Iker, Ronaldo, 30 metros

Los seguidores de 19 equipos de nuestra Primera Divisi¨®n ya saben lo que se siente. Y hoy ser¨¢ el debut de los restantes, muchos, amplios, importantes, todos ellos (y nosotros) con el coraz¨®n en un pu?o, cuando el ¨¢rbitro ha tenido la ocurrencia de pitar una falta a 30 metros de la porter¨ªa de Iker. No cometer¨¦ el error de considerar a Portugal como Cristiano y 10 m¨¢s, nunca, ya que sabemos que Portugal suma al valor individual del 7 con mucho talento colectivo, de ese que viene tan bien en estas competiciones cortas y exigentes. No quiero pensar en el partidocomo aquella vieja ecuaci¨®n futbol¨ªstica que dec¨ªa que conviene eliminar al mejor jugador rival con el peor jugador tuyo, de tal forma, que queden mis 10 mejores contra sus 10 peores jugadores. Creo mucho m¨¢s en el valor colectivo de este juego de asociaci¨®n de tal forma que entiendo que la suma de nuestros talentos va a ser superior a la acumulaci¨®n de los suyos... y luego, un ratito para pedir que no tengamos mala suerte. Ya saben eso que hace que un bal¨®n que entra no sea concedido, que el ¨¢rbitro vea fuera de juego donde hab¨ªa un metro de margen, todo aquello que queda expuesto a esa hermosa condici¨®n de humanos que la disfrutan todos, repito, todos, los que se dan cita en el Green Point de Ciudad del Cabo.

Cierto es que todo es dif¨ªcil en estos partidos, cierto es que cuesta moverse en estos entornos tan vigilados que son los estadios en sus grandes competiciones, cierto es que como les contaba hace un a?o, justo cuando el Bar?a se med¨ªa al Manchester United en la final de la Champions, lo verdaderamente dif¨ªcil es situarse ah¨ª, a 30 metros de uno de los m¨¢s excelsos chutadores que en este momento hay en el mundo para medirse por medio de ese artefacto infernal que es el Jabulani. Di que esta vez a las dudas de Iker se suman las de Cristiano. Y all¨ª se ven, frente a frente, quien ha sido la esperanza de todo portero ante cualquier partido cerrado, vamos, ese a quien Casillas ha visto como la esperanza para abrir un encuentro de esos en los que ves demasiado los ojos de tus propios defensas y ese a quien Cristiano se ha encomendado cuando, desde su posici¨®n de delantero, lo ha visto todo perdido y solo le quedaba rezar a Iker para que realizara uno de sus milagros.

Y para Iker la experiencia de recibir el pelotazo de Cristiano, as¨ª, con toda su comba, con toda la imprecisi¨®n que el bal¨®n del Mundial da a cada acci¨®n defensiva, fue algo que, seguro, nunca olvidar¨¢, que, por supuesto, le permitir¨¢ una broma cuando se vuelvan a encontrar en pretemporada, ya que hoy no es el d¨ªa para muchas bromas, despu¨¦s de un encuentro tan disputado, tan re?ido, tan ajustado. Tanto que hasta el gol ha llegado en una jugada metida con calzador en medio de la defensa portuguesa y en la que, hoy y sin que sirva de precedente, le concedemos al asistente argentino, la posibilidad de mirar la l¨ªnea del fuera de juego con la generosidad que favorece al f¨²tbol atacante.

El martes la selecci¨®n celebraba su segundo aniversario tras la victoria en la Eurocopa. Ayer era el momento de poner la cuarta piedra en la escalera, no de ganar un partido, sino de la escalera que lleva al Mundial. Ante la falta de motivos para la felicidad, celebremos alguna peque?a alegr¨ªa que nos llega desde Ciudad del Cabo.

Espa?a 1 - Portugal 0