Epopeya griega
La selecci¨®n griega aprovecha el exceso de confianza de Estados Unidos y se clasifica para la final (101- 95)
La batalla de David contra Goliat ha respetado el final de la historia y la invencible selecci¨®n americana ha perecido en su intento de recuperar la gloria perdida tras el ¨²ltimo Mundial y los ¨²ltimos Juegos Ol¨ªmpicos. Grecia es la justa finalista del Mundial de Jap¨®n al imponerse por 101 - 95 al combinado de la NBA.
La f¨®rmula no era tan complicada. Un equipo que en ataque s¨®lo tiene a sus individualidades, y que, si el f¨ªsico le falla, se encuentra a merced de su rival. Y Grecia no es un rival cualquiera. Los helenos supieron aprovechar las carencias del en¨¦simo dream team con un gran juego colectivo en ataque y con una defensa en zona que la tozudez estadounidense no supo superar.
El partido comenz¨® con el gui¨®n esperado. Lebron y compa?¨ªa se colocaron pronto en el marcador y consiguieron una ventaja de seis puntos al final del primer cuarto. Los europeos estaban atenazados. Necesitaban perderle el miedo, que no el respeto, al f¨ªsico del rival. La circulaci¨®n del bal¨®n no exist¨ªa, y las opciones de tiro claras pr¨¢cticamente nulas. Los estadounidenses iban cimentando su ventaja a golpe de mates y una presi¨®n endiablada en defensa. Los m¨¢s pesimistas ya pens¨¢bamos en una paliza hist¨®rica.
Pero todo cambi¨® en el segundo cuarto. Los griegos maniataron el ataque de su rival con una fuerte defensa y una capacidad ofensiva letal. Un parcial de 0-9 a favor de los jugadores entrenados por Panagiotis Giannakis puso arriba en el marcador a los griegos por primera vez en el partido. Las caras de los americanos en el banquillo cuando se lleg¨® al descanso era un poema. Es lo que tiene ser mejor y no saber aprovecharlo.
El tercer cuarto fue un mazazo para los americanos. La afrenta europea comenzaba a alcanzar niveles insospechados. La ventaja llegaba a ser de doce puntos, pero los griegos no consegu¨ªan escaparse definitivamente en el marcador. El rebote defensivo y la aportaci¨®n de Schortsianitis debajo del aro, y de Diamantidis y Spanoulis desde el per¨ªmetro estaban hundiendo a los NBA. El tercer cuarto finaliz¨® con doce puntos de ventaja para Grecia, y con lo visto sobre la cancha una cosa estaba clara. El partido estaba en manos de Grecia. Estados Unidos no ganar¨ªa el partido, en todo caso lo perder¨ªan los helenos.
En el ¨²ltimo cuarto los americanos se limitaron a aprovechar los fallos en la defensa griega. A falta de dos minutos la ventaja de los europeos era de cinco puntos, y Schortsianitis falla dos tiros libres. De todos lo rincones comienzan a escucharse los peores augurios. Ya ten¨ªamos un final de partido de los que hacen ¨¦poca. Grecia no decepcion¨®. Spanoulis se encarg¨® de poner la diferencia en ocho puntos. De nuevo a falta de 24 segundos la ventaja es de cuatro puntos, y Grecia comete falta por cinco segundos en el saque de fondo. De nuevo parec¨ªa que los USA se iban a levantar en el momento menos esperado. Pero estos no son Jordan y compa?¨ªa, y Chris Paul regal¨® el bal¨®n a los griegos. El final de partido americano era un desprop¨®sito. De ah¨ª al final estaba todo hecho. Los helenos s¨®lo tuvieron que encestar los tiros libres y el coloso americano estaba fuera del Mundial.
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