Delicioso Villarreal

Pues s¨ª, detr¨¢s de esas dos locomotoras llamadas Barcelona y Real Madrid, hay alguien. Una delicia de equipo que triangula, combina y se mueve como los ¨¢ngeles. Ha aprendido, adem¨¢s, a ser contundente atr¨¢s gracias a la intimidaci¨®n de Marchena y a la voracidad recuperadora de Bruno. De modo que el Villarreal le aguanta el pulso a los grandes despu¨¦s de derribar a un Atl¨¦tico insuficiente. No le bast¨® con el arranque de Ag¨¹ero ni le beneficiaron las protestas de Quique, expulsado tras reclamar un penalti de Gonzalo al Kun. El Villarreal impuso su t¨¦cnica y El Madrigal acab¨® coreando los infinitos pases de su equipo. Cazorla, a su vez, firm¨® otra actuaci¨®n deslumbrante.

Nilmar le rompi¨® los esquemas a Quique Flores en una cabalgada fulgurante. Una exhalaci¨®n que parti¨® desde el centro del campo, condujo delicadamente el bal¨®n hasta la frontal y se lo cedi¨® entre una nube de defensores a Cani, que marc¨® con un toque cruzado. El delantero brasile?o est¨¢ en un estado de forma espectacular, espoleado por su entrenador, Juan Carlos Garrido, que le inst¨® en verano a mejorar sus prestaciones respecto a la campa?a pasada. Le sobran facultades: veloz, h¨¢bil y muy vertical, su regate de espuela, con la izquierda, a Perea, levant¨® un suspiro de admiraci¨®n en El Madrigal.

El Atl¨¦tico hab¨ªa salido valiente, presionando muy arriba y, en los dos minutos iniciales, Ag¨¹ero ya se hab¨ªa fabricado dos ocasiones de gol. Fin¨ªsimo con el bal¨®n y sin ¨¦l, el Kun se dispon¨ªa a darse un fest¨ªn, pero a?or¨® la compa?¨ªa en la primera parte de Forl¨¢n: Diego Costa, m¨¢s all¨¢ de chocar contra tirios y troyanos, fue irrelevante. Ag¨¹ero se choc¨® con la respuesta de un Marchena sin resquicios. Siempre socorrido por un Bruno inmenso tanto en la recuperaci¨®n como en el inicio de la construcci¨®n del Villarreal. Tras la doble llamada de Del Bosque y aunque todav¨ªa no haya debutado en la selecci¨®n, el mediocentro de Artana ha dado un salto muy notable, perdiendo la timidez anterior y asumiendo unos galones cada vez m¨¢s puestos desde que Senna, con los achaques de los 34 a?os, vaya cedi¨¦ndole el paso.

El partido estuvo en ebullici¨®n, con fases excelentes del juego interior del Villarreal y otras amenazantes de un Atl¨¦tico ambicioso. Cazorla dio una lecci¨®n de pase, toque y desmarque en un rondo interminable con sus compa?eros. Y el Atl¨¦tico se fue al descanso cargando contra el ¨¢rbitro, que pit¨® el final de la primera parte una mil¨¦sima de segundo antes de que Gonzalo derribara a Ag¨¹ero tras un rechace del portero a tiro de God¨ªn. Los rojiblancos se comieron al ¨¢rbitro camino del vestuario mientras Quique Flores trataba de calmarlos, para a continuaci¨®n calentarle tambi¨¦n la oreja a Ram¨ªrez Dom¨ªnguez.

El Atl¨¦tico baj¨® el ritmo en la segunda parte y el Villarreal fingi¨® que tambi¨¦n lo bajaba. En realidad, estaba esperando para golpear. Otra vez Cani, en esta ocasi¨®n con un excelente pase en profundidad a Rossi. Lo mejor¨® el norteamericano con sus caracoleos a pocos metros del ¨¢rea peque?a, burlando a tres defensas antes de marcar junto al palo. Mientras Cazorla se recreaba regateando en una baldosa, a pocos metros Escrib¨¤, el segundo de Quique, preparaba la entrada de Tiago y Forl¨¢n, en una acci¨®n desesperada por volver al partido. El Atl¨¦tico recuper¨® ef¨ªmeramente la pelota, por la pausa de Tiago y la electricidad de Forl¨¢n. Pero la cita segu¨ªa en los pies de Bruno, cuyo nombre son¨® coreado por El Madrigal, tras su en¨¦simo bal¨®n recuperado. Marchena cerr¨® las puertas de Diego L¨®pez y el Villarreal se recre¨® en una propuesta est¨¦tica s¨®lo al alcance de los m¨¢s grandes.

Villareal 2 - Atl¨¦tico 0