Resaca en Minnesota sin Ricky Rubio

La luz se apag¨® para los Wolves el pasado 9 de marzo, cuando faltaban 16 segundos para el final del partido ante los Lakers y Ricky Rubio se lesion¨® en un encontronazo contra Kobe Bryant. En un prolijo e interesante art¨ªculo publicado en Grantland, una popular web de Estados Unidos, se llega a comparar, por supuesto metaf¨®ricamente, la conmoci¨®n y los lamentos provocados en Minnesota por la lesi¨®n del diamante de los Wolves con el estado de conmoci¨®n que produjo la muerte del legendario torero Manolete en Espa?a, en agosto de 1946.

La desmesurada hip¨¦rbole, ayuda, sin embargo, a comprender el enorme abatimiento de una afici¨®n que por fin estaba disfrutando tras muchas temporadas soportando el mal juego y las derrotas constantes, concretamente desde el curso 2005-2006, antes incluso de que Kevin Garnett abandonara el equipo para irse a los Celtics, en julio de 2007, a cambio de Al Jeffersonh, Theo Ratliff, Gerald Green, Sebastian Telfair, Ryan Gomes y dos primeras rondas del draft.

Decisiones err¨®neas

La franquicia no acert¨® en casi ninguna de sus grandes decisiones. En 2006, por ejemplo, seleccion¨® a Brandon Roy en la sexta posici¨®n del draft, pero lo traspas¨® a Portland a cambio de Randy Foye. Con entrenadores como Randy Wittman, Kevin McHale y Kurt Rambis y con Al Jefferson como m¨¢ximo ca?onero, los Wolves fueron de mal en peor. Incluso cuando eligieron a Ricky Rubio en el draft, los m¨¢s viejos del lugar empezaron a temerse lo peor porque su incorporaci¨®n se pospuso dos temporadas y porque las noticias que llegaron sobre su rendimiento en su ¨²ltimo a?o en el Barcelona no eran halag¨¹e?as.

La irrupci¨®n de Ricky en la NBA, sin embargo, fue volc¨¢nica. Su juego y su chispa recuperaron la autoestima y el entusiasmo de los seguidores, que agotaron los abonos del Target Center de Minneapolis, atra¨ªdos por la pareja formada por Kevin Love y Ricky, por los esquemas del nuevo entrenador Rick Adelman y por las buenas sensaciones que desprend¨ªa un equipo que, solo unos meses antes hab¨ªa sido el peor de la NBA con 17 triunfos en 82 partidos.

Todo iba sobre ruedas. Hasta entonces, hasta que aqu¨¦l fat¨ªdico 9 de marzo Ricky se rompi¨® los ligamentos en el topetazo on Kobe Bryant, la temporada del equipo de Minneapolis hab¨ªa sido brillante, esperanzadora, la mejor desde el final de la era de Garnett. Los Wolves hab¨ªan logrado colocarse en una buena posici¨®n en vistas a lograr la clasificaci¨®n para disputar los playoffs.

Adi¨®s a la magia

La grave lesi¨®n de Ricky, que no le permitir¨¢ volver a jugar probablemente hasta octubre, se ha dejado notar, much¨ªsimo, m¨¢s incluso de lo que se pod¨ªa presumir. No solo ha desaparecido la magia que aportaba el base espa?ol. Los resultados han empeorado de manera evidente. Hasta entonces, los Wolves hab¨ªan ganado 21 partidos y hab¨ªan perdido 20. Desde entonces, suman solo 4 victorias y 12 derrotas.

De las posiciones de playoffs -se clasifican los ocho primeros de cada Conferencia-, han descendido al 12? puesto en el Oeste (25-32), lo cual les descarta ya pr¨¢cticamente de su sue?o, dada la ventaja que les sacan muchos equipos y que ya que apenas quedan nueve jornadas. La defensa del equipo de los Wolves se ha resentido de manera notable. Sin Ricky, recibe una media de 11 puntos m¨¢s (96 antes, 107 ahora).

La estad¨ªstica tambi¨¦n delata que, sin el base espa?ol en la cancha, los rivales de Minnesota est¨¢n anotando un 22% m¨¢s en contrataque, un 11% m¨¢s en segundas opciones de tiro y un 4% m¨¢s en tiros desde el interior de la pintura. Hay que matizar que Barea, que junto a Ridnour ocupa la posici¨®n de base y se reparte los minutos de juego de los que Ricky no puede disponer, estuvo igualmente lesionado durante varios partidos, y lo mismo le sucedi¨® Nikola Pekovic, el p¨ªvot que le quit¨® la titularidad a Milicic.

Ricky, operado el 21 de marzo por el doctor Richard Steadman en su cl¨ªnica de Vail (Colorado), hab¨ªa jugado 41 partidos, 31 como titular, con un promedio de 10,6 puntos, 4,2 rebotes, 8,2 asistencias y 2,2 robos de bal¨®n. Cuando se lesion¨® era el tercero en la clasificaci¨®n de robos de bal¨®n y quinto en la de asistencias.

Colmo de males

Para colmo de males, se podr¨ªa esperar que, a peor clasificaci¨®n, m¨¢s posibilidades para los Wolves de elegir mejor en el pr¨®ximo draft, pero ocurre que su elecci¨®n tendr¨¢n que ced¨¦rsela a los Hornets de Nueva Orleans. En Minne¨¢polis, la afici¨®n sue?a con el retorno de Ricky, el jugador con el que recuper¨® la ilusi¨®n de volver a meterse en los playoffs de la NBA.

La ¨²ltima vez que los Wolves lo consiguieron fue en la temporada 2003-2004, cuando el equipo lo dirig¨ªa Flip Saunders y contaba con Kevin Garnett, Sam Cassell, Latrell Sprewell y Wally Szcerbiak, entre otros. Eliminaron a Denver, Sacramento y solo cayeron, por 4-2, en la final de Conferencia ante los Lakers de Shaquille O'Neal y Kobe Bryant, curiosamente, el mismo jugador con el que, en una infortunada acci¨®n, top¨® Ricky Rubio el pasado 9 de marzo.