Mano de entrenador

El Bar?a tiene de nuevo entrenador en la figura de Martino. No es que Vilanova no lo fuera sino que la enfermedad le impidi¨® completar su obra despu¨¦s de una primera vuelta de r¨¦cord en la pasada Liga. Los jugadores se vaciaron nada m¨¢s comenzar la temporada con la complicidad del t¨¦cnico, convencidos de que se impon¨ªan resultados para demostrar que el equipo ten¨ªa futuro sin Guardiola, y vivir despu¨¦s de rentas. El c¨¢ncer debilit¨® a Tito y el club apost¨® por una soluci¨®n transitoria como la de Roura con el benepl¨¢cito de los futbolistas. El plantel es tan c¨®mplice como la directiva del mal final que tuvo el curso ante el Bayern. Hubo descompresi¨®n y se desatendieron las obligaciones despu¨¦s de un ¨²ltimo a?o ya muy estresante con Guardiola. El cargo de entrenador vuelve a tener sentido con la llegada de Martino. Los futbolistas han vuelto al campo de entrenamiento y a la sala de juego porque reconocen la autoridad del nuevo t¨¦cnico.

¡°Hemos recuperado automatismos que se perdieron con el tiempo por la ausencia de Tito¡±, observ¨® Xavi. ¡°El a?o pasado entrenamos poco t¨¢cticamente¡±. Aunque Vald¨¦s intent¨® matizar las palabras del volante ¡ª¡°se le ha malinterpretado¡±¡ª, Alves y Busquets incidieron en la misma l¨ªnea despu¨¦s de golear al Levante. ¡°Soy un enamorado de los conceptos del Bar?a y mi deber es recuperar algunas cosas que se dejaron de hacer y los muchachos lo saben¡±, respondi¨® Martino¡±. ¡°No quiero ofrecerles nada nuevo. Lo que hoy hacen lo hicieron en su momento¡±.

Si Messi aprieta como el que m¨¢s y es sustituido, los dem¨¢s deben correr y aceptar los cambios

Volvi¨® el equipo a juntarse en campo contrario, la presi¨®n fue muy alta y se jug¨® con intensidad, ambici¨®n y dinamismo. Apenas hubo concesiones defensivas y a cambio los ataques fueron frecuentes, r¨¢pidos y certeros. Hubo m¨¢s movimientos de ruptura de los delanteros y el f¨²tbol pareci¨® m¨¢s r¨¢pido y profundo, de menos conducci¨®n, frente a un contrario parado y desbordado. ¡°La clave de nuestro ¨¦xito ha sido siempre la presi¨®n y la hemos recuperado¡±, precis¨® Vald¨¦s. ¡°Nos viene bien reducir el campo: aprieta la defensa, los delanteros tienen menos campo que recorrer¡± y los medios llegan antes y mejor.

Una de las novedades que ha introducido Martino es la verticalidad de los centrocampistas. No quiere que bajen a recibir, prefiere que anticipen y saquen el bal¨®n los centrales y demanda a los interiores que se arrimen m¨¢s para dar el ¨²ltimo pase. Xavi y especialmente Cesc ganaron protagonismo frente a los laterales al tiempo que los extremos daban amplitud a la cancha. Los volantes penetran m¨¢s por el centro, son m¨¢s directos, y aparentemente solo se abre una de las dos bandas.

Hemos recuperado automatismos que se perdieron con el tiempo por la ausencia de Tito¡±, observ¨® Xavi

Tambi¨¦n ha cambiado la defensa de las jugadas de estrategia. Ya no se combaten las faltas y los c¨®rners en zona sino con marcas individuales. ¡°A mi me gusta m¨¢s la nueva f¨®rmula¡±, aplaudi¨® Vald¨¦s. ¡°El portero dispone de m¨¢s espacio¡±. Martino a?adi¨® con sorna: ¡°Y si hubiera un trabajo para que los jugadores pudieran crecer 10 cent¨ªmetros, lo har¨ªamos¡±.

El intervencionismo del t¨¦cnico fue significativo en el trabajo de campo y en la alineaci¨®n: si Messi aprieta como el que m¨¢s y es sustituido despu¨¦s de 100 partidos, todos los dem¨¢s deben correr y aceptar los cambios; si Neymar es suplente, nadie puede reclamar la titularidad; si Iniesta, Alba y Neymar descansan despu¨¦s de un partido de selecciones, a cualquier internacional le pueden afectar las rotaciones. El t¨¦cnico pretende no perder a los jugadores consolidados y ganarse a los m¨¢s discutidos como Cesc y Alexis. Desde la seriedad y la proximidad, el entrenador aboga por la cultura del esfuerzo frente al politiqueo. Martino quiere recuperar d¨ªa a d¨ªa las cosas que el equipo fue perdiendo poco a poco por circunstancias tan variables y dram¨¢ticas como la reca¨ªda de Tito. Tata busca la esencia del Bar?a.