡±. La raz¨®n de esta regla es que el periodista pueda avalar que los entrecomillados son del entrevistado y no han sido escritos por un gabinete de prensa y, sobre todo, que pueda repreguntar. El texto fue corregido para a?adir que la actriz solo hab¨ªa hablado por correo electr¨®nico.
Sin firma. El manual de uso del peri¨®dico establece que ¡°lo ideal¡± es que todos los contenidos vayan firmados por su autor, para ¡°dar fe de lo que publica¡±. Pero tambi¨¦n recoge varias excepciones, como que la informaci¨®n ¡°no sea atribuible a ninguna persona concreta¡±. La periodista que redact¨® el texto consider¨® que ese era el caso, dado que se hab¨ªa limitado a transcribir un cuestionario elaborado por otra compa?era, sin aportar nada de su cosecha.
Marcas. Sin embargo, la ausencia de una firma y la presencia destacada de una marca abr¨ªan la duda de que fuera un publirreportaje sin identificar. La directora de S Moda lo niega tajantemente y recuerda que muchas veces el acceso a las personalidades del entretenimiento y la cultura depende de las marcas (plataformas, distribuidoras, productoras, editoriales); sin olvidar, a?ade, que estas son tambi¨¦n contenido, puesto que la moda tiene una vertiente comercial y a la vez es una manifestaci¨®n cultural. Se trata de encontrar el justo equilibrio. ¡°Chanel forma parte de nuestro ecosistema informativo, es una de las marcas m¨¢s prestigiosas de moda y es un contenido para una revista como la nuestra¡±, afirma. ¡°En estos casos, nuestro criterio es period¨ªstico¡±.
Conclusi¨®n. No hay duda tras las explicaciones del inter¨¦s informativo, pero fall¨® la ejecuci¨®n de la pieza. Los errores apreciados afectan a cuestiones muy b¨¢sicas que cualquier redactor de EL PA?S deber¨ªa tener interiorizadas. Lo m¨¢s grave fue dar la apariencia de trabajo period¨ªstico cuando apenas hab¨ªa esfuerzo de creaci¨®n.
Para contactar con la defensora puede escribir un correo electr¨®nico a defensora@elpais.es o enviar por WhatsApp un audio de hasta un minuto de duraci¨®n al n¨²mero +34 649 362 138 (este tel¨¦fono no atiende llamadas).
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