Pellegrini est¨¢ en la mira

El entrenador del Arsenal, Ars¨¨ne Wenger, celebr¨® en los ¨²ltimos cinco a?os diversas entrevistas con Florentino P¨¦rez y con Ram¨®n Calder¨®n. Los presidentes del Madrid acudieron a pedirle que se hiciera cargo del banquillo. Pero siempre chocaron contra un muro. En una ocasi¨®n, el franc¨¦s despidi¨® a sus interlocutores con un argumento cortante. "El Madrid", les dijo; "es un club grande de puertas para afuera, pero de puertas adentro se comporta como un club muy peque?ito".

Wenger, que aprecia demasiado el poder que acumula en el Arsenal, imagin¨® situaciones como la que experimenta en estos d¨ªas Manuel Pellegrini. El chileno es el hombre que contrat¨® Florentino P¨¦rez despu¨¦s de la ¨²ltima negativa de Wenger, en junio. Cuatro meses despu¨¦s de su entrada en Chamart¨ªn, y sin que le hayan permitido elegir ning¨²n fichaje ni decidir ninguna baja, la junta directiva madridista observa al t¨¦cnico chileno como al principal responsable de una cadena de errores que han descompuesto al equipo. La goleada (4-0) recibida por el Alcorc¨®n , que juega en Segunda B, ha dado argumentos a Florentino P¨¦rez para pensar en un relevo. En el entorno del presidente aseguran que Pellegrini afronta una semana decisiva. Dicen que debe ganarle al Getafe el s¨¢bado y, sobre todo, al Milan, el pr¨®ximo martes en Liga de Campeones. De lo contrario, el mi¨¦rcoles que viene Florentino P¨¦rez empezar¨¢ a buscar un nuevo entrenador. A Pellegrini nadie le ha comunicado que su cargo est¨¢ pendiente de un ultim¨¢tum. No es necesario. ?l lo sospecha.

Desde que sali¨® a defender la permanencia de Sneijder y Robben en el club, Pellegrini sabe que su presidente le ha declarado en la oposici¨®n. Le da igual. Defender a Sneijder era lo ¨²nico que pod¨ªa hacer, en vista de que la plantilla que le confeccionaron carec¨ªa de los centrocampistas que reclam¨®: Silva y Cazorla.

Pellegrini empieza a comprender lo que Wenger supo desde el principio. Esto es, que el Madrid no es un club de f¨²tbol de gesti¨®n herm¨¦tica, como la mayor¨ªa de los clubes brit¨¢nicos. Parte de su especial grandeza consiste en eso. La relaci¨®n simbi¨®tica entre la opini¨®n p¨²blica, la directiva y la plantilla, es constante. Esa relaci¨®n alimenta tendencias que conspiran contra los t¨¦cnicos sin talento pol¨ªtico, como Pellegrini. Al rev¨¦s de la directiva, que, como es tradici¨®n, ha establecido lazos con el entorno social del club, Pellegrini se siente ajeno al ambiente madridista. El hombre no es como Del Bosque, o como Capello, proclive a tender puentes m¨¢s all¨¢ de los l¨ªmites institucionales. Pellegrini posee un car¨¢cter introvertido y prefiere vivir entre el vestuario y el hotel. Su tendencia natural lo empuja hacia universos alejados del deporte. S¨®lo se comunica con Jorge Valdano, el director general, y su gran respaldo. Ni siquiera sus entrenamientos son p¨²blicos. Patrocinado por Ra¨²l, el capit¨¢n, el club ha mantenido el cierre de las cesiones de entrenamiento. No se sabe para qui¨¦n ?adem¨¢s de Ra¨²l? es bueno este aislamiento. Para Schuster fue nocivo. Para Juande tambi¨¦n. A Pellegrini lo est¨¢ perjudicando. Su discurso resulta cada d¨ªa m¨¢s protocolario, m¨¢s lejano y menos veraz.

Como dijo una fuente del club pr¨®xima al vestuario: "A Pellegrini le est¨¢ costando m¨¢s de la cuenta entrar en el funcionamiento de lo que es el Madrid".

En el Villarreal, Pellegrini inspiraba respeto entre los jugadores porque lo reconoc¨ªan como un ejecutivo con capacidad para alterar la plantilla. Todos tuvieron muy presente de que fue capaz de expulsar a Riquelme del club a pesar de que era la principal figura. En el vestuario del Madrid, la posici¨®n de Pellegrini es d¨¦bil. Los jugadores dicen que le aprecian, pero no le temen. Al menos hasta ayer, los futbolistas respetaron la autoridad del entrenador a pesar de que nunca lo vieron como un hombre con poder dentro del club. La noticia de que Florentino P¨¦rez no lo escucha ni para contratar ni para decidir las bajas no afect¨® a su cr¨¦dito, al menos en apariencia. Pero en los ¨²ltimos d¨ªas se ha propagado la sensaci¨®n de que el presidente considera que Pellegrini no es el hombre adecuado para el puesto. Ante esto, en el Madrid temen que la sinton¨ªa que ha existido entre los futbolistas y el entrenador se rompa. "?Resistir¨¢ estos resultados?", se preguntan.

Tres derrotas, un empate y una victoria en los ¨²ltimos cinco partidos son una dura prueba de resistencia. En Alcorc¨®n, los s¨ªntomas no fueron buenos. La plantilla filtr¨® que detesta las concentraciones impuestas por el t¨¦cnico y Guti, el segundo capit¨¢n, se enfrent¨® a ¨¦l en el vestuario en el descanso de Alcorc¨®n. Precisamente Guti, uno de los jugadores que Pellegrini m¨¢s apoy¨®, se comport¨® de tal manera que desgast¨® la imagen del t¨¦cnico.

Salvo accidente, Pellegrini caminar¨¢ por la cuerda floja lo que le quede de temporada. Entretanto, Florentino P¨¦rez se hace las grandes preguntas: ?A qui¨¦n fichar en su lugar? ?Y qu¨¦ hacer con Valdano?

Rumiando su plan de acci¨®n acudi¨® el presidente a Alicante ayer para dar una conferencia. El modelo de gesti¨®n del Real Madrid, seg¨²n informa Santiago Navarro. "Si tenemos prisa nos pondremos nerviosos", dijo. "Yo debo abstraerme de la pasi¨®n deportiva y dejar trabajar a los profesionales de cada parcela. Por muy humillante que sea el resultado, que lo fue, necesitamos tranquilidad" (...) Estamos trabajando en un proyecto que de momento no est¨¢ a la altura que queremos": han llegado ocho fichajes nuevos y tambi¨¦n hemos tenido lesiones. Hace falta tiempo y rodaje para redondearlo todo".

Florentino admite que la derrota fue "humillante"

Copa del Rey. Dieciseisavos (ida) Alcorc¨®n 4-R. Madrid 0