Ronaldinho, el ¡®crack¡¯ que cambi¨® al Bar?a
Se cumplen diez a?os de la llegada del carism¨¢tico astro brasile?o que transform¨® por completo la marcha de un club inmerso en una profunda crisis
Su mirada p¨ªcara y sonrisa contagiosa despertaron al Camp Nou de una larga melancol¨ªa. Su paso desgarbado y regates endiablados enamoraron al pueblo cul¨¦ despu¨¦s de a?os de apat¨ªa. Su f¨²tbol, reivindicativo de los mejores brasileros, y dianas antol¨®gicas descorcharon t¨ªtulos en can Bar?a tras un lustro de sequ¨ªa. Ronaldo de Ass¨ªs Moreira, Ronaldinho, (Porto Alegre, 1980), lleg¨® al Barcelona un 21 de julio de 2003 y parti¨® rumbo al Milan cinco temporadas despu¨¦s. Pero nunca se fue. El barcelonismo siempre recordar¨¢ al crack brasile?o como el hombre que cambi¨® al Bar?a.
El Barcelona estaba deprimido. El club pas¨® cinco a?os sin abrir las vitrinas y miraba por televisi¨®n cada trofeo que levantaban los gal¨¢cticos del Real Madrid. Envuelto en una profunda crisis institucional y deportiva, Joan Laporta, en junio de 2003, se hace cargo de la presidencia del Bar?a. El nuevo mandatario con las arcas en terapia intensiva necesitaba hacer un esfuerzo econ¨®mico por un fichaje que cambie el estado de ¨¢nimo del Bar?a. La apuesta: Ronaldinho. El exjugador del Gremio de Porto Alegre, brillaba en el Paris Saint Germain, pero el Manchester United se lo quer¨ªa llevar para Inglaterra. El Bar?a le gan¨® el pulso a los diablos rojos y el Gaucho se visti¨® de azulgrana. Y una palabra se hizo un himno en el Bar?a: cambio.
¡°Rijkaard le dio la libertad para que pueda jugar como ¨¦l sab¨ªa¡±, revela Rafa M¨¢rquez
¡°Cambi¨® la mentalidad de todo el barcelonismo¡±, cuenta Gerard L¨®pez, que estaba en el vestuario azulgrana desde el 2000. ¡°Ven¨ªamos de una ¨¦poca mala, sin resultados y con un Real Madrid que estaba muy fuerte¡±, agrega el mediocampista catal¨¢n. ¡°Su llegada cambi¨® la imagen del Bar?a. Todo lo que Ronnie trasmit¨ªa: su alegr¨ªa, calidez, f¨²tbol genial, se contagi¨® no solo a los jugadores sino tambi¨¦n, al club y a la afici¨®n¡±, tercia Rafa M¨¢rquez, que aterriz¨® en Camp Nou el mismo verano que el brasilero. ¡°Ronaldinho fue el culpable del cambio del Bar?a. La ¨¦poca era mala y el cambio experimentado con su llegada fue terrible¡±, zanja Messi en declaraciones a Bar?aTV.
¡°La primera vez que lo vi en un entrenamiento me qued¨¦ maravillado. Las cosas que hac¨ªa con el bal¨®n eran incre¨ªbles¡±, recuerda Sergio Garc¨ªa, que salt¨® del Miniestadi al Camp Nou la temporada que Ronaldinho aterriz¨® en el Bar?a. ¡°En los entrenamientos era un verdadero espect¨¢culo. Se divert¨ªa y como intentaba hacer cosas que en un partido no pod¨ªa, nosotros disfrut¨¢bamos much¨ªsimo con ¨¦l¡±, ampl¨ªa Rafa M¨¢rquez. ¡°Era alegr¨ªa pura, era impresionante la forma de vivir que ten¨ªa¡±, dice Gerard, que el primer a?o del brasile?o en el Barcelona eran compa?eros en las concentraciones. ¡°Pon¨ªa m¨²sica brasilera en la habitaci¨®n, estaba siempre tranquilo y sobre todo de risas¡±.
Frank Rijkaard, entrenador del Barcelona en la etapa Ronaldinho, supo comprenderlo y darle alas al f¨²tbol del crack. ¡°Rijkaard le dio la libertad para que pueda jugar como ¨¦l sab¨ªa¡±, revela Rafa M¨¢rquez. Y el Gaucho, fundamentalista del f¨²tbol brasilero, parec¨ªa saltar al campo como andaba por la vida en Porto Alegre: en chanclas, ba?ador y con la toalla colgada del hombro. Un jugador de playa. Un futbolista sobrado de calidad que disfrutaba y hac¨ªa disfrutar del f¨²tbol. ¡°Era un loco del bal¨®n, andaba con la pelota a toda hora¡±, cuenta Gerard L¨®pez. ¡°Lo que m¨¢s deseaba era jugar. Los d¨ªas que ten¨ªamos entrenamientos m¨¢s f¨ªsicos, enseguida se quejaba y dec¨ªa: `Esto no es atletismo, esto es f¨²tbol¡±.
Ronaldinho disput¨® con la zamarra azulgrana 207 partidos y autografi¨® 97 goles. El Bar?a, con el 10 brasile?o como emblema de juego, se alz¨® con dos Ligas (2004/2005 y 2005/06), dos Supercopas de Espa?a (2005 y 2006) y una Liga de Campeones (2005/06). Y cada vez que el Ronnie levantaba sus dedos ¨ªndice y pulgar, el barcelonismo le rend¨ªa el mejor homenaje que pod¨ªa recibir: sonre¨ªa. Pero la llama del f¨²tbol del Gaucho se fue apagando y en el verano del 2008 dej¨® el Bar?a y parti¨® rumbo al Mil¨¢n. Sin embargo, en la memoria del pueblo azulgrana no se borra la sonrisa eterna de Ronaldinho y ser¨¢ recordado por siempre como el futbolista que cambi¨® al Barcelona.
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