Zarco amenaza el dominio de Terol

Nico Terol no necesita a nadie que le baje los humos, porque nunca despeg¨® los pies del suelo. Sin embargo, y por si acaso, el franc¨¦s Johann Zarco, a quien todav¨ªa se le resiste la victoria en la categor¨ªa peque?a, pero que se sit¨²a en la segunda posici¨®n de la general impulsado por su regularidad y buen hacer sobre la pista, trata de recordarle cada fin de semana que ¨¦l est¨¢ ah¨ª, expectante, por si el chico de Alcoy no tiene un buen d¨ªa. Y en su intento por atemorizar al l¨ªder de 125cc, Zarco se apunt¨® la pole este s¨¢bado, la segunda del a?o, al cerrar una ¨²ltima vuelta tres d¨¦cimas m¨¢s r¨¢pido que la estrella del equipo Aspar. Terol, adem¨¢s, aunque saldr¨¢ desde la primera fila, lo har¨¢ desde la tercera posici¨®n, pues su crono tambi¨¦n fue mejorado por el de su compa?ero de equipo, H¨¦ctor Faubel.

"Los rivales est¨¢n muy fuertes. No puedo despistarme un segundo", insiste el valenciano cada vez que alguien le recuerda el dominio que ejerce en la pista desde que empez¨® el campeonato. Este fin de semana, por ejemplo, y ya no es algo raro cada gran premio, Terol ha dominado la tabla de tiempos en los tres entrenamientos libres previos a la sesi¨®n de clasificaci¨®n. Pero, aunque pueda parecerlo, no compite solo. Y hasta un imberbe como Maverick Vi?ales es capaz de discutirle sobre el asfalto la trazada buena, sin preocuparse por si estorba m¨¢s o menos la vuelta del principal aspirante al t¨ªtulo. No es m¨¢s que una an¨¦cdota, pero fue deliciosa aquella batalla, en la ¨²ltima tanda de la sesi¨®n, con ambos pilotos peleando la posici¨®n como si estuvieran en un domingo de carreras. Ambos salieron perdiendo, claro, porque aquella lucha les hizo perder segundos, no ganarlos.

Por otro lado, Faubel, muy lejos en la clasificaci¨®n, pero un veterano y ganador de la carrera de Alemania, parece mucho m¨¢s c¨®modo en Misano, donde ha cambiado a su jefe de mec¨¢nicos. No se entend¨ªan. Y no lo hac¨ªan porque, b¨¢sicamente, no flu¨ªa la informaci¨®n entre ambos, hasta el punto de que el hombre en el que m¨¢s debe confiar el piloto, que era Daniele Cecchini, pues de ¨¦l depende la configuraci¨®n de la moto incorporaba cambios sin el conocimiento de Faubel. El equipo Aspar le advirti¨®, pero tras evidenciar que no hab¨ªa mejoras, cedi¨® a las peticiones de su piloto, que ahora trabaja con Enrique Quij¨¢n. "Con el Piula -as¨ª conocen todos a Quij¨¢n- va todo mejor. Ahora estoy mucho m¨¢s c¨®modo. Con buen rollo siempre se trabaja mejor".