Woody, el recogepelotas

Con 17 a?os, hastiado de ser suplente en las categor¨ªas inferiores del Borussia Dortmund, Marco Reus (Dortmund, 1989) decidi¨® pedir la carta de libertad. Los t¨¦cnicos de la casa ve¨ªan a un chico extremadamente delgado como para pensar que podr¨ªa alcanzar la ¨¦lite, y le relegaban con frecuencia al banquillo. El pasado verano, siete a?os despu¨¦s de su marcha, el Dortmund desembols¨® 17 millones de euros al Borussia Moenchengladbach para recuperar a Woody, El p¨¢jaro loco, apodo que se ha ganado por su peinado, una cresta mechada e inclinada hacia un lado.

El propio Reus reconoci¨® que lo que mejor que pudo hacer entonces fue marcharse al modesto Roth Weiss Ahlen. Nunca tuvo una mala palabra hacia el Dortmund. Siempre ha reconocido que fue lo ideal para tratar de desarrollarse. ¡°Sinceramente, el precio que hemos pagado por ¨¦l est¨¢ por debajo de su valor real en el mercado¡±, se apresur¨® a decir Klopp nada m¨¢s concretarse su regreso el pasado verano tras pagar la cl¨¢usula de rescisi¨®n. Por eso ayer el t¨¦cnico no atac¨® con excesiva fiereza al Bayern por haber negociado con G?tze sin contar con el Dortmund y postularse a pagar el precio de su libertad contractual. ¡°Nosotros hicimos lo mismo con Reus, as¨ª que no tengo nada que decir¡±, asegur¨® el t¨¦cnico.

Nunca ha renegado como jugador
de banda, pero puede actuar de mediapunta

El fichaje de Reus por el Dortmund ha sido la gran derrota del Bayern en el mercado de fichajes alem¨¢n de los ¨²ltimos 20 a?os. Tanto que supuso uno de los motivos por los que Christian Nerlinger, el director deportivo del Bayern cuando se produjo su regreso, tuvo que dejar paso este verano a Mathias Sammer, que, de alguna manera, con el reci¨¦n anunciado fichaje de G?tze, ha resta?ado la afrenta. Nunca quiso ir Reus a M¨²nich. Se siente de Dortmund y del Dortmund. Durante su primera estancia lleg¨® a ejercer de recogepelotas y a ser uno de los asiduos en la S¨¹dtribune del Westfalenstadion, donde acud¨ªa como un hincha entusiasta. Nunca reneg¨® de su condici¨®n de borusser, ni siquiera en el Moenchengladbach. All¨ª jugaba, pero hac¨ªa toda su vida en la ciudad natal. Terminaba los partidos y cog¨ªa el coche para reunirse con los suyos en Dortmund.

La marcha de G?tze la pr¨®xima temporada deja a Reus como el gran pilar futbol¨ªstico de Klopp y tambi¨¦n como el icono con m¨¢s pedigr¨ª. Probablemente, el t¨¦cnico le entregue la posici¨®n que m¨¢s le atrae, de mediapunta por el centro. Nunca ha renegado como jugador de banda, es diestro pese a desenvolverse casi siempre por la banda izquierda. Incluso el seleccionador alem¨¢n, Joachim L?w, le ha se?alado como un posible falso nueve: ¡°Cuando nos enfrentemos a rivales que metan muchos jugadores por detr¨¢s de la pelota, ¨¦l puede ser una soluci¨®n porque se gira muy r¨¢pido¡±. ¡°A menudo jugu¨¦ como delantero centro para el Moenchengladbach. He demostrado que puedo jugar en cualquier posici¨®n de ataque¡±.

Si G?tze colectiviza el juego del Dortmund en los ¨²ltimos 30 metros, Reus lo verticaliza. Dotado de un poderoso cambio de ritmo, Reus hace mucho da?o cuando llega desde la segunda l¨ªnea en velocidad, tanto para driblar como para definir. Tambi¨¦n es el encargado de ejecutar las jugadas a bal¨®n parado.