Vidas cruzadas en la saga de los Emery

Puede que los regates m¨¢s inesperados del f¨²tbol los ofrezca su propia historia. Y cuando se trata de legados, pocas sagas como la de los Emery. Uno de ellos, Juan, dicen que un guardameta adelantado a su ¨¦poca por su propensi¨®n a jugar lejos de los palos, contribuy¨® a un ascenso del Deportivo; otro, Unai Emery, t¨¦cnico del Valencia, hijo de Juan, puede, casi medio siglo despu¨¦s, propiciar su descenso.

Unai fue el cuarto Emery en jugar en Primera Divisi¨®n. Apenas lo hizo en cinco ocasiones con la Real Sociedad, equipo en el que se forj¨® y del que sali¨® para emprender una an¨®nima carrera en Segunda Divisi¨®n con el Toledo, el Racing de Ferrol, el Legan¨¦s y el Lorca. Zurdo, fino, fr¨ªo, cerebral, con cierto recorrido y buen disparo, Unai recogi¨® el testigo de su padre, de su t¨ªo-abuelo Rom¨¢n y de su abuelo Antonio, el meta que encaj¨® el primer gol de la Liga espa?ola el 19 de febrero de 1929. Le llamaban Pajarito, un ferroviario hijo de un franc¨¦s que acab¨® afinc¨¢ndose en Ir¨²n y que sell¨® una estimable campa?a como pilar del m¨ªtico Real Uni¨®n, que jug¨® cuatro temporadas en Primera Divisi¨®n y que fue dos veces campe¨®n de Copa.

Juan Emery desafi¨® a su f¨ªsico para seguir el camino de su padre bajo palos. Apenas superaba el metro y setenta, pero hizo carrera casi hasta los 40 a?os en el Real Uni¨®n, el Alav¨¦s, el Burgos, el Logro?¨¦s, el Deportivo, el Sporting, el Recreativo, el Granada y el Ja¨¦n. En A Coru?a estuvo tres a?os que recuerda con cari?o: "Ya entonces se viv¨ªa el f¨²tbol con mucha intensidad en la ciudad". Fueron a?os, de 1959 a 1962, que coincidieron con la eclosi¨®n de Amancio Amaro, que acab¨® en el Real Madrid en un traspaso que contribuy¨® a frustrar la continuidad de Emery en el club porque el genial extremo coru?¨¦s visti¨® la camiseta blanca a cambio de 10 millones de pesetas y la llegada a A Coru?a de cuatro futbolistas, entre ellos el meta Betancort. Emery se fue sin poder jugar con el Deportivo en Primera, pero tras haber contribuido a que ascendiera. Casi medio siglo despu¨¦s no desea que pierda ese estatus. "No quiero que baje, pero si lo hace no ser¨¢ por culpa de Unai. ?l es una persona recta y har¨¢ su papel, aunque el Valencia tenga el tercer puesto garantizado y el equipo puede que no tenga una motivaci¨®n especial en el partido. Har¨¢ lo correcto", se?ala.