Espa?a desperdicia una nueva oportunidad para estar en Pek¨ªn
El combinado de voleibol cae ante Serbia, pero todav¨ªa dispone de una ¨²ltima opci¨®n en los preol¨ªmpicos de mayo
La selecci¨®n espa?ola de voleibol desperdici¨® una nueva oportunidad de clasificarse para los Juegos de Pek¨ªn al perder en una ag¨®nica final ante Serbia (2-3), en un partido que hab¨ªa comenzado dominando por 2-0. A partir de ahora, al sue?o ol¨ªmpico espa?ol s¨®lo le queda una opci¨®n: ganar uno de los preol¨ªmpicos mundiales que se disputar¨¢n en mayo.
En la ciudad turca de Esmirna el equipo espa?ol tuvo en su mano el pasaporte pero se confi¨® en exceso ante un adversario curtido en finales internacionales. A un conjunto como el serbio, con un bronce (Atlanta''96) y un oro ol¨ªmpicos (Sydney 2000) en su haber, dejarle la m¨¢s m¨ªnima opci¨®n de resucitar supone un suicidio. Y eso fue lo que le sucedi¨® a Espa?a.
En las dos primeras mangas, el juego espa?ol fue impecable. Concentraci¨®n m¨¢xima y m¨ªnimos fallos fueron sus mejores cartas. Serbia, no obstante, plant¨® cara durante un primer set con ¨ªnfimas ventajas a favor de uno y otro. En la recta final, con un inspirado Molt¨® en bloqueo y la solvencia del opuesto Guillermo Falasca, Espa?a logr¨® adelantarse (24-22).
Los serbios a¨²n lograron salvar dos balones de set, pero una nueva acci¨®n del menor de los hermanos Falasca y un error de Ivan Miljkovic dieron el triunfo a Espa?a 26-24. El segundo parcial fue un paseo triunfal de los espa?oles que llegaron a humillar a sus adversarios (20-8). Las piezas claves del engranaje balc¨¢nico, el colocador Nikola Gbric y el opuesto Miljkovic, desaparecieron. El primero incluso tuvo que ser sustituido, y el opuesto encaden¨® fallo tras fallo.
Con una renta de dos sets a cero, Espa?a parec¨ªa tener cerca su objetivo. Sin embargo, cay¨® en la trampa que le tendi¨® su rival y poco a poco su juego fue diluy¨¦ndose hasta quedar completamente anulado en las dos mangas siguientes (19-25 y 15-25). Los serbios, grandes maestros en salir de apuros semejantes, comenzaron a imponer su juego y, sobre todo, apostaron por un saque cada vez m¨¢s duro para anular la recepci¨®n espa?ola. En el desenlace, Espa?a resurgi¨® por momentos y mantuvo las esperanzas intactas hasta el final (14-14). Miljkovic, el terrible, acab¨® con las esperanzas ol¨ªmpicas espa?olas, al menos, hasta mayo.
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