Voeckler, a pecho descubierto

Thomas Voeckler (Europcar) es un indomable, un ciclista que se rebela contra su condici¨®n de aparente secundario. Es agitador y es tenaz; a veces se sale con la suya y a veces no tiene suerte, pero es protagonista principal. El a?o pasado, pele¨® por entrar en el podio de Par¨ªs hasta el final. Este a?o, se ha llevado una etapa en Los Alpes y otra en los Pirineos y lo ha intentado m¨¢s veces, en cada ocasi¨®n que ha podido. No guarda nada, a pecho descubierto en cada ascensi¨®n, y cuando no aprieta los dientes saca la lengua, boqueando, muerto por el esfuerzo. Hoy entr¨® en la meta de Bagh¨¨res de Luchon abriendo los brazos, casi formando una cruz con el resto de su cuerpo, agradeciendo el apoyo de un p¨²blico entregado a su esfuerzo. De los favoritos y candidatos a la general, que este a?o no son quienes se llevan las etapas de monta?a, se supo al final. Estirones de Nibali a punto de coronar el Peyresourde y respuesta coordinada de Froome y de Wiggins, ¨¦l tambi¨¦n, no se diga que ganar¨¢ el Tour porque tiene a su lado al sudafricano.

Voeckler ha encontrado en su discreta posici¨®n en la clasificaci¨®n general (hasta hoy marchaba 27?, a 44m 28s del l¨ªder) el salvoconducto perfecto para la gloria. Los favoritos no sienten sus ataques como una amenaza, porque no lo son, y all¨ª que salta ¨¦l, con Luis Le¨®n un d¨ªa, con una treintena de corredores en la etapa de hoy, un grupo muy amplio como para que no haya alguno dispuesto a poner en duda que ¨¦l es protagonista.

Fue eliminando rivales a medida que descontaba kil¨®metros, hasta que solo le qued¨® uno, Brice Feillu (Sojasun), que marchaba 125? en la general. No fue un problema, y a media ascensi¨®n del Peyresourde lo dej¨® atr¨¢s. Por delante, un poco de subida y una bajada, todo muy c¨®modo; si uno es Voeckler, claro. El franc¨¦s baj¨® solo, pero antes hab¨ªa coronado todos los puertos del d¨ªa, que no eran poca cosa. Por este orden: Aubisque, Tourmalet, Aspin y Peyresourde. Se gan¨® la gloria, la etapa y el maillot de l¨ªder de la monta?a. As¨ª que entr¨® solo en la meta, exultante otra vez, despu¨¦s de un Tour que comenz¨® con m¨¢s dudas que certezas.

Por detr¨¢s, los favoritos mostraron lo de siempre. Evans confirm¨® que no est¨¢, con el a?adido de que esta vez su incomparecencia parece definitiva; la etapa fue un calvario para ¨¦l y ya marcha s¨¦ptimo, a m¨¢s de ocho minutos del l¨ªder. Nibali, que ataca pero con timidez, sin el convencimiento de que podr¨ªa atacar para ganar el Tour y ser protagonista; sin el convencimiento de, por ejemplo, Voeckler. Froome ense?¨® a todos, otra vez, que es obediente, aunque sea el mejor. Y Wiggins, que es el que manda, aunque su compa?ero sea el mejor. De forma que pareci¨® que m¨¢s que progresar, todos buscaran conservar lo que tienen. En esa guerra, el que perdi¨® fue Evans, pero era una derrota largamente anunciada. Nibali seguir¨¢ tercero por incomparecencia del rival, el australiano, y quiz¨¢s no pueda ser m¨¢s porque no tenga fuerzas suficientes o porque entienda que Sky es un muro demasiado alto para ¨¦l.

Algo tendr¨¢ que ver en esa aparente complacencia de los favoritos el escenario en el que se desenvuelven, otra vez un final cuesta abajo, despu¨¦s de un d¨ªa en el que se subieron dos puertos de categor¨ªa especial (los dos primeros de la jornada) y dos de primera. Mucho esfuerzo acumulado para que al final todo se juegue a 70 kil¨®metros por hora, el propio cuerpo en juego a cada curva. A Voeckler todo eso le da igual. ?l quiere que le vean, en subida, en bajada. ?l es protagonista porque quiere serlo y, tambi¨¦n, porque los favoritos lo son menos.

Pr¨®logo: Las variaciones Cancellara

Primera etapa: Los domingos generosos

Segunda etapa: Contra la melancol¨ªa, Cavendish

Tercera etapa: La construcci¨®n del personaje Sagan

Cuarta etapa: ?Ser¨¢ Greipel el bos¨®n de Higgs?

Quinta etapa: Y una monta?a en San Quint¨ªn

Sexta etapa: Una guerra de guerrillas

S¨¦ptima etapa: El 'nuevo ciclismo' toma el poder

Octava etapa: Wiggins y sus 'enemigos'

Novena etapa: Wiggins, un Indurain muy locuaz

D¨¦cima etapa: Los maquis del Grand Colombier

Und¨¦cima etapa: Cuando el segundo es mejor que el primero

Duod¨¦cima etapa: Pedaleando en la luz

Decimotercera etapa: 14 de julio en S¨¨te con Wiggins

Decimocuarta etapa: Luis Le¨®n, la memoria gen¨¦tica y el instinto

Decimoquinta etapa: Una victoria sobre una garrapata