Soldado est¨¢ en vena
El Valencia encuentra a su delantero ante un Almer¨ªa sin secuelas
A partir de una alineaci¨®n reconocible, la misma que liquid¨® el mi¨¦rcoles al Bursaspor, el Valencia explot¨® la veta goleadora de Soldado. El delantero va mostrando nuevos recursos cada jornada. El de inventarse un gol de la nada fue el primer tanto de la noche; el segundo, completar el maravilloso pase de Mata. Aunque le falt¨® pegada, el Almer¨ªa plant¨® cara, sin secuelas de la paliza recibida la semana anterior ante el Bar?a.
Soldado invent¨® un nuevo autopase, con la coronilla, para desequilibrar un partido m¨¢s igualado de lo previsible. El gol vino precedido de un mal centro de Bruno desde la derecha. Soldado hubo de correr hasta amortiguarlo con la parte trasera de la cabeza. Se dio r¨¢pidamente la vuelta y toc¨® el bal¨®n con el pecho, con la rodilla y dispar¨® a gol: cuatro toques para domar el esf¨¦rico y sortear a tres defensas y al portero. Diego Alves, desde la l¨ªnea de gol, volvi¨® a parar remates dificil¨ªsimos.
Valencia 2 - Almer¨ªa 1
Valencia: Guaita, Bruno, Maduro, Ricardo Costa, Jordi Alba, Joaqu¨ªn, Albelda, Ricardo Costa (Banega, m.82), Mata (Vicente, m.66), Soldado (Dom¨ªnguez, m.78) y Aduriz.
Almer¨ªa: Diego Alves, Juanma Ortiz, Marcelo Silva, Carlos Garc¨ªa, Jacokbsen, Bernardello, Mo (Valeri, m.77), Uche, Corona (Ulloa, m.60), Piatti y Goitom (Ortiz, m.70).
Goles: 1-0, m.26: Soldado. 2-0,m.63: Soldado. 2-1,m.90: Ulloa.
?rbitro: Turienzo ?lvarez (Colegio castellano-leon¨¦s). Amonest¨® por el Almer¨ªa a Juanma Ortiz, Marcelo Silva, y Piatti y por el Valencia a Bruno y Ricardo Costa.
Incidencias: partido disputado en el campo de Mestalla ante 35.000 espectadores. Terreno de juego en regulares condiciones. Ambos equipos apoyaron la candidatura ib¨¦rica para acoger la Copa del Mundo de f¨²tbol de 2018 y 2022.
La pose tranquila de Oltra se traslad¨® al Almer¨ªa, que jug¨® con serenidad, convencido de que iba a tener sus opciones. Las tuvo sobre todo a partir del desborde en el extremo derecho de Uche. Claro que su par, Jordi Alba, se incorpor¨® tambi¨¦n al ataque con un gran sentido de la profundidad, formando con Mata una fuente continua de centros al ¨¢rea. Tambi¨¦n brill¨® Joaqu¨ªn por la otra orilla, sacando lustre de ese regate tan natural y exuberante a la vez que lanz¨® su carrera. El Almer¨ªa jug¨® con intensidad en el centro del campo y logr¨® incomodar a los mediocampistas de Emery, sin que hubiera un hilo de juego por parte de ninguno de los dos equipos, empeorado por un ¨¢rbitro aficionado a pitarlo todo.
Oltra busc¨® m¨¢s p¨®lvora con Ulloa, pero se encontr¨® con la potente luz irradiada por la mente de Mata. Ven¨ªa el centro de Aduriz desde la derecha y Mata, en vez de rematarlo en el primer palo, lo prolong¨® de espuela hacia el segundo, donde sab¨ªa que esperaba Soldado. Entr¨® Banega, el p¨²blico le record¨® la juerga que lo apart¨® del equipo y Ulloa, de un cabezazo, dio esperanzas a Oltra para rescatar al Almer¨ªa.
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