Lotina se salva a bal¨®n parado

Marc¨® Lopo y se fue directo a abrazar a Lotina, tras ¨¦l m¨¢s de medio equipo achuch¨® al t¨¦cnico, cuya continuidad fiaba su propio presidente a los resultados. Gan¨® con suficiencia y justicia el Deportivo y lo hizo gracias a la estrategia, detalle que adem¨¢s refuerza la figura del entrenador.

La clasificaci¨®n, el fr¨ªo de sus profundidades, ha invitado al Deportivo a echarse al monte y olvidar no tan lejanas intenciones futboleras. Lotina tiene buen diente, pero se ha dado cuenta de que para seguir en su puesto y mantener la categor¨ªa lo mismo tiene que darle al salchich¨®n que a la mortadela.

Y se ha armado con una zaga de tres centrales, un entramado que propicia que el equipo recule hacia su ¨¢rea y en los repliegues conforme una l¨ªnea de cinco y otra de cuatro. Es la b¨²squeda de la seguridad por acumulaci¨®n. Lo que ocurra de ah¨ª hacia adelante no tiene que ver con la casualidad, pero no deja de ser epis¨®dico. Tampoco es nada novedoso porque con el anterior sistema tampoco es que el Deportivo fuera un torrente ofensivo.

M¨¢s lejos de la porter¨ªa rival, pero tambi¨¦n m¨¢s prietas las l¨ªneas, el equipo local jug¨® como un visitante, le dio la pelota al Espanyol y cuando la recuper¨® prescindi¨® de los mediocentros para buscar la sorpresa mediante balones profundos, m¨¢s bien pelotazos. Lleg¨® al gol gracias a la estrategia, explotada con fe. Un primer saque de esquina lo remat¨® Riki junto al palo, el siguiente lo tocaron hasta tres jugadores del Deportivo antes de que Adri¨¢n empujara a la red y mostrara que su rendimiento crece cuanto irrumpe en el ¨¢rea, no cuando trabaja en ella.

El primer gol acab¨® de descolocar al Espanyol, tan bien intencionado como inocuo. A veces da la impresi¨®n de que los equipos juegan como se lo dicta su clasificaci¨®n. El equipo catal¨¢n, uno m¨¢s del numeroso pelot¨®n que debe mirar hacia abajo, se present¨® en Riazor en puestos europeos, sin mayores urgencias.

Hasta el descanso no se apur¨®, luego cuando quiso hacerlo se encontr¨® con que el tanto de Adri¨¢n hab¨ªa dibujado el escenario que precisaba el D¨¦por, siempre c¨®modo a la contra, pero sin la presi¨®n de un marcador desfavorable. Sentenciaron los centrales, lo que tambi¨¦n ofrece pistas, pero al menos con el viento a favor los pelotazos se convirtieron en pases, el sudor del fr¨ªo del colista en sonrisa victoriosa y la presumible destituci¨®n de Lotina en una pr¨®rroga que augura sudor, esfuerzo y no excesivo f¨²tbol.

Deportivo 3 - Espanyol 0