Marquitos, el pe¨®n defensivo de las cinco Copas de Europa
Padre y abuelo de futbolistas, conquist¨® los primeros t¨ªtulos continentales blancos bajo el liderazgo del ¡®rey¡¯ Di St¨¦fano
El martes falleci¨® a los 78 a?os de edad en Santander, ciudad que le vio nacer el 16 de abril de 1933, Marcos Alonso Imaz, Marquitos, defensa legendario del Real Madrid que conquist¨® las primeras cinco Copas de Europa bajo el liderazgo de Alfredo di St¨¦fano. Internacional en dos ocasiones, Marquitos lleg¨® al club de Chamart¨ªn en 1954, procedente del Racing de Santander. ¡°Me fich¨® Bernab¨¦u tras un partido de Copa. Era la primera temporada de Gento en el Madrid. Le cac¨¦ y me echaron, pero el gordo [Bernab¨¦u] dijo: ¡®fichen a ese¡±. Zaguero contundente y de excepcionales cualidades f¨ªsicas ¡ªjug¨® de defensa derecho, aunque tampoco se sent¨ªa inc¨®modo como central¡ª, su fuerte car¨¢cter y su atrevimiento salieron muy pronto a relucir. Como no disputa el primer partido de Liga frente al Valencia (1-2), al d¨ªa siguiente se person¨® en las oficinas del club para pedir la baja, que no le fue concedida: ¡°Yo no vine al Real Madrid a ver caballos. Llegu¨¦ para jugar al f¨²tbol. Por eso, el primer d¨ªa que no me sacaron dije que me volv¨ªa¡±. Dos partidos marcaron su carrera de forma definitiva. En la primera final de la Copa de Europa (4-3) frente al Stade Reims logra el tanto que supone el empate a tres. Un gol corajudo en un rechace que ya moldeaba la negaci¨®n inquebrantable ante la derrota que define la identidad madridista: ¡°Arranqu¨¦ de atr¨¢s. Pas¨¦ el bal¨®n a Di St¨¦fano y este me lo devolvi¨®. Entonces se lo di a Marsal, que chut¨® a puerta. Rechaz¨® el portero franc¨¦s y, finalmente, remat¨¦ sin que ninguno de los franceses pudiera impedir el tanto. ?Qu¨¦ alegr¨®n me llev¨¦!¡±.
Su otro gran momento sobre la hierba tambi¨¦n tiene como escenario la gran competici¨®n europea de clubes. El 25 de abril de 1957 el Madrid visita en semifinales al gran Manchester United de los Busby Babes que, meses despu¨¦s, sufrir¨ªa la tragedia de M¨²nich. En la ida, los blancos se hab¨ªan impuesto 3-1 y la figura de Marquitos fue decisiva en Old Trafford (2-2) para aguantar el chaparr¨®n de los Charlton, Edwars, Whelan, Pegg y Tommy Taylor. Sobre este ¨²ltimo, realiza un marcaje que le vale el reconocimiento de la prensa brit¨¢nica como el mejor defensa de Europa.
Marquitos entendi¨® y asumi¨® sin complejos su rol secundario en un equipo de leyenda: ¡°Yo era un pe¨®n que trabajaba al lado de reinas y reyes. As¨ª era m¨¢s f¨¢cil. Todos sab¨ªamos cu¨¢l era nuestra misi¨®n. Lo m¨ªo era defender, luchar, hacer lo que me mandaban, por eso triunf¨¦ y estuve tantos a?os en el Real Madrid¡±. Sinti¨® una gran admiraci¨®n por Di St¨¦fano, al que no dudaba en se?alar como el futbolista total: ¡°A m¨ª me ense?¨® a defender Di St¨¦fano. ?l nos lo ense?¨® todo a los dem¨¢s. Era una estrella y corr¨ªa m¨¢s que nadie. Era el rey. En los cabarets y en el campo. Donde fuera¡±.
En el Real Madrid (228 partido y tres goles), adem¨¢s de las cinco coronas europeas, conquist¨® cinco Ligas, una Copa de Espa?a, dos Copas Intercontinentales y dos Copas Latinas.
Con 30 a?os, abandon¨® el club blanco para jugar en el H¨¦rcules, Murcia y Calvo Sotelo: ¡°He ganado m¨¢s dinero en el Murcia que ganando Copas de Europa¡±, no se recataba en confesar. Ya semirretirado, sus ¨²ltimos coletazos los dio en el Toluca, un equipo de barrio de Santander donde juega junto a otros exmadridistas como Vicente, Atienza, Mateos y Pach¨ªn. Estaba orgulloso de su tierra monta?esa, de la que sol¨ªa decir, para ponerla en primera l¨ªnea: ¡°Entre Gento y yo, Cantabria ha ganado 11 Copas de Europa¡±.
Colgadas las botas, la saga de los Alonso continu¨® con su hijo, Marcos Alonso, que se form¨® en las categor¨ªas inferiores del Real Madrid, aunque triunf¨® en el Racing, en el Barcelona y en el Atl¨¦tico. No vio debutar a su v¨¢stago de blanco, pero s¨ª a su nieto, tambi¨¦n de nombre Marcos, lateral izquierdo, actualmente en las filas del Bolton Wanderers. Casualidades del f¨²tbol, fue frente al Racing de Santander el 4 de abril de 2010. De su nieto hablaba con devoci¨®n en las tertulias que manten¨ªa en la cafeter¨ªa del hotel Chiqui de Santander, el lugar donde le gustaba departir tras dar sus paseos por la playa de El Sardinero.
No fue solo un futbolista de ¨¦xito, ya que como empresario tambi¨¦n triunf¨® al abrir una zapater¨ªa en la madrile?a calle de Serrano. Aprovech¨® su nombre para garantizar fiabilidad al calzado que vend¨ªa. Bajo la firma de Marquitos, miles de madrile?os han dejado sus huellas en la ciudad. ?l la dej¨® en los campos de f¨²tbol como uno de los grandes defensas de la historia.
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