Pedro Le¨®n destripa al Zaragoza
El extremo ofrece un recital antes de ser expulsado y catapulta al Getafe
Las lesiones y la suplencia innegociable durante un curso en el Madrid, acentuadas por la pelotera con Mourinho, castig¨® la autoestima de Pedro Le¨®n, que perdi¨® su f¨²tbol hasta el punto de que decidi¨® regresar al Getafe para recobrarlo. Recuperado el tono f¨ªsico y la fe en el juego y en sus pies, el extremo disfruta de nuevo de su relaci¨®n con el bal¨®n, solo estropeada por el intervencionismo de Mu?iz y sus tarjetas. Pero la irrupci¨®n de Le¨®n bast¨® para destripar al Zaragoza, que se deshilacha a cada jornada ¡ªnueve sin ganar¡ª, deprimido y sin receta. Lo contrario al Getafe, que va como un tiro, a un pasito de Europa.
GETAFE, 2 ¨C ZARAGOZA, 0
Getafe: Moy¨¢; Torres, Fede, Alexis, Escudero; Borja, Lacen; Pedro Le¨®n, Barrada (Hugo Fraile, m. 88), Diego Castro (Gavil¨¢n, m. 83); y Colunga (?lvaro, m. 76). No utilizados: Codina; Rafa, M¨ªchel y Sarabia.
Zaragoza: Alcolea; Sapunaru, ?lvaro, Loovens, Abraham; Movilla (V¨ªctor Rodr¨ªguez, m. 50), Jos¨¦ Mari; Rochina (Edu Oriol, m. 77), Babovic (Jos¨¦ Fern¨¢ndez, m. 74), Monta?¨¦s; y Postiga. No utilizados: Killian; Wilchez, Pint¨¦r y Bienvenu.
Goles: 0-1. M. 21. Pedro Le¨®n centra y Colunga define. 2-0. M. 61. Escudero, de falta
?rbitro: Mu?iz Fern¨¢ndez. Amonest¨® a Alexis, Loovens, Borja, Lacen, Pedro Le¨®n. ?lvaro y Jos¨¦ Mari. Doble tarjeta amarilla a Loovens (m. 60) y Pedro Le¨®n (m. 63).
Coliseum. Unos 7.000 espectadores.
Al Zaragoza le dur¨® el empuje un suspiro, lo que tard¨® el Getafe en desactivar a Rochina, ¨²nico en trazar el eslalon y el disparo ¡ªdos latigazos despejados por Moy¨¢¡ª, toda vez que el equipo no compone f¨²tbol ni remates, regates ni pases. Y sin intensidad ni tampoco portero (Roberto est¨¢ lesionado; Leo Franco, sancionado), justo lo que defin¨ªa a los de Jim¨¦nez, el Zaragoza no es rival. Lo festej¨® el Getafe, que se confi¨® a Le¨®n.
Pegado a la cal, Pedro Le¨®n descompuso al Zaragoza. Amag¨® con una bicicleta para descontar a un oponente, rest¨® a otro con la cintura y solt¨® un zapatazo que salud¨® al palo. Despu¨¦s, tir¨® la diagonal y absorbi¨® el pase de Barrada y lanz¨® un centro, no rematado por Colunga por los pelos. Y a la tercera, explot¨®; control orientado tras un pase de 40 metros y pase mordido para Colunga que remat¨® a la red. Fisura irremediable para el Zaragoza, que expres¨® su estado depresivo en una acci¨®n accidentada, cuando Mu?iz expuls¨® a Loovens al entender que cort¨® una jugada con el brazo ¡ªfue hombro¡ª, cuando el disparo seguido de Escudero dio en la barrera y acab¨® en gol.
Protagonista, Mu?iz ech¨® despu¨¦s a Le¨®n, que hizo una falta y sac¨® una mano involuntaria, ambas acciones lejos de ser peligrosas, y equipar¨® el duelo. Al menos en efectivos, puesto que el juego estaba resuelto, sobre todo por el mismo Pedro Le¨®n.
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