Klose tiene goles para todos
El delantero de Alemania, desaparecido este curso en el Bayern, suma 12 dianas en los Mundiales y ya apunta hacia la selecci¨®n de Argentina
Miroslav Klose entr¨® el pasado domingo en un selecto club, el de m¨¢ximos goleadores de los Mundiales. La compa?¨ªa no es mala; iguala a Pel¨¦ (12 dianas) y persigue al franc¨¦s Just Fontaine (13), a su compatriota Gerd M¨¹ller (14) y al brasile?o Ronaldo (15). Si un mes antes, alguien le hubiera dicho que esto le iba a ocurrir, probablemente hubiera pasado de largo pensando que se trataba de un comentario c¨ªnico m¨¢s de la prensa o de los aficionados. Pero Klose, en el minuto 20 del duelo frente a Inglaterra, firm¨® su gol n¨²mero 50 con la camiseta alemana, su tanto n¨²mero 12 en un Mundial. El s¨¢bado se mide en los cuartos de final contra Argentina.
Su inclusi¨®n en equipo alem¨¢n ha sido una de las decisiones m¨¢s pol¨¦micas y que m¨¢s comentarios airados ha suscitado en la prensa germana. El m¨¢ximo goleador del Mundial de Alemania (5 tantos) ven¨ªa de completar su peor temporada en el Bayern de M¨²nich, relegado al banquillo por Van Gaal y degradado a ser recambio del delantero suplente, su compa?ero en la selecci¨®n, Mario G¨®mez. Hasta el punto de que Klose solo ha marcado tres goles en la Bundesliga de este a?o. Ni siquiera se enton¨® en los amistosos previos a Sud¨¢frica, por m¨¢s que el t¨¦cnico Joachim L?w le alineara siempre de titular. Contra Argentina (perdieron 0-1), contra Hungr¨ªa (ganaron 3-0) y contra Bosnia (vencieron 3-1), fue invisible. Sin Klose, y con G¨®mez y Cacau en el campo, el juego de Alemania ganaba en dinamismo. Entonces, ?por qu¨¦ lo manten¨ªa el seleccionador en el once inicial?
Klose solo ha marcado tres goles en la Bundesliga de este a?o, pero ya lleva dos tantos en este Mundial
Logr¨® el gol del empate en cuartos de final del Mundial de 2006, en los ¨²ltimos minutos del encuentro. Uno de esos tantos providenciales en los que conf¨ªa L?w
L?w ide¨® un entrenamiento espec¨ªfico y personalizado con un solo objetivo, que el atacante estuviera listo para el primer partido del Mundial
L?w es un hombre de ideas fijas y le gusta Klose. Conf¨ªa en ¨¦l. Aprecia la capacidad del delantero para combinar con sus compa?eros abriendo espacios, su juego a¨¦reo y su talento innato para marcar goles cruciales en los momentos clave. Como el que anot¨® a Rusia, decisivo para la clasificaci¨®n de Alemania para este Mundial. Por eso decidi¨® llev¨¢rselo a Sud¨¢frica.
Sin embargo, Klose no lleg¨® en su mejor forma f¨ªsica ni en su mejor estado de ¨¢nimo a la concentraci¨®n. El delantero del Bayern el lac¨®nico pero su lenguaje corporal habla por ¨¦l. Su aspecto general era let¨¢rgico. L?w ide¨® un entrenamiento espec¨ªfico y personalizado con un solo objetivo, que el atacante estuviera listo para el primer partido del Mundial. Klose no tuvo ning¨²n d¨ªa de descanso y dobl¨® los entrenamientos. Para mejorar su autoestima, potenci¨® el aspecto l¨²dico de los entrenamientos, para que Klose se sintiera c¨®modo en un grupo en el que era el ¨²nico que no hab¨ªa jugado con su equipo en la temporada regular.
Klose est¨¢ por venir
Por eso, cuando tras la nula actuaci¨®n de Klose en el partido contra Bosnia, un periodista le pregunt¨® a L?w si confirmaba que el delantero hab¨ªa pasado a la historia de la Mannschaft. El t¨¦cnico, habitualmente sereno ante la prensa, torci¨® el gesto y tras dejar claro que en su sistema 4-2-3-1 no cab¨ªa un cambio en la delantera, dijo: "Miroslav Klose est¨¢ por venir".
No se equivocaba. Pese a la confianza del seleccionador en el delantero, seguro que ni siquiera ¨¦l hubiera apostado por el giro tan sorprendente que ha dado durante el Mundial. El gol de cabeza contra Australia le liber¨® de toda la tensi¨®n. Su expulsi¨®n por doble amarilla contra Serbia, reaviv¨® el escepticismo de los m¨¢s pesimistas. Pero no inquiet¨® a Klose, seguro con el apoyo brindado en todo momento por su t¨¦cnico. El tanto contra Inglaterra le ha colocado en la historia de los goleadores de los Mundiales, emparej¨¢ndolo con Pel¨¦. Ahora cree que todo es posible, como la victoria del s¨¢bado ante Argentina. No en vano, el delantero tiene una relaci¨®n especial con el equipo de Maradona. ?l logr¨® el gol del empate en cuartos de final del Mundial de 2006, en los ¨²ltimos minutos del encuentro. Uno de esos tantos providenciales en los que conf¨ªa L?w. La tanda de penaltis dio la victoria a Alemania.
Klose, que disputar¨¢ su partido n¨²mero 100 ante Argentina, es el futbolista con m¨¢s experiencia de su selecci¨®n, a la que defiende desde la Eurocopa de 1996. No est¨¢ en la misma forma que en 2006, cuando marc¨® 25 goles en 26 partidos de la Bundesliga y se coron¨® m¨¢ximo goleador del Mundial. Pero ha recuperado la alegr¨ªa en su juego. Con un Klose infalible, Alemania siempre ha llegado casi hasta el final del camino de un Mundial; fueron finalistas en 2002 -anot¨® otros cinco goles- y terceros en 2006.
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