Salgado propulsa al Bizkaia BB

Hab¨ªa cautela con la muchachada del equipo alem¨¢n. Y se not¨® en el primer cuarto al que el Bizkaia BB acudi¨® bajo un cierto adormecimiento. As¨ª, consinti¨® una ventaja que m¨¢s que decisoria en el marcador (cinco puntos abajo) alimentaba la autoestima de un equipo que part¨ªa como la pera en dulce y se le hab¨ªa atragantado tanto al Panellinios (con quien perdi¨® con dignidad) y al Benetton, al que gan¨® con sorpresa.

Y entonces surgi¨® Javi Salgado para cambiar el biorritmo del partido y de su equipo. Y su efecto fue tan contagioso que, de pronto, todos comenzaron a jugar bien. Algunos hab¨ªan apuntado maneras: Banic y Warren, sobre todo. Pero la electricidad del base bilba¨ªno recarg¨® las pilas de un equipo que, de nuevo, pudo contar con la mejor versi¨®n defensiva de Moiso y la entrega impagable de tipos tan bragados como Mumbr¨². Fue cambiar el ritmo y dominar el rebote y el Brose alem¨¢n se deshizo como un hielo en el agua. Ante Moiso y compa?¨ªa, los jugadores del equipo alem¨¢n parec¨ªan estar cazando moscas cada vez que el aro o el tablero devolv¨ªan el bal¨®n. Y un equipo sin rebote est¨¢ condenado a un porcentaje de acierto en el tiro que el Brose dista mucho de poseer.

La electricidad de Javi Salgado recarg¨® las pilas del equipo y todos jugaron mejor

En un santiam¨¦n cerr¨® el Bizkaia el partido con un segundo cuarto estruendoso (6-21) que dej¨® la moral de su oponente por los suelos. Jacobsen, el ex del Caja Laboral, su tirador con pedigr¨ª, se enzarz¨® en batallas personales que le dieron menos puntos de los que su calidad exige y, a cambio, Warren, Banic & c¨ªa iban machacando la canasta rival como un martillo imperturbable. El Brose viv¨ªa de Brown: uno contra el mundo.

Era autopropulsi¨®n pura. La de un equipo que parece haber recuperado la autoestima, el primer trabajo de su t¨¦cnico Katsikaris: convencer a la plantilla de que eran mucho mejores de lo que estaban siendo hasta ahora. La asignatura se va aprobando, m¨¢s a¨²n cuando en el descanso el Bizkaia se sab¨ªa con la tercera victoria consecutiva en la Eurocopa que pr¨¢cticamente le clasifica para los cuartos de final, paso previo a la final four de Vitoria.

Tan c¨®modo fue todo, comiendo de la mano de Salgado, que incluso el t¨¦cnico griego pudo dar minutos a todo su plantel, incluidos los menos utilizados, Paco V¨¢zquez y Seibutis, y el joven Hampl que hab¨ªa viajado con el equipo. M¨¢s c¨®modo de lo previsto, m¨¢s f¨¢cil de lo esperado, m¨¢s goloso de lo que se antojaba ante un rival que naci¨® crecido pero se empeque?eci¨® por culpa de un base chiquit¨ªn, puro talento.