El rondo de Pirlo
El juego de La Azzurra gravita sobre el m¨¢s grande arquitecto que ha dado la selecci¨®n italiana desde Gianni Rivera
El tipo de ojos hinchados y melena lacia que sale del vestuario cada d¨ªa con los hombros cargados, como si no acabara de desprenderse de las s¨¢banas, parece un poliz¨®n en un equipo repleto de atletas que cuidan su bella figura. A sus 33 a?os, cuando sale al campo a entrenarse, lo ¨²nico que le importa a Andrea Pirlo es formar un rondito. Mientras los t¨¦cnicos organizan la pr¨¢ctica y los compa?eros terminan de vestirse o se sientan a hablar un rato, ¨¦l se lleva el bal¨®n y convoca a los que gusten. Acuden, como el viernes, De Rossi, Balotelli, Ogbonna, Marchisio, Balzaretti, Chiellini, Borini y Giaccherini. Se ponen a pelotear alrededor del m¨¢s desgarbado de todos, que tambi¨¦n es el que manda. Pirlo se sacude el sue?o tocando la pelota. Tocando la pelota ha construido una carrera colosal en un entorno poco propicio a dar licencias a los que entienden el juego como ¨¦l. Inventando pases que nadie m¨¢s imagin¨®, ha conseguido gobernar a Italia, que esta tarde, ante Espa?a, atacar¨¢ y se defender¨¢ seg¨²n su dictado.
¡°La ventaja que, verdaderamente, puede beneficiar a Espa?a frente a Italia es la experiencia de sus jugadores¡±, advierte Demetrio Albertini, vicepresidente de la federaci¨®n italiana. Frente a la selecci¨®n de Vicente del Bosque, mayoritariamente compuesta por futbolistas que han ganado un Mundial o una Eurocopa, los italianos tienen pocos referentes de largo aliento. De los 23 de la plantilla, escasamente ocho han participado en un gran torneo alguna vez. Buffon, Barzagli, Chiellini, Pirlo y De Rossi han disputado m¨¢s de dos. Solo De Rossi se aproxima a los 83 partidos como internacional de Pirlo ¡ªBuffon suma 114¡ª. El capit¨¢n del Roma, que hoy le cubrir¨¢ la retaguardia, le define de un plumazo: ¡°Pirlo es un constructor de equipos. Marca la diferencia a largo plazo. No solo con sus asistencias o sus tiros de falta, que tambi¨¦n deciden partidos¡±.
De Rossi: ¡°Es un constructor de equipos. Hace y marca la diferencia a largo plazo¡±
Pirlo debut¨® en el Brescia, el equipo de su ciudad natal, en 1995 con 16 a?os. Era un mediapunta clarividente pero lento. Demasiado lento y demasiado d¨¦bil para las exigencias culturales y t¨¢cticas del f¨²tbol italiano. Cuando lo fich¨®, el Inter le dej¨® languidecer, sin saber muy bien qu¨¦ hacer con ¨¦l, antes de ced¨¦rselo al Reggina y el Brescia. Cuando regres¨® a su club de origen, se encontr¨® con Carlo Mazzone. El viejo maestro ide¨® una f¨®rmula simple para sacarlo del torbellino. Lo retras¨® 20 metros, donde hay m¨¢s tiempo para pensar, y oblig¨® a todos sus compa?eros a que no hicieran nada sin antes pasarle la pelota. ¡°Si no te la dan¡±, le conmin¨®, ¡°vas y les robas t¨² mismo la pelota¡±. As¨ª naci¨® el m¨¢s grande arquitecto que ha dado el f¨²tbol italiano desde Gianni Rivera.
Prandelli: ¡°Si los espa?oles necesitan marcarle, significar¨¢ que jugamos mejor¡±
Preocupado por las dificultades de su equipo para robar el bal¨®n en los partidos amistosos previos al Europeo, contra Rusia y Uruguay, el seleccionador, Cesare Prandelli, ha procurado construir una zona de seguridad alrededor de su regista. Por detr¨¢s, entre los centrales, ha situado a De Rossi y a los costados le ha escoltado con Marchisio y Motta. Entre los tres deben correr para auxiliarle en la defensa y ofrecer una salida a las jugadas cuando, como previsiblemente ocurrir¨¢, alg¨²n espa?ol lo tape. ¡°Hemos probado algunos movimientos para el caso de tener dificultad en la salida del bal¨®n¡±, dijo ayer Prandelli; ¡°si los espa?oles se ven en la necesidad de estar marcando a Pirlo, parad¨®jicamente, significar¨¢ que jugamos mejor. Estar¨¦ contento porque supondr¨¢ que, t¨¢cticamente, alguna cosa habr¨¢ funcionado¡±.
Motta fue expl¨ªcito sobre su misi¨®n de apoyo a Pirlo: ¡°Tenemos que esforzarnos por entenderlo siempre, por ayudarlo, porque cuando Andrea tiene la pelota debemos desmarcarnos. ?l juega con la cabeza alta y ve siempre el primero los movimientos de nuestros jugadores. Debemos ofrecerle siempre una o dos salidas porque as¨ª es como se aprovecha su juego. Su experiencia es important¨ªsima para el equipo y la mejor forma de aprovechar su juego es trabajar mucho para ¨¦l a fin de que, cuando reciba el bal¨®n, est¨¦ l¨²cido para darnos soluciones¡±.
Hac¨ªa muchos a?os que el juego de Italia no gravitaba tanto sobre un jugador as¨ª. Despu¨¦s de Espa?a, no ha habido otro equipo con m¨¢s porcentaje de posesi¨®n del bal¨®n en la fase clasificatoria. Se?al de que Pirlo est¨¢ en su rondo. Pensando y tocando.
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