Vettel se queda seco

El circuito de Abu Dabi pretende terminar siendo reconocido como uno de esos escenarios decisivos en la historia de la F-1. Hace dos a?os, en un final de Mundial a tres bandas, Sebastian Vettel fue coronado como el campe¨®n del mundo m¨¢s precoz despu¨¦s de imponerse contra pron¨®stico a Fernando Alonso y a Mark Webber. Esta vez ser¨¢ el alem¨¢n el que deber¨¢ encajar un directo a la mand¨ªbula, tras recibir la misma sanci¨®n que cay¨® sobre Lewis Hamilton en el ¨²ltimo Gran Premio de Espa?a y que le oblig¨® a arrancar el ¨²ltimo. A ¨²ltima hora, Red Bull decidi¨® que el piloto de Heppenheim tome la salida desde los talleres para poder modificar la configuraci¨®n del coche por completo.

Vettel, que te¨®ricamente deb¨ªa comenzar la prueba desde la tercera plaza, por detr¨¢s de Hamilton y Webber, fue penalizado por no haber devuelto el b¨®lido al parque cerrado al finalizar la cronometrada con la cantidad m¨ªnima de combustible en el dep¨®sito, que el reglamento estipula en un litro. Como consecuencia, Alonso, que hab¨ªa cruzado la meta el s¨¦ptimo, ganar¨¢ una posici¨®n y partir¨¢ el sexto.

Hamilton circulaba al frente de la tabla de tiempos en el momento en que Baby Schumi realiz¨® su segunda intentona en la Q3 y se coloc¨® el tercero. En el giro de regreso al taller, Guillaume Rocquelin, su ingeniero de pista, le orden¨® que detuviera el motor de su RB8 y ¨¦l lo hizo. Lo aparc¨® y fue recogido por el veh¨ªculo m¨¦dico. Luego atendi¨® a la prensa como si nada fuera a pasar pero con el semblante mucho m¨¢s serio de lo habitual, consciente de que la tarde posiblemente iba a ser larga.

Media hora m¨¢s tarde, los comisarios requirieron su presencia en la sala de reuniones para que expusiera su versi¨®n de lo ocurrido, y all¨ª empez¨® un desfile que no termin¨® hasta las once de la noche. Concluido su turno lleg¨® el de los ingenieros, tanto los de Red Bull como los de Renault, la marca que suministra los motores a la escuder¨ªa energ¨¦tica. Para justificar el incidente, los t¨¦cnicos de la estructura de Milton Keynes alegaron un problema en la bomba de la gasolina, una argumentaci¨®n que el personal de la Federaci¨®n Internacional del Autom¨®vil (FIA) dio por buena en un primer momento, antes de medir el carburante que a¨²n quedaba en el tanque. Fueron 850 ml, mientras que los c¨¢lculos de la FIA estipulaban que el coche precisaba contener 1,2 litros en el punto en que se estacion¨®, para poder volver y entrar dentro de los m¨¢rgenes de la normativa. Fue esa diferencia de cifras la que motiv¨® el castigo. De ser una estrategia premeditada, la marca austriaca tom¨® un riesgo considerablemente innecesario en uno de los trazados que menos penaliza el sobrepeso [solo dos d¨¦cimas por vuelta por cada diez kilos de m¨¢s, cuando la media del certamen es de cuatro].

A falta de tres Grandes Premios para que el campeonato ponga el cerrojo en Brasil, este ¨²ltimo golpe de efecto puede terminar alborotando un curso

¡°En el dep¨®sito hay unas c¨¦lulas que miden cu¨¢nta gasolina queda. En un momento dado, Renault nos ha dicho que los niveles hab¨ªan bajado de golpe y por eso le hemos pedido a Sebastian que parara¡±, explic¨® Christian Horner, jefe de Red Bull. ¡°Por eso los comisarios han aceptado nuestros motivos. En Renault est¨¢n convencidos de que a¨²n queda ese litro, aunque deberemos analizarlo todo para saber d¨®nde¡±, a?adi¨® el brit¨¢nico.

A falta de solo tres grandes premios para que el campeonato ponga el cerrojo en Brasil, este ¨²ltimo golpe de efecto puede terminar alborotando un curso que ¨²ltimamente hab¨ªa entrado en una din¨¢mica muy lineal, con cuatro victorias consecutivas de Vettel que le han permitido asumir el mando. Si el actual campe¨®n comenz¨® a escribir su leyenda en la F-1 en la cita que se celebr¨® en Abu Dabi en 2010, ahora se ha quedado seco en este mismo decorado.