Siniestro total
Mar¨ªa Jos¨¦ Rienda se despide con una desastrosa primera manga del gigante
Siniestro total. Ni asomo de milagro. Mar¨ªa Jos¨¦ Rienda se despidi¨® como una principiante. Cualquier atisbo de esperanza sobre su actuaci¨®n termin¨® a los pocos segundos de la primera bajada del eslalon gigante. La esquiadora granadina estuvo desastrosa y acab¨® a m¨¢s de seis de la austriaca Elizabeth Goergl que hab¨ªa marcado el primer tiempo. Fue ¨²ltima largo rato y sufri¨® la humillaci¨®n de ser superada por esquiadoras de nivel muy discreto.
A falta de la segunda manga, que se debi¨® aplazar a hoy por la niebla que cay¨® sin remedio sobre la pista de Whistler, se fue al puesto 45?, indigno para la categor¨ªa que tuvo. Incluso la superaron Carolina Ruiz, que fue 35?, y la debutante Andrea Jardi, 42?.
Lindsey Vonn, a su nivel, tambi¨¦n sigui¨® tirando su reinado por los suelos y estuvo varios minutos tendida en la nieve tras una ca¨ªda en la que se rompi¨® una falange del dedo me?ique de la mano derecha. Los caos ya repetidos de la organizaci¨®n llegaron al colmo cuando permitieron la salida de la campeona ol¨ªmpica en Tur¨ªn, Julia Mancuso, que bajaba con el dorsal siguiente. Vonn a¨²n estaba por la pista y Mancuso debi¨® pararse y repetir la bajada. Pero ya descentrada acab¨® cediendo segundo y medio que dif¨ªcilmente va a poder recuperar ya.
No hab¨ªa buena visibilidad, pero era para todas. Mar¨ªa Jos¨¦ cometi¨® ya muchos errores en la parte alta de la pista, en la que cedi¨® casi un segundo a Goergl. Era el principio del fin. En el segundo tramo fueron ya dos segundos perdidos, cuatro en el tercero y seis al final. Como un perfecto reloj atrasado. Se fue parando y ofreci¨® una imagen pobr¨ªsima.
Claramente le ha faltado preparaci¨®n, pero el problema es que sus rodillas quiz¨¢ ya no le respondan nunca a alto nivel. No tuvo disculpa aunque se consol¨® con su eterno optimismo de que estaba contenta por haber sido sus quintos Juegos, e incluso que espera recuperarse m¨¢s para despedirse en los Mundiales de Garmisch (Alemania), el a?o que viene.
La cosa ya pint¨® mal cuando su amiga la italiana Denise Karbon, que se ha estado entrenando con ella como muchas otras veces, perdi¨® m¨¢s de tres segundos respecto al mejor tiempo. Acab¨® siendo 30?. pero, al menos, no pas¨® el mal trago de ser superada por esquiadoras muy modestas. Se clasificaron 68, 17 no terminaron y una fue descalificada. Rienda s¨®lo super¨® a 23 que hicieron a¨²n peor tiempo y a 41 del total que salieron. Pero ni siquiera cont¨¢ndolas a todas se clasific¨® por encima de la mitad. Una enorme decepci¨®n.
"Hay que dejar paso a los j¨®venes para Sotchi" (la ciudad rusa a orillas del mar Negro donde ser¨¢n los siguientes Juegos), dijo. Una obviedad tras el batacazo. Los que criticaron su presencia, acertaron. La federaci¨®n y su compromiso con la ¨²nica inversi¨®n que le ha sido rentable en muchos a?os, se volvi¨® a equivocar. Pero era una jugada muy arriesgada y las cr¨ªticas en caso de no haberla dejado participar, a¨²n mayores. El esqu¨ª espa?ol contin¨²a en la desaz¨®n de su indigencia.
Vonn, en una prueba que no le va casi y en la que apenas hab¨ªa tenido presencia en la temporada, empez¨® muy bien con el dorsal 17, e incluso rebaj¨® los mejores tiempos de Goegrl, con 15, 16 y 35 cent¨¦simas. Pero pasada la zona media, en un giro a derechas perdi¨® la l¨ªnea y se fue contra la barrera de protecci¨®n. Fue atendida en el mismo sitio donde qued¨® y aunque dolorida en la mano derecha termin¨® la bajada esquiando. Tras fastidiar sin quererlo a su compatriota Mancuso a la que tambi¨¦n pidi¨® perd¨®n.
Pero tal vez una ca¨ªda as¨ª, arriesgando, hubiera sido un final m¨¢s heroico para Mar¨ªa Jos¨¦, que hoy tratar¨¢ de maquillar ese horroroso puesto 45?.
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