El agridulce regreso de De la Rosa
El piloto de Sauber, que vuelve a las carreras tres a?os despu¨¦s, no consigue terminar el GP de Bahrein por un problema hidr¨¢ulico
No fue f¨¢cil el regreso de Pedro Mart¨ªnez de la Rosa a la competici¨®n. El piloto de Sauber, ausente de la competici¨®n desde octubre de 2006 pero no oxidado por la inactividad, no pudo terminar el gran premio de Bahrein por problemas hidr¨¢ulicos en su monoplaza. El lugar donde capitaliz¨® su llegada a McLaren-Mercedes como piloto probador (en sustituci¨®n del lesionado Juan Pablo Montoya en abril de 2005 logr¨® la cuarta posici¨®n y la vuelta r¨¢pida) seguir¨¢ como un buen recuerdo, pero nada m¨¢s. Su posici¨®n en la parrilla no le permite luchar con los grandes en la pista, pero s¨ª disfrutar en la parte media. As¨ª lo hac¨ªa, cuando recibi¨® un mensaje que dilapid¨® cualquier opci¨®n de optar a los puntos. "Ten¨ªa todav¨ªa una oportunidad, pero en la vuelta 29 me han llamado para entrar a boxes". Todo hab¨ªa acabado. Hoy, pese a la buena pretemporada realizada en Jerez y Barcelona, la mec¨¢nica no estuvo de su lado.
"Son cosas de las carreras", ha declarado De la Rosa, resignado tras el percance. Desde el inicio, el gran premio ha sido una continua sucesi¨®n de incidentes. La humareda que levant¨® el Red Bull de Mark Webber anul¨® la visi¨®n de la mitad de la parrilla y convirti¨® el arranque en una loter¨ªa. El espa?ol mantuvo su decimocuarta posici¨®n, pero la niebla provoc¨® el primer accidente de Chandhok y los primeros problemas para De la Rosa. "Cuando hemos salido del primer ¨¢ngulo, he visto humo blanco, trozos de coche y he tenido que cortar por la chicane. He tenido que salirme del trazado para no chocar con otros monoplazas, y en el c¨¦sped he perdido aceleraci¨®n y entonces algunos coches me han pasado. Cuando he llegado a la curva n¨²mero cuatro hab¨ªa perdido varias posiciones. Si no lo hubiera hecho, hubiera acabado la carrera mucho antes".
Pese al percance, De la Rosa segu¨ªa en carrera. Tocaba disfrutar, y cuidar los neum¨¢ticos. El catal¨¢n hizo ambas cosas. Su estilo al volante del Sauber permit¨ªa rodar sin que las gomas, una de las claves de la temporada, se resintieran demasiado. Segu¨ªa corriendo, luchando por los puntos. Mantuvo un bonito duelo con Robert Kubica (Renault), pero a falta de 20 vueltas ocurrieron "cosas de las carreras".
A la orden de su ingeniero, Pedro De la Rosa regres¨® a su garaje. Ten¨ªa ganas de seguir, pero la decisi¨®n estaba tomada. Antes que ¨¦l, Kamui Kobayashi, su compa?ero de filas, se retiraba tambi¨¦n por problemas mec¨¢nicos. En 15 d¨ªas tendr¨¢ otra oportunidad, en Melbourne, ocho a?os despu¨¦s. Esta vez no ha logrado repetir la gesta de 2005, pero, a diferencia de aquel a?o, ¨¦ste correr¨¢ todos los grandes premios.
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