D¨ªa de gigantes

En un d¨ªa de excelente cosecha, Espa?a, dio ayer otro estir¨®n en el mercado ol¨ªmpico. Una crecida similar a la de aquellos j¨²niors de oro que en 1999 hicieron pasar por el aro a Estados Unidos en un Mundial y ma?ana, a las 16.00, ya como s¨¦niors de oro, disputar¨¢n su segunda final ol¨ªmpica, la tercera del baloncesto espa?ol. Una generaci¨®n ¨²nica, sin complejos, descarada y talentosa, con un fervor competitivo extraordinario: la que tiene asegurada en la final de Londres ser¨¢ la octava medalla en un gran reto internacional (dos ol¨ªmpicas, una mundial y cinco europeas). Y ser¨¢ en el duelo so?ado contra Estados Unidos, que se merend¨® a Argentina (109-83).?

La nataci¨®n sincronizada espa?ola contin¨²a encandilando por su innovaci¨®n y originalidad

Como tantos otros deportistas espa?oles de la actualidad, los chicos que deslumbraron en aquel juvenil torneo de Lisboa y los que llegaron despu¨¦s nunca se pusieron barreras, nada que ver con aquella Espa?a retra¨ªda, apocada ante lo desconocido, que se sent¨ªa y ve¨ªa perdedora, inferior, v¨ªctima de un fatalismo cr¨®nico. Si Barcelona 92 cambi¨® la mirada al deporte espa?ol ¡ªla propia y la exterior¡ª, los Gasol, Nadal, Alonso y tantos otros han contribuido a que la marca deporte sea el principal cartel de Espa?a ante el mundo.

Las nuevas generaciones han aprendido a competir como los grandes, como recientemente se ha visto con el equipo absoluto de f¨²tbol y ahora con el de baloncesto, que ha tenido, como aquel, m¨¢s de un desliz, algunas penurias y censuras y reproches medi¨¢ticos. Fortalecerse en los torneos significa maquillar con astucia los malos d¨ªas, gestionar cada encuentro con las luces largas, sacar provecho de aquello en lo que otros ni siquiera reparan, de un lance del juego, de un mensaje de la caseta, de toda rendija.

En estos Juegos, la selecci¨®n de Scariolo no ha tirado de su mejor repertorio, no ha sido el conjunto sinf¨®nico de otras veces. Pero est¨¢ en la final, la que ten¨ªa grapada en las entra?as desde Pek¨ªn. Derrotado por Rusia en la fase inicial, casi sonrojada por Gran Breta?a y cuestionada por un supuesto abandono interesado ante Brasil, el equipo a¨²n tuvo que superar otra barricada, su horrible primer tiempo en su reencuentro de ayer con los rusos. Con solo 20 puntos en dos cuartos, con un 21% de efectividad en el tiro, el desenlace parec¨ªa apocal¨ªptico. No fue el caso, Calder¨®n cogi¨® al equipo por la pechera, Rudy mejor¨® la punter¨ªa, los Gasol se blindaron bajo los aros y Llull fue un jabato por toda la cancha, s¨ªntoma ejemplar de que este equipo tiene nervio, que puede ser febril cuando no tiene acierto. Al final, igualada al t¨¦rmino del tercer cuarto (46-46) y escapada hasta el glorioso desenlace final para los espa?oles (67-59). Y a esperar a Estados Unidos.

Tras la plata de Yag¨¹e y el oro de Joel Gonz¨¢lez, el taekwondo sum¨® un nuevo metal al casillero espa?ol

El descorche del baloncesto fue el lazo a una jornada que arranc¨® con el bronce en la nataci¨®n sincronizada por equipos, una maravillosa rutina la de este concurso, siempre un valor seguro, y prosigui¨® con otras dos medallas. Por un lado, la de otro taekwondista, el canario Nicol¨¢s Garc¨ªa, de 24 a?os, que alcanz¨® la plata en su categor¨ªa. De momento, no ha habido en Londres deporte m¨¢s prolijo para Espa?a, que se ha demostrado que en lo marcial tambi¨¦n tiene arte. La de Garc¨ªa supuso la tercera medalla tras las de Joel y Brigitte. No parece fruto de la casualidad, sino de un trabajo de fondo, de un m¨¦todo y una planificaci¨®n. Un deporte que ha tomado el relevo, entre los de combate, del yudo, anta?o caladero de premios. Siempre lo ha sido la vela, que ayer sum¨® su 19? medalla en la historia del deporte espa?ol, cuyo r¨¢nking ol¨ªmpico encabeza. Tamara Echegoyen, Sof¨ªa Toro y ?ngela Pumariega derrotaron a Rusia (2-1) y hoy (14.00) disputar¨¢n con Australia la final de Match Race. Un caso excepcional. Puro ingenio. Una tripulaci¨®n reclutada a la carrera con una embarcaci¨®n inventada a la medida.

Las mujeres, protagonistas indiscutibles, superan con creces a los hombres en medallas: 10 por seis

Ellas, las mujeres, protagonistas indiscutibles de estos Juegos, superan con creces al otro g¨¦nero en medallas: diez por seis. El cesto ha engordado hoy con la plata de Sa¨²l Craviotto en K-1 200m, y puede hacerlo m¨¢s con Ruth Beitia en salto de altura y con el balonmano femenino. Suma y suma, con 16 medallas, Espa?a ya est¨¢ a un bingo de su techo en Atlanta y a dos de Pek¨ªn. M¨¢s o menos, en la media desde la efervescente Barcelona del 92. Eso s¨ª, con algunas generaciones de oro de m¨¢s, como la que ayer dio otro paso de gigantes.