Victoria de oro

Lo que son las cosas. Hace una semana, el Madrid tonte¨® con el fracaso y necesit¨® de una portentosa actuaci¨®n de Llull, su hombre milagro, para sobrevivir. Ahora puede presumir de ser el primer equipo de su grupo que logra vencer fuera de su ambiente. El premio, la clasificaci¨®n. Enorme bot¨ªn para un partido de dif¨ªcil explicaci¨®n, sobre todo en lo que se refiere a los movimientos decididos por los dos entrenadores, con menci¨®n especial para el t¨¦cnico del Efes, Ergin Ataman, que pareci¨® hacer todo lo posible para que el Madrid saliese victorioso. Muchas de sus decisiones fueron en contra del sentido com¨²n y terminaron saldadas con ventajas para el equipo blanco. Dej¨® que Rakocevic, que no est¨¢ para casi nada, hiciese de su capa un sayo con resultado nefasto para los turcos. Mantuvo en el ostracismo a Santiago hasta el ¨²ltimo cuarto y, tras cinco minutos donde caus¨® estragos, le retir¨® de nuevo. Lo mismo se puede decir de Nachbar. , todo un talento y que para cualquier mortal merecer¨ªa una atenci¨®n por parte de su entrenador y compa?eros que no tiene.Todo un desprop¨®sito que unido a un car¨¢cter volc¨¢nico no ayud¨® mucho a su ya bastante err¨¢tico equipo.

El Madrid hizo una primera parte de partido excelente, sobre todo en el segundo cuarto. Apoyado en el mejor Garbajosa de los ¨²ltimos meses y la confianza con la que est¨¢ tirando Llull, el Madrid se aprovech¨® del uno contra todos que emprendi¨® Rakocevic en cuanto pis¨® la cancha por primera vez y puso tierra por medio (25-37, m. 25). Durante unos minutos todo le sali¨® bien. Con Felipe, Jaric y Prigioni completando el quinteto, el Madrid recuper¨®la fluidez de los primeros compases de la temporada. y el Efes no encontraba forma de parar la sangr¨ªa provocada.Hasta la mala cabeza de Kasun jugaba a favor, pues despu¨¦s de confirmar que el Madrid las pasa canutas en cuanto tiene un pivot cualificado delante, ¨¦l mismo se inmol¨® con problemas de faltas personales evitables.

El segundo cuarto termin¨® a lo grande, con un dos contra dos de Prigioni-Felipe que resolvi¨® el pivot metiendo canasta m¨¢s adicional (29-44). Pero en el descanso Messina decidi¨® que ese quinteto que se hab¨ªa mostrado tan resolutivo y compacto hab¨ªa que tocarlo y quit¨® a Felipe y a Llull para meter a Bullock y Tomic. El Madrid perdi¨® el golpe de pedal que llevaba y el entrenador del Efes dio por una vez en el clavo. Puso en pista a Ermal Kugo que elev¨® la dureza de la defensa hasta extremos ilegales pero que provoc¨® un cambio de tendencia. Los 15 puntos de ventaja se fueron esfumando hasta convertir el partido en algo discutible (56-60 a cinco minutos del final). Jaric clav¨® un triple que dio mucha tranquilidad y Ataman sigui¨® con sus err¨¢ticas decisiones. Total, que entre una cosa y otra el Madrid encontr¨® lo que buscaba. El jueves que viene tiene otro objetivo: ganar al Maccabi, ser primero de grupo y eludir al Bar?a.