"Paraguay muri¨® de pie"
Los paraguayos est¨¢n orgullosos de su selecci¨®n, creen que han jugado con todo el coraz¨®n
Los paraguayos est¨¢n apenados, tristes, pero su desconsuelo no tiene nada que ver con la amargura de sus vecinos, los argentinos. Los dos equipos han abandonado el Mundial el mismo d¨ªa y en la misma fase, pero para los paraguayos "Paraguay muri¨® de pie", como titulaba la web de uno de los principales diarios de Asunci¨®n, orgullosa de haber perdido por un solo gol con Espa?a, mientras que los argentinos se sienten humillados por la paliza que les dio Alemania. Ese sentimiento de orgullo define muy bien el estado de ¨¢nimo de Paraguay. Las calles de la capital segu¨ªan llenas de gente, vigiladas por un gran despliegue policial, dos horas despu¨¦s de finalizado el partido, y si bien no se o¨ªa la m¨²sica o los petardos que atronaron d¨ªas anteriores, tampoco se sent¨ªa la gran depresi¨®n que se huele en la piel de los argentinos. Los paraguayos est¨¢n orgullosos de su selecci¨®n, creen que han jugado con todo el coraz¨®n, que estuvieron a punto de lograr el pase a las semifinales, y no se lamentan de nada. Para ellos, los jugadores son aut¨¦nticos h¨¦roes, como proclamaba a voz en grito una radio local.
"Lo que tienen que hacer los argentinos es llevarse al Tata Martino como seleccionador suyo, por mucho que lo vayamos a sentir los paraguayos", bromeaba a la salida del Estadio Defensores del Chaco, uno de los miles de aficionados que sigui¨® el partido a trav¨¦s de una pantalla gigante. Gerardo Martino, que es argentino, es casi un dios en Paraguay, que le agradece el cambio que le ha dado al seleccionado nacional. "El es quien les da dado esa confianza y car¨¢cter", aseguraba uno de los agentes de polic¨ªa que vigil¨® el estadio.
"Garra, desgaste, sudor y orgullo", un joven hincha de la selecci¨®n define as¨ª el partido contra Espa?a. "La selecci¨®n no dej¨® jugar a Espa?a. Cualquiera de los dos pudo ganar", asegura. Y es cierto que la albirroja fue todav¨ªa m¨¢s inc¨®moda de lo que hab¨ªa sido hasta ahora en sus otros partidos internacionales. "El partido fue una haza?a, con los penaltis fallados y la tensi¨®n hasta el ¨²ltimo minuto. Mereci¨® la pena", mantiene Juan, que afirma ser m¨²sico y que lleva de la mano a dos desconsolados ni?os vestidos con la camiseta. "No lloren, carajo. ?No vieron la fiereza de los jugadores?".
La ciudad se va calmando, aunque los polic¨ªas contin¨²an patrullando de tres en tres por las esquinas de los barrios m¨¢s conflictivos. "No har¨¢ falta", mantiene una joven madre de familia, que se acaba de quitar la camiseta de la selecci¨®n. "Los jugadores nos han hecho hoy un regalo y uno no recibe los regalos con malos modos, ?no?". "Adem¨¢s, estamos en buena compa?¨ªa. Vamos juntos con Brasil y Argentina", bromea. El "Vamos Sudam¨¦rica" que ha sonado estos d¨ªas en diferentes ciudades de diferentes pa¨ªses se tiene que confiar ahora a la selecci¨®n uruguaya. Jos¨¦ "Pepe" Mujica esta tan contento que se le salen las l¨¢grimas. "No se puede decir con palabras lo que siento", confesaba ayer, humilde, a un periodista local, casi tan emocionado como su viejo presidente. "Vamos ahora con Uruguay", se despide un peque?o grupo de paraguayos a la puerta del estadio Defensores del Chaco.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.