Un fest¨ªn camino de la final

Un hambre sin l¨ªmites. Un talento excelso. Espa?a luchar¨¢ por el trono europeo tras un campeonato que han ido devorando a bocados, con un baloncesto tan intenso como feliz. Despu¨¦s de cinco europeos consecutivos sin bajarse del podio (cuatro bronces y una plata entre 2001 y 2009), Espa?a patin¨® en la cita de 2011 y su noveno puesto le cost¨® adem¨¢s perderse la cita ol¨ªmpica de Londres. Dispuestas a resarcirse de aquel mal sue?o las chicas de Mondelo llegaron lanzadas a Francia y con ocho victorias en ocho partidos se han presentado en la final mezclando un anhelo desmedido y un potencial inagotable. Un fest¨ªn pantagru¨¦lico ante Serbia llev¨® a las de Mondelo a la lucha por el oro en otra exhibici¨®n de ambici¨®n y clase.

La defensa de ayudas de Espa?a ataj¨® desde el salto inicial la anunciada polivalencia del per¨ªmetro serbio evidenciando su inagotable codicia ganadora. La direcci¨®n de Silvia Dom¨ªnguez, los puntos de Alba Torrens, el poder intimidador de Sancho Lyttle y los grilletes de Marta Xargay impulsaron al conjunto espa?ol hasta un parcial de 10-0 con el que presentaron credenciales y candidatura a la final. Incapaces de escapar de la tela de ara?a de Espa?a, la primera canasta de las de Marina Maljkovic, hija de Boza, tard¨® seis minutos en llegar y su fam¨¦lica producci¨®n anotadora tan solo alcanz¨® los siete puntos en el primer acto (19-7). Un anuncio del abismo que separ¨® a ambos equipos desde los primeros compases y hasta el final.

¡°Disfrutar y competir; sin presi¨®n, pero con ambici¨®n¡±, marcaba el ideario de Mondelo para las semifinales y sus jugadoras no tardaron en ponerlo en pr¨¢ctica. El esp¨ªritu y el hambre de las espa?olas abrum¨® a su rival hasta el zarandeo (27-10, m. 12). Llegaron a Francia para reivindicar el estatus perdido y -con un camino minado por delante que se iniciaba ante el ¨²ltimo campe¨®n continental, Rusia- las espa?olas lucieron talento y vigor competitivo desde el primer d¨ªa y lo elevaron a la m¨¢xima potencia ante Serbia. Aupadas de nuevo por sus dos puntales, Sancho Lyttle y Alba Torrens -22 puntos,11 rebotes (su sexto doble doble en ocho partidos) y 3 asistencias de la p¨ªvot y 11, 4 y 2 de la alero al descanso-, las de Mondelo rompieron el encuentro en un santiam¨¦n instalando la diferencia en la frontera de los 20 puntos (35-15, m. 15). Apenas Milovanovic y Butulija encontraban alg¨²n resquicio anotador para capear el temporal y solo Ajanovic manten¨ªa el pulso en la desigual batalla reboteadora (23-14, al descanso). Poco argumento para contener semejante embestida.

Mientras la rotaci¨®n de Maljikovic se convirti¨® en un galimat¨ªas indescifrable en busca de un interruptor que no aparec¨ªa, el banquillo espa?ol saltaba a la pista elevando en cada vuelta de tuerca el list¨®n competitivo. ¡°No es necesario defender tanto¡±, se permiti¨® aconsejar Mondelo, preocupado por dosificar el esfuerzo de las suyas. Deseosas de participar en la fiesta nadie desentonaba en sus apariciones epis¨®dicas. Siempre con Lyttle al frente. La p¨ªvot de origen caribe?o -m¨¢xima anotadora, reboteadora y recuperadora del torneo- se convirti¨® en un muro inabordable para Serbia, incapaz de sobreponerse al ataque espa?ol que ca¨ªa como una granizada sobre el aro rival. A pesar del desacierto desde el per¨ªmetro, Espa?a marcaba la pauta a su antojo con una hiperactividad febril e incansable. Nunca falt¨® la presi¨®n, nunca baj¨® el ritmo.

Espa?a buscar¨¢ reeditar el oro conquistado en 1993 en Perugia

Ni rastro del descaro que llev¨® a las serbias a convertirse en la sorpresa del campeonato tras colarse in extremis en la segunda fase. Delante de ellas ten¨ªa a un rival que se ha barnizado en optimismo a base de actitud y aptitud desde el primer d¨ªa. Rusia, Italia, Suecia, Eslovaquia, Montenegro, Turqu¨ªa y la Rep¨²blica Checa quedaron en el camino y Serbia se a?adi¨® a la lista sucumbiendo con estr¨¦pito y sin respuesta (54-28, m. 24). Marta Xargay y, sobre todo, Cristina Ouvi?a -19 puntos- se destaparon en la rotaci¨®n de Mondelo elevando la renta hasta los 27 de ventaja coincidiendo con la bocina que cerraba el tercer cuarto (69-42).

La distancia permiti¨® pronto a Mondelo gestionar con mimo sus recursos y la semifinal se convirti¨® en un banco de pruebas para la cita del domingo en la que Espa?a buscar¨¢ reeditar el oro de 1993 en Perugia. El ¨²ltimo list¨®n a superar ser¨¢ la anfitriona, Francia, que se deshizo (57-49) de Turqu¨ªa.