Un fen¨®meno de la naturaleza

Partiendo la Vuelta de donde parte, de Pamplona, ma?ana, y de la forma como lo hace, con una contrarreloj por equipos, es inevitable recordar a Miguel Indurain (Villava, al lado de la capital navarra; 16 de julio de 1964), el mejor ciclista de la historia en Espa?a. Al paso de los conjuntos encascados, perfilados, aerodin¨¢micos por la Estafeta, una pregunta surgir¨ªa tambi¨¦n de modo inevitable: ?qu¨¦ papel har¨ªa el Indurain de hoy, 48 a?os y m¨¢s de 90 kilos, con mucho menos kil¨®metros de bicicleta en las piernas que en su ¨¦poca activa, ya hace m¨¢s de 15, en la primera etapa de la ronde espa?ola de 2012?

?No ser¨ªa tanto una pregunta ret¨®rico-melanc¨®lica, de respuesta abierta a la imaginaci¨®n, como una pregunta real con una respuesta real y estudiada. ¡°M¨¢s de 14 a?os despu¨¦s de su retirada, los valores absolutos de Indurain son superiores a los de bastantes corredores j¨®venes que est¨¢n actualmente en el pelot¨®n¡±, dice I?igo Mujika, un fisi¨®logo que someti¨® en 2010 a Indurain a una prueba completa de esfuerzo cuyos resultados, compar¨¢ndolos con los de un estudio efectuado cuando su r¨¦cord de la hora de 1994, acaba de publicar en el International Journal of Sports Physiology and Performance.

Ya no podr¨ªa resistir la Vuelta, pero sus valores son a¨²n superiores a los de corredores en activo

¡°El objetivo del estudio era comprobar el declive en la capacidad f¨ªsica de un gran campe¨®n y compararlo con el de otros casos ya publicados. Y, aunque esa merma ha sido de entre un 12% y un 20% por decenio, superior al declive publicado en otros estudios con otros deportistas, que se cifra en un 10%, y que se han entrenado m¨¢s despu¨¦s de abandonar el profesionalismo, los valores absolutos de Indurain son a¨²n superiores a los de ciclistas en activo¡±.

Sus valores son tan altos, podr¨ªa a?adirse, que permiten confirmar a?os despu¨¦s que los que ten¨ªa en su esplendor, entre 1991 y 1995, cuando gan¨® cinco veces el Tour y asombraba al mundo, eran los de un aut¨¦ntico fen¨®meno de la naturaleza, el de alguien con una gen¨¦tica ¨²nica. ¡°Un caso casi ¨²nico, como lo fueron Anquetil, Bahamontes o Hinault¡±, dice Pedro Celaya, fisi¨®logo que ha trabajado con Armstrong; ¡°un fen¨®meno¡±.

Cuando Sabino Padilla, su fisi¨®logo en el Banesto, y Mujika le sometieron a un profundo estudio para calibrar sus posibilidades de batir el r¨¦cord de la hora en el vel¨®dromo de Burdeos, en el verano de 1994 (lo consigui¨®: 53,040 kil¨®metros), Indurain ten¨ªa 30 a?os, med¨ªa 1,88 metros, pesaba 81 kilos y... 24.000 kil¨®metros en las piernas esa temporada (acababa de ganar su cuarto Tour y hab¨ªa corrido tambi¨¦n el Giro). Entonces, su consumo m¨¢ximo de ox¨ªgeno (el par¨¢metro que indica la capacidad f¨ªsica de una persona, la que marca el l¨ªmite a su rendimiento) era elevad¨ªsimo, de 79 mililitros por kilo y minuto; su producci¨®n de vatios m¨¢xima era de 572 (7,1 por kilo) y en el umbral l¨¢ctico (momento a partir del cual no se puede sostener el esfuerzo durante m¨¢s de unos minutos) era de 505 (6,23 por kilo). Su coraz¨®n en ese momento, el del umbral, lat¨ªa a 183 pulsaciones por minuto.

C¨¢lculos posteriores a la luz de lo realizado en el r¨¦cord permitieron a Padilla y Mujika establecer que los vatios que necesit¨® producir Indurain para recorrer 53,040 kil¨®metros en una hora fueron 510. Muchos especialistas, compar¨¢ndolos con los de otros recordmen, como Merckx (380), Rominger (456) o Boardman (462), enarcaron entonces las cejas, esc¨¦pticos, dejando de lado que el cociente peso-potencia perjudicaba a Indurain (6,29 vatios/kilo) frente a Rominger (7 vatios/kilo) o Boardman (6,7 vatios/kilo). Los mejores ciclistas de la actualidad, estudiados en sus ascensiones en las grandes vueltas, arrojan vatios de este calibre: 6,73 vatios/kilo Contador en la media hora de Verbier, cuando gan¨® el Tour de 2009; 6,33 Cobo en el Angliru de 2011; 6,16 Froome y Menchov el mismo d¨ªa: 6,29 Wiggins en el pasado Tour; 6,36 Sastre en el Vesubio¡­

Los datos de la prueba de esfuerzo efectuada en 2010 por Mujika sirven para ratificar, sin embargo, el incre¨ªble potencial natural de Indurain. Cuando se someti¨® al estudio, pesaba 92,2 kilos, ten¨ªa 46 a?os y solo hab¨ªa recorrido en bicicleta ese a?o, y de manera discontinua, unos 8.000 kil¨®metros. Pese a todo, su consumo de ox¨ªgeno m¨¢ximo era de 57,4 mililitros por kilo y por minuto; sus vatios m¨¢ximos, de 450, y en el umbral, de 369 (4 vatios/kilo), y con un coraz¨®n latiendo a 170 pulsaciones por minuto.

¡°Son valores que se encuentran en ciclistas de ahora, que cuentan a su favor con la juventud¡±, dice Celaya; ¡°sin embargo, Indurain no podr¨ªa aguantar hoy una Vuelta, ni aun bajando de peso, pues juega en su contra la vejez, un proceso irreversible que influye en su capacidad de producci¨®n hormonal, en la calidad muscular, en la calidad de los receptores¡­ En suma, afecta negativamente a su capacidad de recuperaci¨®n, el par¨¢metro b¨¢sico del ciclismo¡±.