Cameron admite que la Polic¨ªa manipul¨® las pruebas para denigrar a los fallecidos de Hillsborough

El 15 de abril de 1989, 96 aficionados del Liverpool fallecieron aplastados contra las vallas del estadio de Hillsborough, en Sheffield, y m¨¢s de 800 fueron heridos. Las familias, ha dicho hoy David Cameron, primer ministro brit¨¢nico, sufrieron una ¡°doble injusticia¡±: el fallo del Estado, ¡°incapaz de proteger a sus seres queridos¡± y la que supone ¡°denigrar¡± a los muertos, sugiriendo que, ¡°de alguna forma, ellos tuvieron la culpa de su propia muerte¡±. ¡°Lo siento mucho¡±, ha dicho Cameron.

Hoy, 450.000 p¨¢ginas de documentos relacionados con el caso han visto la luz y han servido para confirmar lo que se sospechaba desde 1990: que hubo un fallo de seguridad en el control de acceso al estadio donde aquella tarde se disputaba una semifinal copera entre el Liverpool y el Nottingham Forest, y que aquel fallo contribuy¨® decisivamente a que se produjera la tragedia. Los documentos han servido de apoyo para la elaboraci¨®n por parte de un panel de un nuevo informe sobre la tragedia. Margaret Thatcher, entonces premier brit¨¢nica, los archiv¨®, y las familias pensaron que con ello se taparon las verg¨¹enzas de la Polic¨ªa. 23 a?os despu¨¦s, David Cameron ha levantado el secreto, ha confirmado esa versi¨®n y ha apoyado el acto con una declaraci¨®n institucional que ha tenido bastante de acto de contrici¨®n por lo sucedido. ¡°Las familias han cre¨ªdo, durante mucho tiempo, que hubo un intento de las autoridades por tergiversar lo que pas¨®. Ten¨ªan raz¨®n¡±, ha explicado Cameron, en un gesto de absoluta asunci¨®n de culpas. No hay pruebas de que soporten la tesis de que los "niveles de ebriedad, la falta de tiques o la violencia" de los hinchas del Liverpool fueran exagerados, como tampoco las hay de que "conspiraran para llegar tarde al estadio" o de que robaran a quienes fallecieron.

De aquellos d¨ªas se recuerda en Liverpool un art¨ªculo del diario sensacionalista The Sun, en el que se culpaba exclusivamente a los hinchas del club de haber provocado la cat¨¢strofe y de aprovecharse de ella. Aquel art¨ªculo se llev¨® a portada con un t¨ªtulo que, parad¨®jicamente, escond¨ªa la realidad: "The Truth" ("La verdad", en castellano). Bajo el t¨ªtulo, tres l¨ªneas de subt¨ªtulo: "Algunos aficionados robaron a los muertos. Algunos aficionados orinaron sobre los valientes polic¨ªas. Algunos aficionados golpearon a los polic¨ªas que hac¨ªan el boca a boca". Kelvin McKenzie, entonces editor del tabloide, pidi¨® disculpas posteriormente, y explic¨® que la decisi¨®n de titular de esa forma, tomada tras una deliberaci¨®n de m¨¢s de una hora, fue un "fallo fundamental". Dominic Mohan, actual editor, ha grabado un v¨ªdeo emitido esta tarde asumiendo un "fallo terrible". "Dijimos que era la verdad; no lo era". Y Cameron ha completado el relato. "Se dio explicaciones a los medios, y esas explicaciones llevaron al art¨ªculo de The Sun atacando a los aficionados¡±, ha dicho Cameron, quien ha pedido a McKenzie que asuma su responsabilidad.

El informe que hoy se hace p¨²blico afirma que la informaci¨®n de The Sun provino de una agencia de noticias de Sheffield que recog¨ªa comentarios de los agentes de polic¨ªa. El primer ministro no ha ahorrado calificativos: ¡°Fue una de las mayores tragedias del Reino Unido en tiempos de paz¡±. ¡°Ahora tenemos pruebas de c¨®mo fallaron las autoridades¡±, ha reconocido, de pie ante los Comunes. Pero lo revelado va m¨¢s all¨¢ de un simple fallo. Cameron, citando el informe, ha explicado que la Polic¨ªa realiz¨® test sangu¨ªneos de alcoholemia a los fallecidos, que comprob¨® sus antecedentes policiales para manchar su reputaci¨®n y que 116 de las 164 declaraciones fueron ama?adas para eliminar comentarios negativos sobre los agentes y su comportamiento. Y algo que doler¨¢ m¨¢s a los familiares: que 41 de las 96 personas murieron pudieron ser salvadas si se hubiera actuado de otra forma. Tambi¨¦n ha admitido que el Gobierno pudo ¡°hacer m¨¢s¡± para desenmascarar las falsedades que circularon pero, al mismo tiempo, ha asegurado que ¡°no hay pruebas¡± de que tratara de esconder la verdad. La Fiscal¨ªa, ha anunciado, deber¨¢ estudiar el asunto. Ed Miliband, l¨ªder de los laboristas, tambi¨¦n ha pedido disculpas y resaltado que el hecho de que hayan pasado 23 a?os para ¡°llegar a la verdad¡± es una ¡°verg¨¹enza¡± para el pa¨ªs.

La publicaci¨®n de los documentos, acompa?ada de la declaraci¨®n de Cameron, es el principal acto de los varios que se celebrar¨¢n hoy para honrar a los fallecidos y purgar las culpas de aquel desastre. El obispo de Liverpool ha recibido a los familiares de los fallecidos y heridos; a las 16.06 (hora espa?ola) se han guardado dos minutos de silencio en el Ayuntamiento de Liverpool; despu¨¦s, se escuchar¨¢n las campanas de la Iglesia repicar 96 veces, una por cada fallecido; y a las 20.00 sonar¨¢, en el mejor homenaje que un hincha del Liverpool pueda recibir, el You¡¯ll never walk alone. Con todo esto se culmina un proceso que se inici¨® con una petici¨®n formulada por la C¨¢mara de los Comunes, el pasado 17 de octubre. Steve Roterham, exalcalde de Liverpool, pidi¨® entonces a David Cameron que pidiera disculpas por aquella tragedia, y ¡°justicia¡± para los 96 fallecidos. Tras leer sus nombres, uno a uno, recibi¨® un aplauso de la c¨¢mara. Hoy, Cameron ha pedido disculpas y algo m¨¢s, lo que no arreglar¨¢ nada, pero servir¨¢ para que empiece a cicatrizar una herida que lleva mucho tiempo. Hoy Cameron ha pedido perd¨®n.