Bar?a y Madrid, duelo de ciclones

Tres meses y medio despu¨¦s de su apasionante serie por el t¨ªtulo de Liga, el Real Madrid y el Barcelona vuelven a encontrarse en otra final, la de la Supercopa, este s¨¢bado en el Buesa Arena de Vitoria (19.00, TVE-1 y TV-3). El primer aleteo de la temporada demostr¨® lo fuertes y bien pertrechados que comparecen. Dieron cumplida cuenta en las semifinales del Bilbao Basket y del Laboral Kutxa. El Madrid, con el mismo n¨²cleo de jugadores que le dio la Liga y tambi¨¦n la Supercopa la pasada campa?a, arroll¨® al Bilbao (100-61) y brind¨® un festival de juego r¨¢pido e incisivo y un asombroso acierto que le permiti¨® sumar 19 triples. El Barcelona, sin Navarro y Lorbek, todav¨ªa convalecientes de sendas operaciones, pero con un impresionante desfile de nuevas incorporaciones, desarbol¨® al Baskonia (73-98).

Pareci¨® que, sin enfrentarse directamente, los dos grandes compitieran por ver cu¨¢l de ellos, frente a rivales muy diferentes, era capaz de agrandar m¨¢s estampa. El Madrid estableci¨® un r¨¦cord con sus 53 puntos en la media parte ante el Bilbao. Y poco despu¨¦s, el Barcelona lleg¨® a los 54 ante el Baskonia. A ambos les bast¨® pr¨¢cticamente con esos 20 primeros minutos para solventar las semifinales. El Madrid lleg¨® a los 100 puntos y acab¨® ganando por 39 de ventaja; el Barcelona se fue a los 98 puntos y su renta final fue de 25. El duelo est¨¢ servido y el aperitivo no pudo ser m¨¢s suculento y prometedor.

Las seis nuevas incorporaciones del Barcelona se lucieron en Vitoria, en especial el esloveno Nachbar, letal en sus lanzamientos. Dorsey y Lampe refuerzan el interior de la pintura, aunque fue Tomic quien m¨¢s se aprovech¨® de la superioridad de los gigantes azulgrana frente a Hamilton, Pleiss y un Nocioni al que Sergio Scariolo sit¨²a en la posici¨®n de cuatro. El argentino empez¨® muy bien, anotando y sacando faltas a Lampe y Todorovic, pero acab¨® desquiciado y abroncado en p¨²blico por su entrenador, en un s¨ªntoma evidente del desbarajuste y la inferioridad en que se sumi¨® el equipo de Vitoria.

En la primera semifinal, el Madrid parti¨® como un b¨®lido, como si precisara un golpe de efecto temprano y dejar hecho papilla a un Bilbao Basket, que zigzague¨® entre la impotencia, la rendici¨®n antes del descanso y el papel de simple telonero. Afinadas las mu?ecas, desinhibido y vibrante su juego, fresco f¨ªsicamente y con el mismo esqueleto que le permiti¨® bailar en plan campe¨®n en la Liga hace menos de cuatro meses, la escuadra de Pablo Laso arroll¨® al Bilbao Basket. El equipo del novel Rafael Pueyo resisti¨® el primer cuarto. A partir de ah¨ª, el aluvi¨®n de triples devast¨® el aro de los bilba¨ªnos. Carroll, que por momentos pareci¨® infalible y acert¨® en sus cuatro primeros disparos desde la m¨¢xima distancia, marc¨® un ritmo inaudito al que se sumaron Rudy Fern¨¢ndez, Mirotic, Llull, Sergio Rodr¨ªguez... Gan¨® el Madrid por 39, pero pudo hacerlo por 50 porque inevitablemente se destens¨® ligeramente al final dada la desaparici¨®n de su rival.

El Bilbao resisti¨® diez minutos, en los que dio incluso buena pinta, con un primer arre¨®n autoritario de Mumbr¨² frente a Darden y Dani D¨ªez y algunas acciones interesantes y rentables entre Ra¨²l L¨®pez y el lituano Kavaliuskas. Pero la defensa del Bilbao no consigui¨® ajustar los espacios y lo pag¨® muy caro. El Madrid se sinti¨® cada vez m¨¢s c¨®modo, con el ritmo propio del s¨¦ptimo de caballer¨ªa en el que tan bien se desenvuelve. Pill¨® todo el tiempo a contrapi¨¦ a la defensa del Bilbao, con Llull, Draper y Sergio Rodr¨ªguez muy a gusto moviendo al equipo a discreci¨®n.

El Madrid dispuso de tantos espacios que apenas necesit¨® explotar su juego interior. Tal vez por eso apenas se dejaron ver sus nuevos fichajes, el griego Bourousis y el tunecino Mejri, y tampoco se prodigaron Slaughter y Felipe Reyes. Mirotic fue el ¨²nico de los hombres grandes del Madrid que, gracias a su versatilidad, pudo a?adirse a la fiesta que se dieron Carroll, y compa?¨ªa desde el exterior.

Sergio Rodr¨ªguez, en su salsa, redonde¨® una actuaci¨®n complet¨ªsima y acab¨® con 14 puntos, 12 asistencias y cuatro robos de bal¨®n. Mirotic sum¨® 18 puntos y siete rebotes. El Madrid concluy¨® con un impresionante 19 de 35 en triples, un 54% de acierto, un r¨¦cord en la Supercopa que roz¨® el de 20 triples que ostenta el Joventut en la Liga Endesa.