El otro Neymar

Definitivamente, me gusta Neymar. Creo que el d¨ªa que abandone su excesiva admiraci¨®n a Messi y ocupe el terreno de juego sin perfilarse siempre en busca del crack argentino, ese d¨ªa, nos dar¨¢ alegr¨ªas definitivas. Neymar es un jugador complet¨ªsimo. El gol de falta de Messi al Ajax tambi¨¦n lo podr¨ªa haber metido Neymar si hubiera decidido hacerlo sin el permiso de aqu¨¦l. Es un gran lanzador de faltas y un no menos eficaz lanzador de centros, como el que posibilit¨® el cabezazo a la red de Gerard Piqu¨¦.
Pero a m¨ª ahora me interesa subrayar otra virtud en el jugador brasile?o. Su condici¨®n de fajador, no menos importante que su privilegiada visi¨®n de juego y su art¨ªstico m¨¦todo para encarar porter¨ªas. Creo que ya est¨¢ demostrado que Neymar es y ser¨¢ el delantero m¨¢s zancadilleado, golpeado y pateado de la liga espa?ola. Y creo que ¨¦l tambi¨¦n ya lo sabe. Lo sabe tanto que ni se preocupa por esquivar los guada?azos de que es v¨ªctima. A veces da la impresi¨®n de que los provoca, cuando encara o cuando ya tiene en su mente el t¨²nel o el regate acrob¨¢tico que infligir¨¢ al defensa.
Me sorprende esa capacidad para encajar la agresi¨®n, ese don para metabolizar la furia vengativa del defensa agraviado por su delicadeza balomp¨¦dica. Neymar cae varias veces en un partido y en lugar de quejarse (como lo hace con sistem¨¢tico aspaviento Cristiano Ronaldo), se levanta sin rechistar. Neymar est¨¢ programado para hacer da?o al contrario con la pelota y sabe que la ¨²nica manera de pararlo es hacerle da?o a ¨¦l sin ella.
Siento una especial admiraci¨®n por la gente sufrida, por los fajadores. Neymar re¨²ne en su figura una rara condici¨®n que le permite asimilar toda la lluvia de faltas que se urdan contra sus piernas. Hay algo el¨¢stico en sus huesos, una ligereza en sus ca¨ªdas que hace que parezca que antes de caer al c¨¦sped ya est¨¦ levantado para proseguir su camino al gol o a la asistencia mort¨ªfera. Un artista y un fajador en una sola persona. ?Qu¨¦ lujo!
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