Nadal desenfunda primero
El mallorqu¨ªn, que espera a Silva en segunda ronda, golpea antes la pelota para proteger sus articulaciones ¡°La idea es anticiparse y correr menos¡±, dice Toni, su entrenador
¡°Ah¨ª hay peligro, no te pongas por favor¡±. Tres botellas de colores el¨¦ctricos esperan sobre el cemento azul de la central del Abierto de Estados Unidos. Rafael Nadal, que las otea desde el otro lado de la red, ha pilotado su distribuci¨®n con precisi¨®n (¡°est¨¢ a un metro de la l¨ªnea, ?verdad?¡±; ¡°esa para un ataque corto¡±; ¡°esa para una bola¡¡±). Tras cerrar una pr¨¢ctica de m¨¢s de hora y media, el n¨²mero dos se despide de su compa?ero de entrenamientos y dedica 20 solitarios minutos a perfeccionar el sistema de ataque que le ha llevado a ganar dos Masters 1.000 sobre cemento en la gira veraniega. Nadal, que se las ver¨¢ con el brasile?o Silva en segunda ronda, pone la diana en las botellas y dispara. Sus tiros son violentos. El destino, concreto: donde ahora se posan sus objetivos debe rematar los peloteos en los partidos. En la pr¨¢ctica lo hace con tanto ¨ªmpetu que advierte del peligro a quien est¨¢ en la trayectoria de la pelota. Importa la bala, pero tambi¨¦n el pistolero. Toni Nadal, su t¨ªo y t¨¦cnico, le corrige los gestos para que la pelota no se venza contra ¨¦l y le coma el espacio.
¡°Nadal le pega ahora a la pelota antes, cuando est¨¢ subiendo¡±, dicen en el vestuario. ¡°Ha cambiado su juego¡±, a?ade Novak Djokovic, el n¨²mero uno, que debut¨® despachando 6-1, 6-2 y 6-2 al lituano Barankis, un resultado algo enga?oso, porque afront¨® ocho bolas de break en contra. ¡°Juega m¨¢s dentro de la pista. Sabe que tiene que ser m¨¢s agresivo¡±.
¡°?Aguanta! ?Mira! ?M¨¢s adelante! ?No aguantes tanto!¡±, va diciendo en mallorqu¨ªn su entrenador, que se lamenta (¡°?Nooo!¡±) por un mal gesto t¨¦cnico hasta que descubre que su sobrino ha roto cuerdas.
Le pega cuando la bola sube, con lo que le acorta distancias al rival¡± ?lex Corretja
Invierno en Per¨²
La vuelta de Rafael Nadal al circuito tras un par¨®n de siete meses por lesi¨®n ha provocado una competici¨®n a brazo partido en los mercados que no han podido verle jugar en partidos oficiales.
As¨ª, el espa?ol se enfrentar¨¢ este invierno a David Ferrer en una exhibici¨®n en Per¨², que se presentar¨¢ como una reedici¨®n de la final de Roland Garros, y a David Nalbandian en dos partidos amistosos en Argentina. ¡°Pero estamos convencidos¡±, explicaron fuentes conocedoras de las negociaciones contractuales que afectan al mallorqu¨ªn; ¡°de que jugar¨¢ alguna [exhibici¨®n] m¨¢s en Sudam¨¦rica en la misma ¨¦poca¡±.
El Abierto de EE UU, ¨²ltimo grande del a?o, act¨²a tambi¨¦n como mercado de fin de temporada. M¨¢s en d¨ªas como el de ayer, anegados por la lluvia. As¨ª, igual que los tenistas firman sus contratos de patrocinio, representaci¨®n o exhibiciones, los torneos y los agentes negocian otros asuntos. Por ejemplo, en estos momentos se intenta llegar a un acuerdo econ¨®mico de ¨²ltima hora para que lo que queda del torneo se retransmita por televisi¨®n en Espa?a.
¡°Se trata de que pueda anticiparse, esa es la idea. A veces sale, a veces no. ?Claro que Rafael es m¨¢s agresivo!¡±, explica el entrenador en los pasillos de la mastod¨®ntica Arthur Ashe. ¡°Este es el tema por el cual corremos menos. En Montreal y Cincinnati jug¨® con una posici¨®n m¨¢s adelantada y agresiva. Y para ser m¨¢s agresivo hay que golpear antes¡±, a?ade. ¡°Es una cuesti¨®n de decisi¨®n. El tema de las botellas sirve de referencia. Lo hemos hecho muchas veces para hacer punter¨ªa. El tenis es golpear fuerte pero con punter¨ªa. Es m¨¢s f¨¢cil cuando tienes una referencia¡±.
¡°En los entrenamientos le veo pegando la pelota subiendo mucho¡±, dice ?lex Corretja, el seleccionador, para describir ese agresivo golpeo que le roba tiempo y espacio al contrario, ¨¤ la Djokovic. ¡°Hist¨®ricamente, nosotros [los espa?oles] la dej¨¢bamos caer m¨¢s. Ahora nos damos cuenta de que cuando sube es cuando m¨¢s impacto le puedes dar, y que adem¨¢s le acortas distancia al rival. Si dejas la pelota caer un metro, pierdes dos [porque el contrario recupera espacio]¡±, a?ade. ¡°Para darle subiendo tienes que tener mucha movilidad y rapidez de piernas y mucha aceleraci¨®n en los golpes. Lo que tiene Rafa¡±, sigue sobre los ejercicios. ¡°Cuando acabas el entrenamiento es cuando mejor sientes la pelota y ah¨ª es donde te das cuenta de si te giras m¨¢s, si tiras la raqueta m¨¢s para abajo, m¨¢s para arriba¡ y te da una muy buena sensaci¨®n. Cada uno pone los objetivos donde cree que har¨¢ m¨¢s da?o¡±.
Nadal compite desde un gran sentido de la autoprotecci¨®n. A los 27 a?os y tras volver en febrero de siete meses parado por una lesi¨®n, busca preservar su armadura sin quitarle filo a su juego. Nada m¨¢s volver a las pistas, el espa?ol defini¨® 2013 como un curso de ¡°transici¨®n¡±. Sin embargo, el proceso iniciado para cambiar su estilo y proteger sus rodillas ha dado r¨¦ditos inmediatos: ha disputado la final de once de los doce torneos que ha competido y ha celebrado los dos Masters 1.000 previos al Abierto de EE UU, lo que no consegu¨ªa nadie desde 2003 (Andy Roddick). El espa?ol, brillante sobre cemento, a¨²n busca consolidar el proceso.
¡°En alg¨²n momento¡±, dijo sobre su debut ante Harrison; ¡°jugu¨¦ m¨¢s por detr¨¢s de la l¨ªnea de fondo que en los torneos previos. Necesito irme adaptando a las pistas y a estas pelotas, que son distintas a los torneos anteriores. Son m¨¢s lentas¡±. A Nadal le han cambiado las balas, pero no la escopeta ni las intenciones: anclado sobre la l¨ªnea de fondo, ¨¦l es ahora quien dispara primero.
2? ronda. Mujeres. C. Su¨¢rez-C. Vandeweghe (EEUU), 6-3 y 6-4. A. Radwanska (Pol.)-T. Torr¨®, 6-0 y 7-5
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